Robert se hallaba en su despacho, revisando un sinfín de documentos sobre clientes que habían ingresado o sacado dinero de su banco. Era casi medianoche pero él seguía allí. “Cada minuto que no se trabaja es un minuto en el que no se gana dinero” solía repetir a sus empleados. Y es que así era Robert: un hombre entregado a su negocio. Poseía una fortuna pero no se contentaba con ello y su ambición parecía no conocer límites. De repente, mientras tecleaba frenéticamente números en su calculadora de mano, escuchó un fuerte ruido que provenía de la antesala. Aquello era realmente extraño pues el edificio se encontraba completamente vacío. Nadie, en plena noche de año nuevo, se quedaba a trabajar… nadie excepto Robert.

Era una tarde de invierno, de esas en las que el frío atenaza los huesos y el gélido viento invade las calles. Había llovido toda la mañana y, aunque cuando Jack recibió la llamada ya empezaba a clarear, decidió coger el paraguas por si acaso. Así se hacían las cosas en Londres. — Al habla el detective Graham —dijo Jack mientras agarraba la chaqueta con la otra mano. — Detective, aquí el agente Brian. Tenemos un caso entre manos y necesitaríamos que nos echase una mano. — Ajá —Jack cogió las llaves y salió de su apartamento—. ¿Dónde? — En el Banco Trehan, señor. — Voy de camino —concluyó Jack al tiempo que colgaba y se guardaba el móvil en uno de los bolsillos de la chaqueta. Veinte minutos más tarde Jack cruzaba bajo la cinta amarilla de la policía y se adentraba en el magnífico edificio que presidía una de las calles más céntricas de Londres. Justo cruzar el umbral de la puerta, un joven policía se le acercó con una humeante taza de café en la mano. — Aquí tiene, detective Graham. — Gracias John. ¿Qué tenemos?

— Al señor Robert Trehan en su despacho, señor —le explicaba John mientras ambos subían las escaleras en dirección al lugar del crimen—. Según la forense, su muerte se produjo cerca de medianoche. Lo han encontrado esta mañana. Jack y John entraron, al fin, en el despacho. Lo primero que llamó la atención de Jack fueron los pedazos de un jarrón esparcidos por el suelo. Luego su atención se centró en el cadáver de Robert. Se hallaba tirado en el suelo. — ¿Causa de la muerte? —preguntó Jack. — Un disparo, señor. — ¿Algo más que deba saber? — Sí, señor —se apresuró a contestar John—. Tanto la puerta como las ventanas estaban cerradas por dentro, señor. — Bueno, eso significa que se trata de un suicidio, ¿no? — Señor, no creo que eso sea posible. — ¿Por qué? — Porque no se ha encontrado el arma, señor.

Secretaria del señor Robert Trehan. Empleada del banco desde Trabajadora eficiente y dedicada que acaba de sacarse la titulación de derecho. Era la mano derecha de Robert en todo lo que se refería a asuntos legales. Coartada: Se fue del banco a las 22:00. Las cámaras de seguridad lo corroboran. Según su declaración se fue directamente a casa.

Segundo socio mayoritario del banco. Hijo del cofundador de Trehan. Especialista en cuestiones de márketing, Dereck ha tenido sus más y sus menos con Robert porque, al parecer, la imagen empresarial que transmitía el señor Trehan era anticuada y no iba en la línea moderna que Dereck quería implantar. Coartada: Se hallaba en viaje de negocios, representando al banco, en Alemania. Partió tres días antes y tenía prevista su llegada para la noche en que Robert fue asesinado.

Antiguo segundo socio mayoritario del banco y ahora socio honorífico. Cofundador de Trehan. Ha trabajado duro para conseguir establecer el banco Trehan como uno de los principales de Londres. Hace dos años que cedió sus participaciones a su hijo, Dereck. Actualmente se encarga de las relaciones personales con clientes antiguos y de confianza. Coartada: Según él se encontraba en el cine pero nadie puede confirmarlo.

Ahora, con esta información, deberéis redactar el asesinato de Robert Trehan. Para ello deberéis escoger quién de los tres personajes presentados es el asesino, por qué motivo y cómo ha llevado a cabo el crimen. Una vez sepáis cómo se va a desarrollar el asesinato, deberéis poneros a redactar la escena desde el punto en que Robert oye el ruido desde su despacho. Recordad, no obstante, cómo encuentran el despacho los detectives cuando van a investigar. ¡Adelante! ¡Cread un buen misterio! Pero antes…

Vocabulario Hallar Sinfín Soler (hombre) entregado Poseer Contentar “no conocía límites” Frenéticamente Provenir Atenazar Clarear “entre manos” Adentrar Presidir Umbral Apresurarse

Audaz o audaciaZanjar el asunto EnigmaEl tiempo apremia RevanchaSed de venganza InauditoCrispar los nervios ExasperarSituación embarazosa IrreverenteCapear el temporal IndispensableCallejón sin salida Vehemente o vehemenciaPagar justos por pecadores Deberéis utilizar, como mínimo, cinco palabras y cinco frases de las siguientes:

· Tened a mano las fichas anteriores para no cometer las faltas ortográficas trabajadas. · Uso correcto de los signos de exclamación e interrogación. · Correcta escritura de los diálogos. · Atención con los párrafos.

Robert se hallaba en su despacho, revisando un sinfín de documentos sobre clientes que habían ingresado o sacado dinero de su banco. Era casi medianoche pero él seguía allí. “Cada minuto que no se trabaja es un minuto en el que no se gana dinero” solía repetir a sus empleados. Y es que así era Robert: un hombre entregado a su negocio. Poseía una fortuna pero no se contentaba con ello y su ambición parecía no conocer límites. De repente, mientras tecleaba frenéticamente números en su calculadora de mano, escuchó un fuerte ruido que provenía de la antesala. Aquello era realmente extraño pues el edificio se encontraba completamente vacío. Nadie, en plena noche de año nuevo, se quedaba a trabajar… nadie excepto Robert. -Jarrón roto en el suelo -Habitación cerrada por dentro (tanto puertas como ventanas) -Cadáver en el suelo con herida de bala -No hay arma homicida Audaz o audacia Enigma Revancha Inaudito Exasperar Irreverente Indispensable Vehemente o vehemencia Zanjar el asunto El tiempo apremia Sed de venganza Crispar los nervios Situación embarazosa Capear el temporal Callejón sin salida Pagar justos por pecadores -Faltas ortográficas trabajadas en las fichas anteriores -Signos de exclamación e interrogación -Diálogos -Párrafos