Música de Adviento A. Pärt Dios con nosotros CUARTA SEMANA DE ADVIENTO

Alaba, alma mía, al Señor, con todo el misterio que llevas dentro Alaba, alma mía, al Señor, con todo el misterio que llevas dentro. Baila al ritmo de la vida, que el Dios de la alegría salvadora hace palpitar la creación. Entona con entusiasmo tu canto porque el Señor es bueno, porque es Santo, y porque nos regala generosamente su santificación. Del libro “La Mare de Jesús” de M.Regina Goberna

Exulta vibrante de gozo, porque es así como el Todopoderoso hace cosas grandes en los pequeños. ¿No lo ves cada día admirándose en los niños, en los impotentes, en los oprimidos de cuerpo o de espíritu, que, con su propia fisonomía desdibujada por la humillación, no paran de reflejar la imagen de Dios?

Alaba, alma mía, al Señor, porque su gran amor se extiende a todas las generaciones sin que nadie quede excluido. Cantemos hoy unidos en un gesto de profecía mientras preparamos la hora en que todos nos llamaremos hermanos porque todos seremos iguales.

DIOS María no es la Palabra, es una página en blanco donde está escrita una palabra: DIOS

DIOS CON NOSOTROS CUARTA SEMANA DE ADVIENTO

¿Tu me vas a construir una casa para que habite en ella?

Dios prepara casa a los desvalidos Sl 68

Habitaré entre ellos, les acompañaré Habitaré entre ellos, les acompañaré. Yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo. 1Re 6

Sois templo de Dios y el espíritu de Dios habita en vosotros. 1Co 3,16

Dice el Señor: nunca he habitado en un palacio; siempre os he acompañado en el camino habitando en una tienda.. 2S 7,6

La Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros. Jn 1,14

EMMANUEL

iluminad los que viven en la sombra de la muerte. Sol naciente, esplendor de la Luz eterna y Sol de justícia. DIOS NUESTRO, renuévanos, V E N I D haznos ver la luz de tu mirada, iluminad los que viven en la sombra de la muerte. sálvanos. (Sl.79)

Mi alma se alegra en el Señor, Rey de las naciones, Piedra angular, que de dos pueblos haces uno, Mi espíritu celebra al Dios que me salva, ven a liberar la humanidad que formásteis de la tierra. Porqué ha mirado mi pequeñez (Lc.1)

Les revela su alianza (S. 24) Levantad bien alta la cabeza, porqué pronto seréis liberados El Señor se da a conocer íntimamente a sus fieles, Emmanuel, esperanza nuestra, ven a liberarnos. No tardes más. Les revela su alianza (S. 24)

Para guiar nuestros pasos por caminos de paz. Per el amor entrañable de nuestro Dios Nos visitará un sol que viene del cielo Para guiar nuestros pasos por caminos de paz.

Se ha cumplido el tiempo. El Señor envia su Hijo a la tierra.

VEN, SEÑOR JESÚS Monjas de San Benito de Montserrat