Historia de un día extraño Escrito por Helen Profesora: Sra. Quiroga

Tengo que decirles que esto no es verdad *** Tengo que decirles que esto no es verdad. Es sólo para esta historia, por favor, no lo intenten en la casa, y ¡disfruten! *** ^^^^^^^^^ Era un día como el primer día de otoño. No muy caliente y aún no muy frío. Yo estuve dormida en mi cuarto y era un sábado sin clases de español. Eran las 9:00 de la mañana y en una hora tenía que despertarme para ir a trabajar a mi nuevo trabajo, en Starbucks. Me desperté. La alarma de mi reloj era muy extraña, como si la escuchara detrás de las orejas que eran como de piel. Abrí mis ojos. "¿QUÉ?"..."¿Qué me a pasó, dónde estoy?..."..."¡AYYY!" Levanté las manos cubiertas en piel. Mis pies también todos cubiertos de piel...y tenía una cola chiquita.... ¡Ay soy un perro! No, no puede ser. ¡Qué interesante!... Caminé por el borde de la cama y empecé a subir arriba de mi armario para verme en el espejo.

AyÚdenme helen [osa-humana] Me vi. Dos ojitos negros, piel de color caramelo y orejitas redondas. "¡Ayyyy!! Sorprendida caí al suelo. oomff..." ¿Qué es esto? No me dolió. Bueno, soy un oso de peluche y no puedo ir al trabajo... ¡SÍ! Caminé hacia la computadora y empecé a escribir: Hola mamÁ y papÁ, Soy un oso de peluche, No sÉ cómo, por favor AyÚdenme helen [osa-humana]

Bueno, ahora mis padres ya lo saben, pensé yo. Caminé a mi cuarto, ¡ay Bueno, ahora mis padres ya lo saben, pensé yo. Caminé a mi cuarto, ¡ay! ¡Me olvidé que mis amigas venían a las dos! ¡Que lío! Bueno, ¿qué remedio hay? Fui a Google.com (en español) escribí en el buscador "CAMBIA A OSO." 272,000 resultados en 0.51 segundos. vi uno: "Me convertí en oso esta semana". Leí el artículo. Me dijo que comiera un tubo de pasta de dientes y que durmiera. ¿Qué voy a hacer si no lo hago? Bajé de la silla y encontré el Colgate. Me comí todo el tubo y fui a la cama para dormir. Me levanté dos horas más tarde, abrí los ojos... ¡SOY YO!!!! Con mis ojos verdes-marrón y mi pelo rubio. Alguien toca a la puerta. ¡Deben ser mis amigas! Una dijo: "¿Helen, por qué no me llamaste? ¿Y por qué me dices en la computadora que eres un oso de peluche?" Sonreí. "Ay pues había sido un día muy especial." Borré la página de la computadora ^^^^^^^^^

Y ahora saben qué hacer si se convierten en un oso de peluche

¡GRACIAS!