¿Violencia machista y violencia feminista? Que tontería más grande es esa. Porque pensándolo bien: no podríamos hacer la compra, ni podríamos -por miedo- salir de casa: ni ellos ni ellas, por mucho dinero que tengamos

Soy médico por la Facultad de Medicina de Santiago de Compostela Si tenemos miedo a medicar, también y en lenguaje absurdo que es el que sigue al deambular del hombre, el hombre sigue el principio de la contradicción, es decir, como diría Shakespeare, ser o no ser, esa es la cuestión, o como mejor dijo: Sócrates el creador de la mayeútica, el hijo de la partera o matrona, el mismo que se bebió la cicuta: decía “hagas lo que hagas, te arrepentirás de haberlo hecho”. Siempre pienso, que Dios me quiere mucho por permitirme seguir viviendo. Y que yo sepa nunca he hecho daño a nadie. Pero hay pecados por omisión. Hoy que se cumple 70 años de la masacre de la primera bomba atómica, que mandando Truman, dio fin a la 2ª guerra mundial en Hiroshima. ¿Pecador? Si mucho como todos. Hoy he ido a la Sta. Misa y comulgado. Al final cantamos la Salve Marinera: ¡que emoción! Yo estaba al lado de la Virgen del Perpetuo Socorro (patrona de los médicos)

Cerca de mi casa hay una charcutería que hoy domingo esta cerrada: la festividad de hoy es “San Bernardo”. Lo mismo Dios quiere que ya no siga escribiendo en esta página: ¿Quién sabe? Pues bien en esa charcutería yo siempre hay un cartelito que dice: “Si maltratas a ella…maltrátasme a min … abajo la violencia machista”. Y yo le digo: Pues podríais decir al contrario: “Si maltratas a él…. Abajo la violencia feminista”. Y ella “Pili”, viuda, me dice: pero si sois el sexo débil. Y yo entre llorando y riendo–no atreviéndome- le digo: dame un beso, guapa. Y se lo robo Y entonces me marcho, entre azorado y avergonzado. Recordando esas palabras que Doña Carmen, decía a su hijo JoseMaría: “vergüenza solo para pecar”; Recuerdo una frase del escritor José María Pemán : posteriormente nombrado marqués de Salobreña que prefiero callarme por aquello que secreto que pase de dos, ya no es secreto. O si quieres puedes consultarlo en Internet.

Y mi cuerpo de 62 años, a la edad en la que murió Aristóteles –el sabio preceptor de Alejandro Sale entre acribillado y dolido, recordando aquellas palabras que recogió mi padre –el alcalde y poeta-:si hago un mal grande, dáme un arrepentimiento mayor; mirando la imagen del Pantocrator: “Jesús que todo lo perdona” el que decía: dejad que los niños se acerque a mí porque de ellos es el Reino de los Cielos. No se si alguien verá este escrito, pero si no es así mi ángel de la guarda entre lágrimas y sollozos se las presentará a Dios, Omnipotente, Omnisciente, Padre de esta carne, que hizo los ordenadores, los programas y las personas que operan sobre ellos. Y nuestra carne mortal, que algún día resucitara para dar a Dios gloria sin fin…

Porque si ustedes no lo saben Yo padezco depresión y diabetes y me niego a ponerme pañales. Recuerdo en mi juventud entré ya médico- en una discoteca que le llamaban INK: y reconociendo caras de conocidos/as. Después de haber estado un buen rato allí –íbamos tres amigos varones- y yo les dije a ellos, vámonos mejor porque una buena mayoría de estos, estarán pidiéndonos la receta, para conseguir los pañales de incontinencia. Fin 20 agosto 2015.