¿Qué es la Sabana Santa? Es una sábana de lino, de 4’36 por 1’10 metros. Tiene impresa una figura humana. Se encuentra en la catedral de Turín.
¿Qué podemos ver en la sábana a simple vista? La parte frontal y el dorsal de una figura humana. Marcas debidas al plegado de la sábana. Quemaduras.
En esta fotografía de la parte frontal vemos también manchas de sangre.
En la foto de la parte dorsal vemos la cabeza, la espalda y las piernas. También quemaduras y manchas de sangre.
La sábana sirvió para envolver el cuerpo de un cadáver La sábana sirvió para envolver el cuerpo de un cadáver. Pudo hacerse de esta forma:
Resumen de su traslado durante la historia 1. En el siglo II es recibida por el monarca de Edessa. 2. Es escondida y no se redescubre hasta el año 525. 3. En el año 944 el emperador de Bizancio la compra y se la lleva a Constantinopla. 4. Es redescubierta en el siglo XIII en Francia. 5. Acaba su recorrido en Turín.
Moneda de la época de Edessa. S.VII Tras el descubrimiento en Edessa, algunos artistas que pudieron ver la sábana hicieron imágenes de Jesús de gran parecido con la imagen impresa en ella. Moneda de la época de Edessa. S.VII Pantocrátor del siglo XII Grabado del siglo X
Estas son reconstrucciones escultórica y pictórica actuales a partir del estudio de la sábana
En 1898 se fotografió por primera vez la sábana. El fotógrafo advirtió que la sábana, mientras envolvía al difunto, había actuado como cliché fotográfico imprimiéndose en ella la imagen del hombre al que envolvía. También comprobó que los negativos fotográficos obtenidos mostraban una mayor precisión en los detalles de la imagen. Coloración dejada por la impronta de la imagen
¿Qué se sabe del tipo de tela? Es de lino. Fue tejida con un telar de pedales, algo propio de la zona. Fue blanqueada después de ser tejida. Esto la sitúa antes del siglo VII. Tiene algunas fibras de algodón, de una especie propia de Oriente Medio. No tiene ninguna fibra de lana. Fue tejida en un lugar específico para tejidos vegetales. En Judea, los tejidos vegetales y los animales se trabajaban en talleres diferentes.
En la tela hay granos de polen Se ha encontrado polen de 28 plantas diferentes. Todas existen en la zona. Catorce de ellas solo se pueden hallar en Oriente Medio.
La moneda del ojo Se trata de un leptón, moneda romana, emitida por Poncio Pilato en el año 29 d.C. Las monedas se usaban en los enterramientos judíos.
También se aprecia la coleta de Jesús La corona de espinas Pero... ¿qué le ocurrió exactamente a Jesús según los datos que se recogen de la sábana? En la parte dorsal de la cabeza se aprecian los regueros de sangre producidos por la corona. También se aprecia la coleta de Jesús
Las espinas produjeron en toda la cabeza importantes heridas. La corona de espinas La corona de la que hablan los evangelistas Marcos y Mateo era, en realidad, un casco de espinas. Las espinas produjeron en toda la cabeza importantes heridas.
El rostro de Jesús Coágulos de sangre en frente y cabellera Frente hinchada Contusión en mejilla derecha Fractura del cartílago nasal. Nariz desviada. Bigote, labios y barba impregnados de sangre que sale de la nariz Pómulos hinchados El rostro de Jesús Mt 27,30: «Le escupían y le pegaban con la caña en la cabeza.»
Reconstrucción de la flagelación El instrumento usado fue el flagrum romano. Jesús recibió unos 120 golpes de dos verdugos que le golpeaban simultáneamente. Reconstrucción de la flagelación Detalle de dos heridas La flagelación
Jesús llevaba sobre la espalda y atado a los brazos un palo horizontal de entre 35 y 55 kilos. El palo, debido a las caídas, rasgó las heridas de la flagelación en la parte de la espalda, bajo los hombros. Con la cruz a cuestas
Los dos regueros de sangre bajan de los clavos hasta los codos del crucificado. Los clavos, de más de 13 cm. Se fijaron en las muñecas, y no en las palmas de las manos, para impedir los desgarros. Rozan el nervio medio, produciendo un tremendo dolor. El efecto es la flexión del dedo pulgar. Por esto, en la sábana solo se ven cuatro dedos en las manos. Crucifixión
El crucificado se asfixia El crucificado se asfixia. Para evitarlo debe levantarse continuamente apoyando todo el peso sobre el clavo de los pies. La asfixia produce un aumento de CO2 en la sangre y esto unos fuertes calambres. El roce continuo de la espalda contra la cruz rasga las heridas anteriores. Crucifixión
El clavo de los pies produjo una gran hemorragia, ya que se colocó donde confluyen dos arterias. Crucifixión
La lanzada Sangre y suero El suero encontrado significa que Jesús ya estaba muerto. La herida, de 1’5 por 4’5 cm. coincide con la producida con un pilium romano cuyo filo no penetró totalmente pero que llegó al corazón. La lanzada