“UN DÍA...”
Un día, Jesús y el diablo estaban conversando y Jesús preguntó al Diablo lo que él estaba haciendo con las personas aquí, en la Tierra...
Él respondió: Estoy divirtiéndome con ellas, enseñándoles a hacer bombas y matar; a usar armas; a odiarse unas a otras; enseñándoles a abusar de la infancia; enseñando a los jóvenes a usar drogas; a beber y a hacer todo lo prohibido.
Me estoy divirtiendo mucho con ellas...
Y después, ¿qué vas a hacer con ellas? Jesús preguntó: Y después, ¿qué vas a hacer con ellas?
Voy a matarlas y acabar con ellas.
¿Cuánto quieres por ellas? Jesús preguntó: ¿Cuánto quieres por ellas?
El diablo le respondió: Porque vas a querer a estas personas, ¡ellas son traicioneras, mentirosas, falsas, egoístas y avarientas!
¡Ellas nunca te amarán de verdad, van a blasfemar y escupir en tu rostro, van a despreciarte y no te tendrán consideración con lo que representas!
¡Quiero todas tus lágrimas y toda tu sangre! ¿Cuánto quieres por todas ellas, diablo? ¡Quiero todas tus lágrimas y toda tu sangre!
Y... ¡Jesús pagó el precio de nuestra libertad! ¡Trato hecho! Y... ¡Jesús pagó el precio de nuestra libertad!
¡Cómo nosotros olvidamos a Jesús! Creemos en todo lo que nos enseñan, pero cuestionamos todo lo que viene de Él...
Todos quieren un día estar con Dios, pero no quieren conocerlo y amarlo.
Muchos dicen: Yo creo en Dios, ¡pero no hacen nada por Él!
Las personas mandan bromas por e-mail pasándolas de unas a otras a una velocidad luz. Pero cuando el mensaje es sobre Dios, las personas lo piensan dos veces antes de mandarlo y compartirlo con el resto.
¡SOY CRISTIANO, AMO A DIOS! Dicen a cada momento de que equipo son, pero lo piensan dos veces antes de decir: ¡SOY CRISTIANO, AMO A DIOS!
¡Intentan ser invisibles cuando se trata de Jesucristo! ¿Por qué?
Cuando termines de leer este mensaje. ¿Lo mandarás a alguien? No estás seguro de lo que pensaran las personas sobre ti, si lo envías…
Solamente quieren a Jesús cuando están en grandes apuros. Hablar sobre Jesús Cristo no es un asunto que las personas quieran oír. Solamente quieren a Jesús cuando están en grandes apuros.
¿Quién pasará este mensaje? Dios pregunta: ¿Te lavarás las manos o mirarás a otra parte como cuando lo crucificaron?
Creo que es muy bello difundir su mensaje. Cristo nos dijo: “Por sus frutos los conoceréis”. Cuando Él regrese, ¿hallará fe en la Tierra?