acudo a ti, Madre mía, porque necesito tu presencia y tu cercanía. nosotros sentimos tu presencia, tu cercanía.
Te sentimos en nuestros gozos y alegrías, en nuestras penas y sufrimientos.
Acudimos a ti que siempre nos cobijas,
para que nos lleves dentro de ti.
Madre del Carmen, tú de verdad nos quieres.
No nos abandones nunca
a lo largo de nuestra vida
En esta parte de la tierra de tus amores
te saludan los vecinos de la Barriada del Carmen
y van junto a ti, que eres su Madre
Porque desde siempre fuimos juntos, Tú y nosotros
Nuestro amor es para tí
desde el inicio hasta hoy; y lo será siempre
Porque cuando todavía estaba todo por hacer, ya alentabas nuestros proyectos,
nuestras familias, y nuestras vidas
en nuestras reuniones y en nuestras relaciones
Presente en una Parroquia que comenzaba,
que se ilusionaba y que levantaba la fe de nuestro barrio
¡A ellos les debemos mucho; pero sobre todo a ti, Virgen del Carmen!
¡Gracias, Madre nuestra!