Propósitos para la Cuaresma Click

“Este es el ayuno que yo amo soltar las cadenas injustas, desatar los lazos del yugo, dejar en libertad a los oprimidos y romper todos los yugos; compartir tu pan con el hambriento y albergar a los pobres sin techo; cubrir al que veas desnudo y no despreocuparte de tu propia carne”. (Isaías 58, 6-7) Rezaré con otra persona un misterio del Rosario pidiendo a María que Cristo reine en todos los hogares.

"Despojémonos, pues de las obras de las tinieblas y revistámonos de las armas de la luz". (Romanos 13,12) En cualquier lugar donde esté, procuraré unirme espiritualmente a Cristo Eucaristía y, si puedo, lo recibiré en la Comunión.

"A ti Señor, la justicia, a nosotros, la vergüenza en el rostro, porque hemos pecado contra ti". (Daniel 9, 7-8) Por el incremento de la fe en los países de misión, hoy rezaré el Vía Crucis.

Visitaré a un enfermo u ofreceré mi ayuda a alguien que lo necesite. "Mi delito yo lo conozco, mi pecado sin cesar está ante ti". (Salmo 50) Visitaré a un enfermo u ofreceré mi ayuda a alguien que lo necesite.

Daré una limosna que me cueste para ayudar a una persona necesitada. "Confío en el Señor y en sus palabras, porque del Señor vienen la misericordia y el perdón". (Salmo 129,5) Daré una limosna que me cueste para ayudar a una persona necesitada.

y reine la paz en el Mundo. “¿Qué Dios hay como tú, que quitas la iniquidad y pasas por alto la rebeldía, pues te complaces en ser misericordioso?" (Miqueas 7,18) Viviré la Santa Misa con especial fervor ofreciéndola para que todos los pueblos sean evangelizados y reine la paz en el Mundo.

"Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonarnos y purificarnos de toda maldad. ". (I Juan 1, 9) Pediré perdón a Dios por mis faltas asistiendo con sincero dolor al sacramento de la Reconciliación.

"Recuerda Señor que tu ternura y tu misericordia son eternas; acuérdate de mí con misericordia, por tu bondad, Señor." (Salmo 25) Haré una visita al Santísimo para pedir por mi conversión y la de mi familia en esta Cuaresma.

“Vuélvanse a mí de todo corazón con ayuno, con lágrimas y llanto, enluten su corazón y no sus vestidos”. (Joel 2,12) Ofreceré las dificultades, dolores y contrariedades del día de hoy uniéndome a Cristo crucificado, para que todos los hombres conozcan y amen a Dios.

Hablaré de Dios a alguna persona y le invitaré "Misericordia, Dios mío por tu bondad, por tu inmensa compasión borra mi culpa, lava del todo mi pecado". (Salmo 51) Hablaré de Dios a alguna persona y le invitaré a rezar un Padre Nuestro en acción de gracias.

“Yo sólo me gloriaré en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo está crucificado para mí, como yo lo estoy para el mundo”. (Gálatas 6,14) Haré una visita a la Santísima Virgen pidiendo por el fruto de todas las misiones del mundo y por los misioneros.

“Meteré mi ley en su pecho, la escribiré en sus corazones: yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo”. (Jeremías 31, 33) Me acercaré a recibir la comunión ofreciéndola por el incremento de las vocaciones sacerdotales y religiosas.

“Oigo en mi corazón: "Buscad mi rostro" “Oigo en mi corazón: "Buscad mi rostro". Tu rostro buscaré, Señor, no me escondas tu rostro”. (Salmo 27, 8-9) Ofreceré el día a Dios reconociendo y dando gracias por todos los beneficios recibidos (especialmente la fe) ante una imagen de Cristo crucificado.

Invitaré a otra persona a vivir estos propósitos de Cuaresma. “Lavaos, purificaos, apartad de mi vista vuestras malas acciones, cesad de obrar el mal, aprended a obrar el bien”. (Isaías 1, 16) Invitaré a otra persona a vivir estos propósitos de Cuaresma.

"Juan Pablo II inolvidable" Te invito a conocer mis dos blogs:   "Pequeñas Semillitas"  http://peque-semillitas.blogspot.com/ "Juan Pablo II inolvidable" http://juanpabloinolvidable.blogspot.com/ Felipe de Urca