El París de Haussmann

Introducción En el siglo XIX, París era una ciudad sumida en la anarquía y que hervía en rebeliones, quienquiera que estuviera en el poder. Se hacía difícil mantener el control en las estrechas y sinuosas calles, en las cuales el pueblo montaba fácilmente barricadas y era imposible movilizar a las tropas. Napoleón III, consciente de su débil influencia en el poder, decidió tratar de imponer una disciplina al populacho y de cambiar el trazado de la ciudad. Entre 1852 y 1870 el Prefecto del Sena, el barón Georges Haussmann, empezó la remodelación de París arrasando literalmente barrios enteros de la ciudad y enviando a más de 200.000 personas sin recursos a vivir en sórdidos barrios del extrarradio. Sólo en la Île de la Cité se trasladó a 25.000 personas y en todo París se derribaron miles de casas y muchos edificios relevantes. Se ensancharon y enderezaron las calles principales, se crearon parques, se construyó un buen sistema de alcantarillado y se edificó la Ópera y las estaciones de ferrocarril. De la planificación de Haussmann surgió el París moderno, una ciudad elegante y burguesa con bulevares anchos y arbolados y espacios abiertos con buenas vistas de los monumentos.

Uno de los numerosos edificios derribados fueron las murallas de la ciudad. En su lugar se construyó una ronda, el Boulevard Périphérique. Por primera vez toda la zona comprendida en ese anillo fue incorporada a la Ville de Paris y los barrios fueron divididos en 20 arrondissements. Hoy en día este sistema sigue en vigor: empieza en el centro de París, el Louvre, con el primer Arrondissement y va formando una espiral en el sentido de las agujas del reloj hasta el vigésimo. Todo lo que está situado más allá del Périphérique forma parte de las afueras. En todos los rótulos de las calles y en los mapas se indica el arrondissement junto al nombre de éstas.

Vista aérea de la Place de l'Etoile, rediseñada por Haussmann, con anchos bulevares en disposición radial a partir del Arco de Triunfo.

Mapa que muestra en rojo las calles trazadas por Haussmann entre 1850 y 1870.

Paseo por el París de Haussmann (Plaza de la Bastilla - Calle Rívoli - Jardines de las Tuilerías - Plaza de la Concordia – Avenida de los Campos Elíseos – Plaza Charles de Gaulle) El trazado vial constituye el principal componente del plan Haussmann. El sistema de directrices radiales, se convierte en el modelo de los Boulevards, largas y anchas avenidas rectilíneas que culminan en los principales edificios públicos o en los cruces polidireccionales. Uno de sus principales componentes es el eje este - oeste, formado por la Calle Rívoli (que comienza en la Plaza de la Bastilla) y la Avenida de los Campos Elíseos (que desemboca en la Plaza Charles de Gaulle), a lo largo del cual se desarrollará nuestro paseo por París.

Plaza de la Bastilla Calle Rívoli A lo largo de las grandes avenidas se levantan las casas de apartamentos de la burguesía, de 6/7 pisos, que establecen el modelo estándar de vivienda especulativa para la clase dominante. El decoro urbano de la trama queda establecido por la uniformidad de los basamentos, las cornisas, la altura de los edificios que constituyen el telón escenográfico de la falsa respetabilidad burguesa.

Cuando contrató a Haussmann, Napoleón III tenía pensada la finalidad de conseguir calles demasiado anchas para que los rebeldes no construyeran barricadas y donde pudieran circular batallones en formación y la artillería, si se diera tal necesidad. Haussmann creó anchas avenidas unidas con las principales estaciones de tren, de manera que las tropas de provincias pudieran estar operativas en un corto periodo de tiempo. Las trascendentales reformas llevadas a cabo siguen rigiendo la fisonomía y el funcionamiento de París aun hoy en día. Así las famosas calles del centro de la ciudad se conservan con el mismo trazado original proyectado entre 1852 y 1870.

Jardines de las Tuilerías Haussmann eliminó muchas calles antiguas, serpenteantes y derribó casas de apartamentos. Las reemplazó con anchos bulevares, flanqueados por árboles y creó extensos jardines por los que París es hoy en día famoso. Asimismo, el plan incluyó también una altura uniforme de los edificios y elementos de referencia como el Obelisco de la Plaza de la Concordia y el Arco del Triunfo, creando una escala y ejes de circulación en torno a los que se articularía el urbanismo de la ciudad.

Plaza de la Concordia En estas imágenes se observa la regularidad formal y escala que imponen una coherencia visual a la trama del hábitat, al trazado vial y a los puntos focales determinados por los hitos de la ciudad.

Avenida de los Campos Elíseos y Plaza Charles de Gaulle La plaza tiene un diseño geométrico en forma de estrella que forman las doce avenidas que nacen en forma de abanico y que convergen en el Arco del Triunfo.

Con la renovación, se crearon nuevos espacios en los que la burguesía hizo ostentación de su nueva riqueza, creando una economía floreciente. Todos los ejemplos de cambios que acontecieron en París en esta época pueden verse en representaciones de la ciudad. Hay dos perspectivas sobre el Barón Haussmann: una la representa como el hombre que destruyó el París antiguo, y otra como el hombre que creó el Nuevo París.