En este canto de acción de gracias, se describen cuatro situaciones típicas, que ponen de manifiesto una especial providencia de Dios: > la vuelta.

Slides:



Advertisements
Presentaciones similares
En este canto de acción de gracias, se describen cuatro situaciones típicas, que ponen de manifiesto una especial providencia de Dios: > la vuelta.
Advertisements

SALMO 29. SALMO 29 Este vibrante himno de alabanza celebra la majestad y el poder de Dios, que se manifiestan en el fragor de la tormenta. La “voz.
12º Domingo del Tiempo Ordinario 12º Domingo del Tiempo Ordinario Cic l o B Cic l o B.
Lectio divina del Salmo dominical
Publiquemos sus obras con júbilo
Acción de gracias por la liberación Automático Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia.
Tiempo Ordinario DOMINGO 12 Tiempo Ordinario DOMINGO 12.
12º Domingo Tiempo Ordinario –B- Salmo de junio de 2006.
21 de Junio Domingo Tiempo Ordinario Ciclo B Música: Plegaria hebrea.
Ciclo C Domingo 1º de Cuaresma Música: Lamentación 2’ (“Sinagoga hebrea”)
Bienvenidos Julio 26, 2015 El Maestro de las Tormentas de la Vida Marcos 6:45-52.
PENTECOSTÉS. Ven a la fiesta. VEN A LA FIESTA,ES EL MOMENTO DE REZAR Y DE CANTAR. HOY CELEBRAMOS QUE EN NUESTRAS VIDAS DIOS VIVIENDO SIEMPRE ESTÁ. Ven.
1Re 12:6 Entonces el rey Roboam pidió consejo de los ancianos que habían estado delante de Salomón su padre cuando vivía, y dijo: ¿Cómo aconsejáis vosotros.
Ven a la fiesta, es el momento de rezar y de cantar. Hoy celebramos que en nuestras vidas Dios viviendo siempre está (Bis)
Mensaje – PIEBE – Mañana – 18/12/2016 Tema: “La Verdadera Expresión de la Navidad” Texto bíblico: Mateo 1: Mateo 1:  El nacimiento de Jesucristo.
IV Domingo de Cuaresma -B- 18 de marzo de 2012
IV Domingo de Pascua 25 de abril de 2010
Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo “Corpus Christi”
Vigésimo tercer Domingo
ORAMOS con el SALMO Pasionistas.
Las Aguas Salutíferas Dra. Emma de Sosa.
3er Domingo de Cuaresma - Ciclo A
Gritos de Adviento.
La Asunción de María a los cielos..
3 de mayo 2009 IV Domingo de PASCUA Música: “Agnus Dei”. Gregoriano
“¿TODAVÍA NO TIENEN FE ? ”
Beato GRIMOALDO SANTAMARÍA.
Apaga el móvil y conecta con el Señor.
DOMINGO III Tiempo de Adviento - A
Segundo domingo de Cuaresma 1 de marzo de 2015
Chicago 1 de mayo de Chicago 1 de mayo de 1886.
+ Es un salmo de acción de gracias individual con algunos elementos de súplica individual ( ). En él, una persona da gracias al Señor de.
Vigésimo tercer Domingo
Domingo Cuarto de PASQUA
La primera parte de este Salmo consta de un himno coral (vs La primera parte de este Salmo consta de un himno coral (vs. 1-7) y de un canto comunitario.
Cuarto domingo de Cuaresma 11 de marzo 2018 Ciclo B
BIENVENIDOS A LA ESCUELA DOMINICAL
ORAMOS con el SALMO Pasionistas.
Con expresiones breves y vigorosas, este himno responsorial presenta un resumen de la Historia de la Salvación. + La evocación de la obra de Dios.
22 de abril 2018 IV Domingo de PASCUA Música: “Agnus Dei”. Gregoriano
▬ El salmo 115 resume perfectamente el sentimiento de Israel en la comida de Pascua, o Seder en la primera noche de la fiesta. ▬ Horriblemente oprimido.
12 Domingo Tiempo Ordinario
+ Es un salmo de acción de gracias individual con algunos elementos de súplica individual ( ). En él, una persona da gracias al Señor de.
Con expresiones breves y vigorosas, este himno responsorial presenta un resumen de la Historia de la Salvación. + La evocación de la obra de Dios.
Este himno es una invitación a celebrar la omnipotencia de la Palabra de Dios, puesta de manifiesto en la creación del mundo (vs. 1-9), y a reconocer.
▬ El salmo 115 resume perfectamente el sentimiento de Israel en la comida de Pascua, o Seder en la primera noche de la fiesta. ▬ Horriblemente oprimido.
+ Es un salmo de acción de gracias individual con algunos elementos de súplica individual ( ). En él, una persona da gracias al Señor de.
33 Domingo 18 de noviembre 2018 Tiempo Ordinario Ciclo B
eres pan que se hace vida eres siempre una esperanza y un perdón.
Ciclo C El Bautismo del Señor 13 de enero de 2019.
Gritos de Adviento.
Música de Adviento A. Pärt
+ Es un salmo de acción de gracias individual con algunos elementos de súplica individual ( ). En él, una persona da gracias al Señor de.
Este himno es una invitación a celebrar la omnipotencia de la Palabra de Dios, puesta de manifiesto en la creación del mundo (vs. 1-9), y a reconocer.
► La frase inicial de este “Himno a la realeza del Señor” (Sal 47; 93; 96; ) es una solemne proclamación, que anuncia el advenimiento del Reino.
ORAMOS con el SALMO Pasionistas.
El espectáculo de la Ciudad santa, protegida por un cerco de montañas, suscita la actitud de profunda confianza en Dios, que se refleja en este Salmo.
Este vibrante himno de alabanza celebra la majestad y el poder de Dios, que se manifiestan en el fragor de la tormenta. La “voz del Señor” es el trueno,
Con expresiones breves y vigorosas, este himno responsorial presenta un resumen de la Historia de la Salvación. + La evocación de la obra de Dios.
La alabanza expresada en este Salmo se fundamenta en el poder creador del Señor (v. 6) y en su bondad para con los pobres y oprimidos (vs. 7-9). Los.
El Salterio comienza con esta “Bienaventuranza”, que es como el prólogo de todo el Libro. La exclamación inicial –“¡Feliz el hombre!”–; se explicita.
Ante la amenaza de un peligro mortal, el salmista suplica al Señor que responda favorablemente a sus ruegos, librándolo de la muerte (vs. 1-3). No.
El Salterio comienza con esta “Bienaventuranza”, que es como el prólogo de todo el Libro. La exclamación inicial –“¡Feliz el hombre!”–; se explicita.
Este vibrante himno de alabanza celebra la majestad y el poder de Dios, que se manifiestan en el fragor de la tormenta. La “voz del Señor” es el trueno,
Domingo II Adviento Ciclo C GRITA UNA VOZ Avance Manual
Un hombre desterrado -probablemente un levita- suspira por volver a gozar de la presencia divina, viviendo constantemente junto al Santuario de.
El Salterio comienza con esta “Bienaventuranza”, que es como el prólogo de todo el Libro. La exclamación inicial –“¡Feliz el hombre!”–; se explicita.
Tiempo Ordinario-Ciclo C
IV Domingo de Pascua 12 de mayo de 2013
DOMINGO IV T. de Pascua – C
Transcripción de la presentación:

