Muchos problemas matrimoniales pueden ser evitados con buena y sabia administración financiera. Aunque el deseo de Dios es para prosperarnos, uno puede experimentar su bendición con cuestiones de la mala administración y distribución financiera.
Unos pasos para mejorar las finanzas:
1.Reconoce que el 100% es de Dios - Cuando reconoces que Dios es el dueño de todo, invertirías y sembrarías mejor. Cada vez que compras o siembras algo tendrás una cosecha desde allí. La comida, la televisión, la música, la bebida, los muebles, el ejercicio, la educación, todo tendrá una cosecha. ¿Tienes la cosecha que desees?
“Mía es la plata, y mío es el oro, dice Jehová de los ejércitos” Hageo 2:8 2.Poner aparte lo que vas a sembrar - Sembrando responsablemente requiere administración y planeación.
“Cada primer día de la semana cada uno de vosotros ponga aparte algo, según haya prosperado, guardándolo, para que cuando yo llegue no se recojan entonces ofrendas” 1 Corintios 16:2 3.Tener un presupuesto con tus semillas. - Vive conforme un presupuesto. Incluye en tu plan la forma en que podrás sembrar más cada año al reino de Dios.
“Pues si en las riquezas injustas no fuisteis fieles, ¿quién os confiará lo verdadero?” Lucas 16:11 4.Vive por debajo de tus ingresos - Cuándo hay aumento en los ingresos, no necesariamente debes de tener un incremento en los gastos.... ¡Piensa Sembrar!
Tenemos que aprender la importancia de subir nuestra capacidad de ahorro e inversiones. Viviendo conforme un presupuesto me dará un enfoque más claro.