Una mirada de ángel . . .
y que en sus ojos se refleja un verde bosque,,
limpio y tan puro como lo es su corazón
La voz del alma sencillamente dulce y con el eco de un te quiero que llega a la mente . . .
que se repite una y otra vez Incesante capaz de hacer volar la imaginación hasta La luna pasando al lado de una estrella fugaz . . .
A esta y pidiéndole un deseo y cuyo brillo se desvanece saludando A esta y pidiéndole un deseo y cuyo brillo se desvanece En un intenso suspiro,
continuando un viaje por el infinito Espacio brincando de estrella en estrella y con su toque Sincero cambian de color
formando así su rostro un Grupo de luceros los más bellos jamás vistos...
Grabándose esta imagen en la mente y como un hechizo Que te persigue jamás su recuerdo se desvanecerá