FIESTA DE TODOS LOS SANTOS
EXPOSICIÓN ¿Quiénes son los Santos? Niños y niñas, hombres y mujeres que han respondido a la llamada de Dios, intentando vivir las bienaventuranzas, compartiendo la ternura de Dios con todos los hombres. Están ahora junto a Dios. Son una multitud, gentes sencillas; muchos de ellos no han hecho nada extraordinario, sino que con sus actos y palabras han repartido luz y alegría en la vida de cada día, son ejemplos y testigos del amor de Dios.
En el Evangelio, Cristo señala el camino para ser Santo: LAS BIENAVENTURANZAS
Dichosos los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los Cielos.
Dichosos los sufridos, porque ellos heredarán la tierra Dichosos los sufridos, porque ellos heredarán la tierra. Dichosos los que lloran, porque ellos serán consolados.
Dichosos los que tienen hambre y sed de la justicia porque ellos quedarán saciados.
Dichosos los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
Dichosos los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.
Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los cielos.
Dichosos vosotros cuando os insulten y os persigan, y os calumnien de cualquier modo por mi causa.
Estad alegres y contentos porque vuestra recompensa será grande en el cielo.
ANÁLISIS El día de todos los santos es una fiesta donde podemos recordar a tantas personas que hemos conocido, entre nuestros amigos y nuestras familias, que están en Dios y con Dios y que son santos, aunque no hayan sido reconocidos canónicamente. Sin duda, una fiesta de acción de gracias por haber tenido a tantos santos a nuestro alrededor, en nuestras casas, en nuestras familias, en nuestros círculos más cercanos.
Comenta la bienaventuranza que más te haya llamado la atención. Interpreta estas palabras de Jesús: “Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré”
EXPRESIÓN Y COMPROMISO Señor Dios nuestro, tú quieres que seamos felices con tu propia felicidad. Llena nuestra vida de cada día con tu presencia salvadora. Indícanos el camino de la felicidad auténtica y que dura hoy, mañana y siempre. AMÉN