Vivían tres cerditos en el bosque Vivían tres cerditos en el bosque. Los tres eran grandes músicos y tocaban sus instrumentos muy bien. Un buen día, a uno de ellos se le ocurrió construir una casita en el bosque, y a los otros dos cerditos les pareció una buena idea, tanto es así que decidieron ponerse manos a la obra. Los tres ayudaron a construir la primera casita, una casita de paja.
Pero tuvieron mala suerte, y una tormenta y un fuerte viento hicieron que la casita de paja se derrumbase. El pobre cerdito tuvo que salir corriendo, pero los otros cerditos le dijeron que no se preocupase, y construyeron otra casita, más grande y más fuerte.
El segundo cerdito pensó en construir una casita de hierba, él pensaba que sería más fuerte que la de paja, y entre los tres la construyeron. Al ver lo bien que les quedó la casita se pusieron a cantar y a bailar.
Pero de nuevo tuvieron mala suerte, otra fuerte tormenta hizo que la casita se derrumbara, y de nuevo se pusieron tristes. Pero poco les duró la tristeza, pues al tercer cerdito se le ocurrió una buena idea, construir otra casita, pero esta vez será de madera. Y enseguida los tres cerditos ayudaron a construir la casita. Pero la suerte tampoco les acompañaba esta vez, pues otra fuerte tormenta volvió a derrumbar la casita de madera.
Y a su amigo el lobo se le ocurrió una buena idea, decidió que la casita se construyese de ladrillos, así resistiría hasta la tormenta más fuerte. Pero los cerditos tardarían más tiempo en construirla ya que ellos no eran tan fuertes como el lobo. Pero no tenían ningún problema ya que el lobo les ofreció toda su ayuda.
Y de esta forma, los tres cerditos y su amigo el lobo construyeron una casita mucho más fuerte y bonita que las anteriores. Esta casita no la pudo derribar ninguna tormenta y los tres cerditos y el lobo pudieron vivir todos juntos y muy felices.
Y por fin gracias a la colaboración de los tres cerditos y el lobo consiguieron vivir todos juntos en una casita resistente y muy bonita.