DÉDALO E ÍCARO Departamento de Latín IES Rafael Alberti de Cádiz
DÉDALO ERA UN ARTISTA ATENIENSE QUE HABÍA APRENDIDO SU ARTE CON LA DIOSA ATENEA. SU SOBRINO TALOS ERA MEJOR ARTISTA QUE ÉL. DÉDALO, CELOSO, LO ARROJÓ DESDE EL TEJADO DEL TEMPLO DE ATENEA, PERO LA DIOSA LO CONVIRTIÓ EN PERDIZ Y SALIÓ VOLANDO. POR ESA RAZÓN FUE DESTERRADO A CRETA, A LA CORTE DEL REY MINOS, DONDE TUVO CON UNA JOVEN ESCLAVA DOS HIJOS: ÍCARO Y YÁPIGE.
MINOS LE ORDENÓ A DÉDALO QUE CONSTRUYERA EL LABERINTO DE CRETA CON UNA SOLA PUERTA DE ENTRADA Y SALIDA. ALLÍ ESCONDIÓ AL MINOTAURO, PARA QUE NO SE CONOCIERA LA VERDAD SOBRE ESTE HIJO QUE TUVO SU ESPOSA PASÍFAE CON EL TORO, QUE LES REGALÓ POSEIDÓN.
DÉDALO CONSTRUYÓ ALAS CON PLUMAS Y CERA PARA ESCAPAR. UNA VEZ TERMINADO EL LABERINTO, MINOS ENCERRÓ EN ÉL A DÉDALO Y A SU HIJO ÍCARO, PARA MANTENER EN SECRETO LA FORMA DE SALIR DEL LABERINTO. DÉDALO CONSTRUYÓ ALAS CON PLUMAS Y CERA PARA ESCAPAR. DÉDALO ACONSEJÓ A SU HIJO ÍCARO QUE NO VOLARA DEMASIADO BAJO, PARA EVITAR QUE LAS ALAS SE MOJARAN EN EL MAR, NI DEMASIADO ALTO, PARA EVITAR QUE EL CALOR DEL SOL DERRITIERA LA CERA. PADRE E HIJO LOGRARON ESCAPAR ASÍ DEL LABERINTO.
ÍCARO CAYÓ AL MAR AHOGÁNDOSE ANTE LA MIRADA DE SU PADRE. ÍCARO SE ACERCÓ TANTO AL SOL QUE LA CERA DE LAS ALAS SE DERRITIÓ Y LAS PLUMAS COMENZARON A DESPRENDERSE. ÍCARO CAYÓ AL MAR AHOGÁNDOSE ANTE LA MIRADA DE SU PADRE. DÉDALO, MIENTRAS ENTIERRA A SU HIJO, VE QUE UNA PERDIZ SE LE ACERCA.
SEGÚN LA LEYENDA, LAS PLUMAS QUE QUEDARON FLOTANDO SOBRE EL MAR TIEMPO DESPUÉS FORMARON LAS ISLAS ÍCARAS, LLAMADAS ASÍ EN RECUERDO DEL JOVEN QUE INTENTÓ VOLAR HACIA EL SOL.