d e m a d r e Más f u e r t e que el a m o r d C dar Clic para avanzar 1

VIII Domingo Ordinario Isaías 49, 14-15: Yo nunca me olvidaré de ti Sólo en Dios he puesto mi confianza Salmo 61: I Corintios 4, 1-5 El Señor pondrá al descubierto las intenciones del corazón No se preocupen por el día de mañana San Mateo 6,

La Leonera cuevas, barrancas y peñascos que han dado origen a variadas leyendas Encierra 3

De pequeños escuchábamos el cuento de la cueva llena de tesoros D ifícil, encontrarla d ada la estrechez de su entrada Pero, quienes lograban entrar se obsesionaban por tanta riqueza, y era imposible salir por aquella estrecha abertura Los atrapa su propia ambición Un uento que se convierte en realidad cuando el hombre queda atrapado por la ambición de los bienes terrenos c 4

No pueden servir M a t e o 6, 2 4 b a Dios y al dinero 5

la riqueza se adueña del corazón El rico termina esclavo de sus riquezas, no sirviéndose de ellas, sino sirviéndolas a ellas Sabe bien que la riqueza se convierte un dios que todo lo absorbe y que exige veneración y sumisión Jesús conoce el riesgo enorme que se corre cuando 6

y muchas teologías se han escrito queriendo justificar la bondad de la riqueza en pasajes del Antiguo Testamento Pero los profetas y Cristo exigen un corazón libre de ataduras doctrinas Muchas se le consideraba como signo de la bendición de Dios 7

¿Por qué esta exigencia de Jesús? esclavizado no puede experimentar el amor se dejó seducir por las riquezas, entregó su corazón y su país a los dioses extranjeros Cuando la fraternidad se rompe, se oscurece el rostro de Dios y surgen las dudas y los recelos El pueblo de Israel Porque un corazón 8

H e r m o s a i m a g e n d e I s a í a s : ¿Puede acaso una madre olvidarse de su criatura hasta dejar de enternecerse por el hijo de sus entrañas? Aunque hubiera una madre que se olvidara, yo nunca me olvidaré de ti Isaías 49, 15a Si nos amparamos en la riqueza, la tengamos o no, si en ella depositamos nuestra esperanza podremos experimentar este amor inmenso de Dios! ¡No 9

El Señor pondrá al descubierto I c o r i n t i o s 4, 5 las intenciones del corazón 10

La riqueza de unos pocos sólo puede mantenerse a costa de otros La idolatría del dinero corrompe las relaciones y se deforma la inteligencia Se han creado estructuras que privilegian la autonomía absoluta del mercado provocando graves males sociales La riqueza de unos pocos sólo puede mantenerse a costa de otros 11

Actualmente algo debe fallar en nuestro interior Hay quien utiliza a Dios como negocio y como sustento y justificación de su riqueza cuando nos decimos cristianos disfrutando de nuestros bienes, sin cuestionarnos por las necesidades de los pobres 12

Yo nunca I s a í a s 4 9, 1 5b me olvidaré de ti 13

Isaías nos invita a confiar en la Providencia no en el sentido asistencialista, si no en una llamada a buscar el Reino de Dios Cristo nos da ejemplo de un verdadero equilibrio: Trabajó con sus manos y ganó el sustento con su sudor, pero siempre se sintió en manos de su Padre Es bueno procurar el bienestar y la seguridad, pero es malo hacernos esclavos de los bienes materiales hasta sentirnos identificados con ellos 14

Ante las palabras de Isaías y de Jesús debemos cuestionarnos: ¿Qué cosas ocupan mi corazón? ¿Busco a Dios pero no me suelto de mis ambiciones? 15

Padre Bueno, concédenos descubrir el valor de tu amor, en tus manos y que el curso de los acontecimientos del mundo sentirnos se desenvuelva, según tu voluntad, en la justicia, en la paz y en la fraternidad. Amén. 16

Mons. Enrique Díaz Díaz Sugerencias y/o comentarios a : Power Point por: José del Carmen García Cano Reflexión Dominical por: 2 de marzo del