El que viene nos enamore, y su amor nos “queme las entrañas”.
El que viene nos descoloque, y su Camino nos proponga “cambios de sentido”.
El que viene nos habite, y su Verdad “nos haga libres”.
El que viene nos recree, y su Pobreza “nos provoque vértigo”.
El que viene nos despierte, y su Espíritu “nos arranque las viejas formas y costumbres”.
El que viene nos aliente, y su Encarnación “nos impulse a optar por los más débiles”. El que viene nos aliente, y su Encarnación “nos impulse a optar por los más débiles”.
El que viene nos ilusione,y su Luz “nos sostenga en la confianza”.
El que viene nos cuestione, y su Alegría “nos encuentre buscando la felicidad en él”.
El que viene nos contagie su Pasión por la Humanidad.
El que viene nos movilice, y su Esperanza “nos haga soñar y profetizar”.