Reunión de diciembre de adultos

Agenda

Preguntas de apertura ¿En alguna ocasión se ha sentido usted seguro de algo, pero no ha sabido cómo comunicárselo a los demás? ¿Ha tenido miedo de decir algo que quiere decir? Permita que la conversación tome diferentes rumbos.

Preguntas de apertura ¿Se imagina que hasta los Apóstoles, que conocían a Jesús y caminaron junto a Él aquí en la tierra, sentían miedo de hablar de Él? Recuerde que antes de que Jesús fuera crucificado, San Pedro negó conocerlo. ¡Y los apóstoles se escondieron durante 10 días después de que Jesús ascendió al cielo! Luego, tal y como lo había prometido, Jesús les envió al Espíritu Santo con un torrente especial de gracia que les dio la fuerza y la valentía que necesitaban. Este acontecimiento se conoce como Pentecostés.

Preguntas de apertura El mes pasado aprendimos que todos los cristianos tenemos la misma misión que los apóstoles por virtud de nuestro Bautismo, es decir, evangelizar. ¿Cómo nos ayuda Dios a llevar a cabo esta misión? Dios derrama sobre nosotros el Espíritu Santo, como lo hizo el día de Pentecostés con los apóstoles. Nosotros lo recibimos en el sacramento de la Confirmación.

El sacramento de la Confirmación: Introducción

La Confirmación es uno de los sacramentos que se interpretan más erróneamente en nuestra fe. Con frecuencia creemos que se trata solamente de un rito de iniciación y que es la versión católica del bar mitzvá. Pensamos que es un ritual que nos convierte en un “adulto” en la Iglesia. Muchos jóvenes reciben este sacramento como si fuera otra tradición que deben cumplir para complacer a sus padres.

El sacramento de la Confirmación es mucho más que un rito de iniciación. ¡Es un encuentro personal con Dios que transforma toda nuestra vida cristiana! Como lo hemos discutido anteriormente, los sacramentos son encuentros reales y momentos de gracia en los que experimentamos el amor de Dios de una manera real y profunda mediante un signo físico externo. La Confirmación es otro de estos encuentros y tiene mucho poder. Si comprendiéramos lo que realmente sucede en este sacramento y comenzáramos a cooperar con la gracia que recibimos, nuestra vida como discípulos cristianos sería transformada completamente.

Si un atleta desea practicar un deporte, ¿que necesita? Unirse a un equipo Desarrollar su talento y sus habilidades naturales El equipo (accesorios) necesario para el juego

El Bautismo es como unirse al equipo deportivo. La Confirmación es como recibir el equipo (accesorios) que se necesita para jugar. Además, usted necesitaría al mejor entrenador y el mejor entrenamiento para tener éxito. Luego, necesitaría entrenar y esforzarse. ¡Aquí tiene acceso al mejor entrenamiento y al mejor equipo! Ahora analicemos más detalladamente este maravilloso sacramento.

La Confirmación en la historia de la salvación. Comencemos por explorar las raíces y los orígenes de la Confirmación en las Sagradas Escrituras

El Antiguo Testamento: Sacerdote, Profeta y Rey En el Éxodo, Dios dice que desea que su pueblo sea un sacerdocio real. Después, los reyes de Israel eran ungidos como símbolo de su consagración a Dios y de la efusión del Espíritu de Dios sobre ellos. Por último, los profetas predijeron una efusión del Espíritu sobre todo ser humano. El Antiguo Testamento En el libro del Éxodo, aprendemos que Dios desea que su pueblo sea un reino de sacerdotes y una nación santa. Dios desea hacer de su pueblo un sacerdocio real que proclame y glorifique Su nombre a todas las naciones y que le sirva con amor. Más adelante en la historia de Israel, los reyes eran ungidos con óleo santo como símbolo de su consagración. Esta unción los distinguía como posesión de Dios y también simbolizaba la efusión del Espíritu de Dios sobre ellos. Todos los reyes davídicos fueron ungidos. Se convirtieron en “mesías” o “cristos”, es decir, ungidos. 4. Por último, los profetas predijeron una efusión del Espíritu sobre todo ser humano.

