Proyecto de Religión Educación Primaria
Los Evangelios nos narran cómo fue el nacimiento de Jesús y la visita de unos sabios de Oriente.
Su madre, María, estaba prometida y, antes de irse a vivir con su esposo, resultó que había concebido por la acción del Espíritu Santo. José, su esposo, que era justo y no quería denunciarla, decidió separarse de ella en secreto.
El ángel del Señor en sueños le dijo a José: «No tengas reparo en recibir a María como esposa tuya, pues el hijo que espera viene del Espíritu Santo». De este modo se cumplió lo que había anunciado el Señor por los profetas.
Cuando se cumplió el tiempo, María dio a luz a Jesús. Jesús nació en Belén, un pueblo de Judea, en tiempos del rey Herodes.
Por entonces unos sabios de Oriente, los Reyes Magos, se presentaron en Jerusalén preguntando: «¿Dónde está el Rey de los judíos que acaba de nacer? Hemos visto su estrella en el Oriente y venimos a adorarlo».
Herodes les dijo: «En Belén. Id y, cuando lo encontréis, avisadme para ir yo también a adorarlo». La estrella los guió y se paró encima de donde estaba el niño.
Entraron en el establo, vieron al niño con su madre, María, y lo adoraron postrados en tierra. Abrieron sus tesoros y le ofrecieron como regalo oro, incienso y mirra.
En la fiesta de Navidad recordamos este misterio de la Encarnación: El Hijo de Dios se hace hombre para salvarnos.
Jesús es el Salvador esperado y hace de todos los hombres una sola familia, la familia de los hijos del Padre Dios.
En Navidad los cristianos celebramos que Dios se ha hecho como uno de nosotros para vivir acompañándonos con su luz y su amistad; para que participemos de su vida y de su amor.