FILIPINAS 2007 Familia Misionera Verbum Dei MISIÓN A LAS FILIPINAS 2007 Vayamos a otra parte, a los pueblos vecinos, para que también allí predique; pues para eso he salido del Padre Mc 1, 38

Queremos compartir la aventura que hemos vivido este verano en Filipinas. Éramos un grupo de 13 jóvenes venidos de Italia (9), de Inglaterra (3) y de Australia (1)

Es importante tener una buena preparación para la misión, tanto personal como de grupo: por esta razón, durante seis meses tuvimos diversos encuentros de formación Hemos sido testigos de cómo a través de momentos de oración, de compartir y de preparación práctica, el Espíritu ha formado un grupo unido, alegre y muy motivado. No olvidar: se cosecha sólo aquello que se siembra

Antes de partir, hemos organizado una velada musical con cantos, testimonios e imágenes para poder mostrar que la Misión es Posible cuando cada uno colabora con algo, aún cuando esto algo parezca ser poco. Otro objetivo de la velada era el de recabar fondos a través de donaciones para poder colaborar, también económicamente con la necesidad de la gente de Filipinas Ya sea con un poco de tiempo o una sonrisa o algo de dinero… Dios ama aquel que da con generosidad 2 Cor 9, 7

La misión ha iniciado con la visita a una prisión estatal en donde se encuentran condiciones inhumanas de vida. Esta prisión ha sido pensada y construida para acoger a 250 menores, sin embargo, desde hace años es un lugar de reclusión para cerca de 2,600 adultos, de los cuales, la mayoría están en espera de ser enjuiciados. En este lugar hemos descubierto una insospechada LIBERTAD: - la libertad optada de la casi totalidad de los detenidos de darnos la bienvenida con una sonrisa, una apertura y una alegría extrañamente humanas. - la libertad vivida de acogernos con sus cantos y bailes de tal forma contagiosos, que hicieron salir a la luz nuestra esclavitud de tantos temores y prejuicios. - la libertad donada a nosotros de un modo tal que pudimos vislumbrar en todos ellos el rostro de Cristo.

Venid, benditos de mi Padre… porque estando en la cárcel vinisteis a verme. Entonces los justos le responderán: Señor, ¿cuándo te vimos en la cárcel y fuimos a verte? Mt 25, Este es el sello que cada uno de nosotros recibimos después de la inspección personal obligatoria antes de ingresar

SMOKY MOUNTAINS ¡Bienvenidos a mi Parroquia! Estas fueron las palabras que el padre John utilizó al presentarnos el barrio conocido con el nombre de Smoky Mountains que consta de montañas de basura en medio de las cuales viven cientos de familias.

El padre John reconociendo que un gran número de los detenidos provienen de estas familias de indigentes, ha fundado en este barrio una escuela para dar esperanza y dignidad a los niños alejándolos de la criminalidad. ¡Con cuánta alegría nos han acogido!

¡Manos a la obra! Algunos de nosotros trabajamos durante 3 días ayudando a una chica a renovar la casa en la que vivía. La mamá de ella está en cama paralizada. La alegría en la labor ha hecho que se mejore la calidad de vida de una familia …y tambien en nosotros.

Por el contrario, algunos de nosotros, en vez de renovar, hemos demolido para luego reconstruir la pequeña casa de un chico huérfano que cuidaba de sus dos hermanos invidentes; todos ellos viviendo en condiciones indignas. Hoy mismo te doy autoridad sobre las naciones para destruir y edificar Jer 1, 10. Hemos construido el Reino bajo la lluvia y el sol, en la alegría y la fatiga…

En Pasil, otro barrio pobre y sede principal del mercado del mar, hemos sido bienvenidos nuevamente con entusiasmo por los niños de un centro de Don Bosco

entrar aún más profundamente en la realidad de sus vidas Después de haber jugado, charlado y orado con los niños, hemos sido invitados a trabajar con sus papás en el mercado del mar desde esa noche hasta la mañana siguiente. Esta experiencia nos ha permitido entrar aún más profundamente en la realidad de sus vidas.

Con los NIÑOS CON DESNUTRICIÓN Tengo HAMBRE de comida…

y de AMOR

Como dice el Señor: Si permaneces en Mí y mi Palabra en ti, darás mucho fruto. (Cfr. Jn15) Es por ello que habíamos buscado vivir todas las experiencias en un clima de oración y contemplación,

¡y hemos compartido esta experiencia de fe con la gente!

Es así como hemos recibido tanto: de la comunidad de Cebú

y de la comunidad de Cagayán de Oro.

Debemos confesar que la bienvenida filipina… ¡ha estado también muy sabrosa!!!

Y también la naturaleza nos ha ofrecido sus dones. Te gustaría estar aquí, ¿verdad?

Pero para la MISIÓN se necesita también tener CORAJE … crees que no tienes suficiente?

¡en comunión con DIOS y con los hermanos lo podemos logar! Recuerda :

¡Pero dichosos vuestros ojos, porque ven, y vuestros oídos, porque oyen! Pues os aseguro que muchos profetas y justos desearon ver lo que vosotros veis, pero no lo vieron, y oír lo que vosotros oís, pero no lo oyeron. Mt 13, ¡GRACIAS JESÚS!