El Nuevo Testamento: La venida del defensor “Pero recibirán la fuerza del Espíritu Santo cuando venga sobre ustedes, y serán mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaría y hasta los extremos de la tierra” (Hechos 1,8). Jesús habló a sus apóstoles sobre un defensor que vendría después de Él, cuando Él se hubiera marchado.

El Nuevo Testamento: La venida del defensor El Espíritu Santo descendió sobre los discípulos y la Virgen María el día de Pentecostés. Ellos recibieron el poder y la valentía que necesitaban para comenzar a predicar el Evangelio. Esta es la institución del sacramento de la Confirmación. El Nuevo Testamento Jesús habló a sus apóstoles sobre un defensor que vendría después de Él, cuando Él se hubiera marchado. “Pero recibirán la fuerza del Espíritu Santo cuando venga sobre ustedes, y serán mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaría y hasta los extremos de la tierra” (Hechos 1,8). Luego, en Pentecostés, cuando la Santísima Virgen y los discípulos estaban en el cenáculo, el Espíritu descendió sobre ellos como un fuerte viento y lenguas de fuego aparecieron sobre cada uno. Ellos recibieron el poder y la valentía que necesitaban para comenzar a predicar el Evangelio. Todos comenzaron a hablar en lenguas o idiomas diferentes. Pedro se puso de pie y comenzó a predicar por primera vez. Más de 3,000 personas fueron bautizadas ese día. Fue un momento impactante. Aquellos 12 hombres asustados repentinamente recibieron la valentía y la fortaleza necesarias para comenzar a predicar y a sanar en el nombre de Jesús. En este momento se instituyó el sacramento de la Confirmación. El libro de los Hechos de los Apóstoles está lleno de milagros y predicaciones que los apóstoles realizaron en el nombre de Cristo con el poder de Su Espíritu.

La celebración del sacramento de la Confirmación Ahora, hablemos de la forma, la materia y los efectos de este sacramento.

¿Qué sucede en la Confirmación? Materia Se utiliza el santo crisma para ungir a la persona. Forma El obispo, al ungir a la persona dice: “Recibe por esta señal el don del Espíritu Santo”. Luego, pide que el Espíritu descienda al imponer las manos. El obispo es el ministro ordinario del sacramento. Estas palabras y acciones cumplen el deseo que Dios tiene de que su pueblo sea un sacerdocio real. Se utiliza el aceite o crisma para simbolizar que quedamos “sellados” con el Espíritu. Al confirmarnos quedamos “marcados” o “reservados” para Dios. Ahora formamos parte del ejército de Dios y estamos llamados a ser testigos vivos de Cristo mediante el poder que recibimos del Espíritu Santo.

¿Qué sucede en la Confirmación? Lleva a plenitud la gracia bautismal. Fortalece en nosotros los dones del Espíritu Santo. Nos da una fuerza especial para propagar y defender la fe. Nos da la plenitud de la misión cristiana. Nos hace miembros de la Iglesia. La Confirmación nos habilita para vivir y hablar como verdaderos testigos de Cristo. Ser miembros plenos no significa ser miembros adultos. Este es un concepto erróneo que lleva a considerar que la Confirmación es como una graduación o un rito de transición.

¿Quién puede recibir la Confirmación? Todas las personas bautizadas y que no han sido confirmadas deberían recibir este sacramento. En la Iglesia primitiva, el Bautismo y la Confirmación se recibían juntos. Esto mostraba la fuerte conexión entre estos dos sacramentos. Cuando comenzó a aumentar la cantidad de Bautismos de bebés, era cada vez más difícil que estuviera presente un obispo, por lo que comenzaron a celebrarse por separado. En el rito latino, se recibe el sacramento después de alcanzar la edad del uso de razón. El obispo determina cuándo se ha alcanzado esta edad. La Iglesia de Oriente continúa la tradición de ofrecer la Confirmación junto con el Bautismo (y la Eucaristía). El recién bautizado recibe la Confirmación y la Eucaristía inmediatamente y la iniciación cristiana queda completa.

