Ciclo A Ciclo A Decimoctavo domingo tiempo ordinario 31 de julio de 2011
Salmo 144 Es Yahvé clemente y compasivo, tardo a la cólera y grande en amor; bueno es Yahvé para con todos, tierno con todas sus creaturas. Es Yahvé clemente y compasivo, tardo a la cólera y grande en amor; bueno es Yahvé para con todos, tierno con todas sus creaturas. Tú abres la mano y sacias de bienes a todo viviente.
Los ojos de todos te miran esperando; tú les das a su tiempo el alimento. Tú abres la mano y sacias de bienes a todo viviente. Tú abres la mano y sacias de bienes a todo viviente.
Yahvé es justo cuando actúa, amoroso en todas sus obras. Cerca está Yahvé de los que lo invocan, de todos los que lo invocan con sinceridad. Tú abres la mano y sacias de bienes a todo viviente.
ALELUYA Mt 4:4bAleluia,aleluya. No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.» Aleluya.
Panes y peces en Magdala.
Iglesia de la Multiplicación. Lugar donde Jesús hizo el milagro, según la tradición. ( Del santo evangelio según san Mateo ) Mt 14: Al enterarse Jesús de la muerte de Juan, el Bautista, se retiró de allí en una barca, aparte, a un lugar solitario. En cuanto lo supieron las gentes, le siguieron a pie de las ciudades. Al desembarcar, vio mucha gente, sintió compasión de ellos y curó a sus enfermos. Al atardecer se le acercaron los discíplulos diciendo: «El lugar está deshabitado, y la hora es ya pasada. Despide, pues, a la gente, para que vayan a los pueblos y se compren comida.» Mas Jesús les dijo: «No tienen por qué marcharse; dadles vosotros de comer.» Dícenle ellos: «No tenemos aquí más que cinco panes y dos peces.» Él dijo: «Traédmelos acá.» Y ordenó a la gente reclinarse sobre la hierba; tomó luego los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, pronunció la bendición y, partiéndolos, dio los panes a los discípulos y los discípulos a la gente. Comieron todos y se saciaron, y recogieron de los trozos sobrantes doce canastos llenos. Y los que habían comido eran unos cinco mil hombres, sin contar mujeres y niños.
Salir PULSAR INICIO de la WEB PULSAR INICIO de la WEB Dios mío, dígnate librarme: Señor, date prisa en socorrerme. Que tú eres mi auxilio y mi liberación: Señor no tardes. Salm 69: 2,6