El Soldado y La Mujer Manny Marte
Una vez había un hombre llamado Martin – estaba llegando del aeropuerto JFK, manejando su Chevy de dos mil nueve, en una autopista abandonada, cuando una mujer sin nombre al lado de la calle le hizo una señal para llamar su atención – el paro, ye ella le dijo “Llévame al club, por favor” – él respondió “claro que sí, no hay problema”.
Ella entró al carro y él vio los ojos de ella – casi completamente blancos, algo muy raro. Cuando llegaron al club, ella llevaba puesto un vestido moderno, como los otros, pero la orquesta estaba tocando música de los sesentas.
Era obvio que la mujer no estaba contenta, pero, cuando se dio cuenta de la música moderna que estaban tocando, comenzó a levantar su espirito y los dos bailaron durante toda la noche. Cuando salieron del club, se veía que ella estaba temblando, y como quería verla otra vez, le dio su chaqueta a la mujer.
El la dejó cerca de donde la vio por primera vez. Unos días pasaron, y él visitó las casas cerca de donde la había dejado la noche anterior. Al fin, encontró una mujer muy vieja, y él le describió a la mujer de la noche – comenzó a llorar, y lo llevó al patio detrás de la casa, donde había unas lápidas y vio una lapida con su chaqueta.
Se acercó y vio que decía: “ Cruz Delgada 1959 – 1981 ”. Unos escalofríos le corrieron por sus huesos, y volvió a mirar a la vieja. Con lágrimas en sus ojos, le dijo al muchacho, “Cruz Delgada era mi madre.”