En la Confirmación no es cuestión de “saber suficiente” o de “tener edad suficiente” para recibirla. Consiste en recibir la gracia que necesitamos del Espíritu Santo para ser testigos de Cristo en el mundo.

¿Qué acontecimiento se representa en esta pintura? ¿Cómo lo sabemos? El acontecimiento que se representa es la venida del Espíritu Santo en Pentecostés. La paloma y las pequeñas lenguas de fuego nos muestran que es una pintura de Pentecostés. También se puede deducir con facilidad que las personas en el cuadro son la Santísima Virgen María, María Magdalena y los discípulos.

¿La escena parece serena o llena de energía ¿La escena parece serena o llena de energía? Explique su respuesta y la razón por la que cree que el artista lo representó de esa forma. La escena parece estar llena de energía: hay mucha emoción en la cara de las personas, algunas parece que se hicieron hacia atrás, podemos ver también algunas manos en movimiento, expresivas. La energía en esta pintura comunica que la venida del Espíritu Santo llenó a los discípulos de valentía y fortaleza para salir al mundo a predicar la buena noticia de Cristo. Recuerde que, después de que San Pedro predicó a las multitudes en Pentecostés, ¡3,000 personas recibieron el Bautismo!

¿Por qué cree usted que el hombre que está abajo a la derecha está escribiendo? La historia de Pentecostés se encuentra en los Hechos de los Apóstoles. El Espíritu Santo inspiró a los autores de las Escrituras, porque esta es otra manera en la que los seguidores de Cristo lo anunciaban al mundo. ¡Ellos necesitaban gracia y valentía especial para hacerlo!

Leer Hechos 2,1-4. ¿De qué manera le ayuda esta pintura a comprender mejor estos versículos? “Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en el mismo lugar. De repente vino del cielo un ruido, como el de una violenta ráfaga de viento, que llenó toda la casa donde estaban. Luego aparecieron unas lenguas como de fuego que se repartieron y fueron posándose sobre cada uno de ellos. Todos quedaron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les concedía que se expresaran” (Hechos 2, 1-4). Acepte todas las respuestas.

¿De qué manera le ayuda esta pintura a comprender mejor el sacramento de la Confirmación? Nos ofrece una imagen de cómo Jesús cumplió su promesa de enviar al Espíritu Santo en Pentecostés. Lo que le está sucediendo a las personas en esta pintura es lo que nos sucede a nosotros durante nuestra Confirmación. Nos llenamos de energía, valentía y del deseo de proclamar a Dios mediante la palabra y las obras. El Catecismo nos dice que la Confirmación “nos concede una fuerza especial del Espíritu Santo para difundir y defender la fe mediante la palabra y las obras como verdaderos testigos de Cristo, para confesar valientemente el nombre de Cristo y para no sentir jamás vergüenza de la cruz” (1303). Recuerde que muchos de los discípulos ofrecieron sus vidas y fueron mártires. Ellos tuvieron la valentía para hacerlo gracias a este acontecimiento. ¡La Confirmación nos da a nosotros la misma habilidad!

Puntos clave de las lecturas de este mes. La Confirmación, al igual que el Bautismo, deja una marca indeleble en nuestras almas. La Confirmación perfecciona la gracia bautismal y nos hace miembros plenos de la Iglesia. Es una buena idea reiterar aquí la diferencia entre ser miembros plenos y ser miembros adultos. ¡La Confirmación no tiene que ver con la edad, sino con recibir la plenitud de la gracia!

Puntos clave de las lecturas de este mes. La Confirmación prefigura en el Antiguo Testamento cuando los sacerdotes y los reyes eran ungidos. También fue profetizada por los profetas. La Confirmación se instituyó en el Nuevo Testamento mediante la venida del Espíritu Santo en Pentecostés.

Puntos clave de las lecturas de este mes. La Confirmación aumenta en nosotros los dones del Espíritu Santo y nos da una fuerza especial para propagar y defender la fe.