En este canto de acción de gracias, se describen cuatro situaciones típicas, que ponen de manifiesto una especial providencia de Dios: > la vuelta del exilio, presentada como un nuevo Éxodo (vs. 4-9); > la liberación de los cautivos (vs. 10-16); > la ayuda divina a los que sufren (vs. 17-22) > y a los navegantes en peligro (vs. 23-32). La parte final del Salmo (vs. 33-43) tiene un carácter hímnico-sapiencial, y su tema central es el poder de Dios, que transforma el orden de los acontecimientos en beneficio de sus fieles.

1. CON ISRAEL 2. CON JESÚS 3. CON NUESTRO TIEMPO El plan de este salmo DE ACCIÓN DE GRACIAS es claro. Presenciamos el desarrollo de una escena brillante. Un gran día de fiesta, en Jerusalén, numerosos peregrinos, querrían "dar gracias" a Dios por un "voto" que hicieron en medio de un "gran peligro" del que fueron liberados. La muchedumbre rodea el altar en que ha sido preparada la víctima del '"sacrificio de Acción de Gracias". 2. CON JESÚS Este salmo, escrito como respuesta a situaciones concretas de hombres y mujeres del pueblo judío, tiene pleno sentido en la persona de Jesús. ¿Quién mejor que El fue "liberado de las tinieblas mortales"? ¿Quién mejor que El vio "romperse las puertas de bronce” de los j infiernos? En el canto de los que han "sido salvados de un peligro mortal", escuchamos "la acción de gracias" de Jesús en su Comida de Pascua: 3. CON NUESTRO TIEMPO Para orar de verdad con este salmo, en medio del mundo de hoy, basta abrir los periódicos del día, o escuchar la televisión, para lanzar hacia Dios el "grito" de los que sufren. "En su angustia, clamaron al Señor". Muchos, se olvidan de hacerlo. otros no tienen la fuerza de hacerlo:¿somos la voz de los que no tienen voz?

Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia. Que lo confiesen los redimidos por el Señor, los que él rescató de la mano del enemigo, los que reunió de todos los países: norte y sur, oriente y occidente. Erraban por un desierto solitario, no encontraban el camino de ciudad habitada; pasaban hambre y sed, se les iba agotando la vida; pero gritaron al Señor en su angustia, y los arrancó de la tribulación.

