No sólo está presente, sino que le tenemos que comer
No fue fácil aceptarlo para la gente y para los mismos apóstoles. Veamos lo que nos dice hoy el evangelio, final de la proclamación de la Eucaristía. Jn 6, Dice así:
¿quién puede hacerle caso?”
Adivinando Jesús que sus discípulos lo criticaban, les dijo: “¿Esto os hace vacilar?,
Desde entonces, muchos discípulos suyos se echaron atrás y no volvieron a ir con él.
“¿También vosotros queréis marcharos?”
Palabra del Señor
La primera lectura nos presenta a Josué, el hombre fiel a Dios, después de Moisés, que oraba por su pueblo. Veía que los israelitas se apartaban de Dios; hasta que un día se enfrentó con el pueblo.
“Elegid a quién servir”. “Mi familia y yo serviremos al Señor”. Los israelitas aceptaron servir al Señor.
pero la Eucaristía nos dará la fuerza necesaria.
Automático
A quién iremos, Señor, a quién iremos?
A quién iremos, Señor, a quién iremos?
AMEN