Meditación de cada frase de la oración: Alma de Cristo de San Ignacio de Loyola
Por los siglos de los siglos
Sin cansancio ya, sin decaimiento, sin interrupción.
Por los siglos de los siglos.
Sin que la contingencia de lo temporal, ni lo efímero de lo caduco y mortal,
tu posesión eterna de mí. ni lo inseguro de lo humano, comprometa ya tu amor en mí, tu amistad conmigo, tu posesión eterna de mí.
y nacido para la eternidad. Por los siglos de los siglos. Porque tu amor me hizo hijo del tiempo y nacido para la eternidad.
Porque es poca toda la vida para darte gracias.
Porque es poca toda la vida y cantar tus divinas misericordias. para glorificarte y cantar tus divinas misericordias.
Por los siglos de los siglos; porque sólo una eternidad de amor, de entrega, puede ser compensación definitiva y plena de todas mis debilidades, pecados y tibiezas; de tantos propósitos mil veces fallidos.
Por los siglos de los siglos,
Para que sea ya por fin mi vida un himno eterno a tu amor y una conquista definitiva de tu Corazón de Redentor, Corazón de Amigo.
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