Biblia y realidad XXIV Conocer a Jesús Diseño: J. L. Caravias sj

Día tras día una sola cosa te pido, Señor: Conocerte más claramente Amarte más intensamente Seguirte más de cerca

Deseo ardientemente conocerte cada vez mejor, Jesús, pues tú eres la imagen pura y fiel del Dios invisible Col 1,15 Por tu medio se nos da la manifestación plena e irrepetible de Dios, de un modo nuevo y único.

de forma que sepa anunciar al pueblo tu incalculable riqueza Ef 3,18.8 Quiero conocer, Jesús, la anchura, la longitud, la altura y la profundidad de tu amor, de forma que sepa anunciar al pueblo tu incalculable riqueza Ef 3,18.8

Quiero conocerte; quiero experimentar el poder de tu resurrección... ¡Compartir tus sufrimientos y morir tu misma muerte, para resucitar también contigo! Flp 3,10s

En ti se ha hecho visible la bondad de Dios y su amor por los hombres Tit 3,4 Como Sol naciente, nos has hecho ver la tierna bondad de nuestro Dios Lc 1,78

Por tu amor quiero disponerme a renunciar a todo y a considerarlo Nada vale la pena en comparación con este bien supremo de conocerte a ti, Cristo Jesús, mi Señor. Por tu amor quiero disponerme a renunciar a todo y a considerarlo todo como basura con tal de llegar a ti. Flp 3,8

Tengan ánimo, fortalézcanse en el amor y tengan plenamente desarrollados los dones de entendimiento, para que puedan penetrar en el gran secreto de Dios, que es Cristo. Col 2,2 En ti están escondidas toda las riquezas de la sabiduría y de la ciencia. Col 2,3 No hay dicha más grande que estar contigo, verte y oírte, Jesús, Mt 13,17 pues eres la plenitud del Amor y la Fidelidad. Jn 1,14

Eres manso y humilde de corazón Mt 11,29 Pero también Primogénito de la Creación Col 1,15, Dueño del Universo Ap 19,6, Señor de la Historia Ap 5, Rey de Reyes Ap 19,16, Vencedor de la muerte 1Cor 15,26

Te matan, ¡pero vences para siempre a la muerte! Ap 20,14 Eres el que siempre sabe perdonar Jn 12,4, pero eres también el que juzga y lucha con justicia Ap 19,11 ¡Eres león y brote! Ap 5,5 Eres manso cordero degollado, pero te mantienes siempre de pie Ap 5,6 Te matan, ¡pero vences para siempre a la muerte! Ap 20,14