Los guió por un camino derecho, para que llegaran a una ciudad habitada. Den gracias al Señor por su misericordia, por las maravillas que hace con los hombres. Calmó el ansia de los sedientos, y a los hambrientos los colmó de bienes. Yacían en oscuridad y tinieblas, cautivos de hierros y miserias; por haberse rebelado contra los mandamientos, despreciando el plan del Altísimo. El humillo su corazón con trabajos, sucumbían y nadie los socorría. Pero gritaron al Señor en su angustia, y los arrancó de la tribulación.

Los sacó de las sombrías tinieblas, arrancó sus cadenas. Den gracias al Señor por su misericordia, por las maravillas que hace con los hombres. Destrozó las puertas de bronce, quebró los cerrojos de hierro. Estaban enfermos por sus maldades, por sus culpas eran afligidos; aborrecían todos los manjares, y ya tocaban las puertas de la muerte. Pero gritaron al Señor en su angustia, y los arrancó de la tribulación. Envió su palabra para curarlos, para salvarlos de la perdición. Den gracias al Señor por su misericordia, por las maravillas que hace con los hombres.

Ofrézcanle sacrificios de alabanza, y cuenten con entusiasmo sus acciones. Entraron en naves por el mar, comerciando por las aguas inmensas. Contemplaron las obras de Dios, sus maravillas en el océano. El habló y levantó un viento tormentoso, que alzaba las olas a lo alto: subían al cielo, bajaban al abismo, el estómago revuelto por el mareo, rodaban, se tambaleaban como borrachos, y no les valía su pericia. Pero gritaron al Señor en su angustia, y los arrancó de la tribulación.

Apaciguó la tormenta en suave brisa, y enmudecieron las olas del mar Apaciguó la tormenta en suave brisa, y enmudecieron las olas del mar. Se alegraron de aquella bonanza, y él los condujo al ansiado puerto. Den gracias al Señor por su misericordia, por las maravillas que hace con los hombres. Aclámenlo en la asamblea del pueblo, alábenlo en el consejo de los ancianos. El transformará los ríos en desierto, los manantiales de agua en aridez; la tierra fértil en marismas, por la depravación de sus habitantes. Transforma el desierto en estanques, el erial en manantiales de agua.

Coloca allí a los hambrientos, y fundan una ciudad para habitar. Siembran campos, plantan huertos, recogen cosechas. Los bendice, y se multiplican, y no les escatima el ganado. Si menguan, abatidos por el peso de infortunios y desgracias, el mismo que arroja desprecio sobre los príncipes y los descarría por una soledad sin caminos levanta a los pobres de la miseria y multiplica sus familias como rebaños.

Los rectos lo ven y se alegran, a la maldad se le tapa la boca Los rectos lo ven y se alegran, a la maldad se le tapa la boca. El que sea sabio, que recoja estos hechos y comprenda la misericordia del Señor.

PELIGROS DE LA VIDA Peligro y rescate. Ese es el ciclo de la vida. Así era en la antigüedad, y así es ahora. La forma y el nombre de los peligros cambian, pero el miedo que sentimos cuando vienen es el mismo, como es el mismo el respiro cuando se van. Y la misma es la mano del Señor que nos salva de ellos. El hombre bíblico enumeraba cuatro peligros: desierto, calabozo, enfermedad y tempestad en el mar. Y cuatro rescates: del hambre y la sed del desierto al camino recto, hasta la ciudad amurallada; de la oscuridad de la prisión a la luz de la libertad; de la enfermedad a la salud; y del mar enfurecido a la seguridad del puerto. En mi vida también, Señor, están presentes las arenas del desierto, la soledad del calabozo, la fiebre del cuerpo y la amenaza del mar y el aire y aun la tierra, bajo la maldición de la guerra y el terrorismo en todas partes. La humanidad no se ha enmendado en dos mil años. La vida del hombre es hoy, más o menos, la misma en el tráfico de la ciudad que lo era en las arenas del desierto. Vivo en el peligro, temo las catástrofes, me acobardo ante el sufrimiento y me entrego a la desesperación. Vivo de lleno este salmo, Señor. Necesito la mano que me salve de los peligros de mi vida. De mi desierto y mi prisión y mi tormenta. Necesito tu mano, Señor, tu visión y tu luz, tu calma y tu poder. Necesito día a día la certeza de tu presencia y la firmeza de tu brazo. Necesito ser rescatado, porque todavía no soy libre.

Te damos gracias, Señor, porque eres bueno, porque nos has reunido de todos los países de la tierra; a los hambrientos de salvación los colmas de bienes, y arrancas las cadenas de quienes se veían esclavos; que en tus atrios no haya hambrientos, ni pobres, ni abatidos, a fin de que tu misericordia quede patente.