ORACIÓN DE LA COMUNIDAD EN LOS 800 AÑOS DE SU FUNDACIÓN DOMINIQUES CONVENT DE SANTA CLARA MANRESA
Al celebrar 800 años de vida, de nuestra Familia Predicadora queremos, como orantes y como discípulas de Jesús, renovar nuestra Acción de Gracias al Espíritu que hace nueva todas las cosas.
Él suscitó a Domingo para anunciar el Evangelio de la Paz, para buscar la Verdad, para predicarla, y para ejercer con todos la misericordia que recibía de Dios. Él lo hizo dócil a sus inspiraciones, atento a los signos de los tiempos, dialogante y hospitalario, aun con los que pensaban diferente. Él lo envió a predicar con los pies descalzos… y con fuego en el corazón.
Hoy, las monjas de Manresa, volvemos nuestros ojos a Domingo orante y contemplándole en sus largas vigilias de oración, le pedimos con insistencia nos diga: ¿Cómo oras, Padre Domingo? ¿Cuál es el secreto de tu intimidad con Dios? ¿Qué fuego devora tus entrañas?
Queremos pedirle al Padre y Dios de la Vida, al Padre de Jesucristo y Padre nuestro, en este tiempo de gracia, que fecunde nuestra oración, que nuestras vidas sean una irradiación de la de su Hijo, que nuestras casas sean casas de predicación, donde la fraternidad sea el pan nuestro de cada día y donde todos encuentren reposo y paz.
Que seamos signos creíbles de su Reino. Que la luz que hemos recibido no se apague, y que ardiendo en amores, iluminemos a cuantos Él pone en nuestro camino. Que a fuerza de contemplar y buscar su Rostro cada día, nuestras vidas sean incandescentes, y que al calor y al abrigo de nuestra comunidad, el Evangelio de la gracia, se predique y se contagie en el vivir de cada día.
DOMINIQUES CONVENT DE SANTA CLARA MANRESA