Lección 22 Ama con sacrificio Filipenses 2.1-11 «Nada hagáis por rivalidad o por vanidad; antes bien, con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo». — Filipenses 2.3 Año 27 Vol. 1

PROPÓSITO Reproducir los valores del evangelio del Reino en nuestras vidas, según los expresa el apóstol Pablo. Este desafío se extiende a alertarnos sobre los motivos que sostienen algunas de nuestras prácticas religiosas y a considerer como un principio medular de la fe el modelaje de amor sacrificial trazado por nuestro Señor Jesucristo.

BOSQUEJO I. Unanimidad en la expression del amor (Flp 2.1-2). II. Obrando en provecho de los demás (vv. 3-4). III. Humildad y obediencia de Cristo, fundamentada en amor (vv. 5-11).

VOCABULARIO COMUNIÓN DEL ESPÍRITU: En el contexto del mensaje de Pablo a la comunidad de Filipos se puede entender como la dimension más profunda de la relación de los creyentes con Jesucristo como su Salvador y por virtud de ello, un vínculo más estrecho en el amor fraternal entre creyentes. EXALTACIÓN: En la perspectiva de Pablo implica cómo Dios condujo a Jesucristo, en una ruta ascendente, desde su condición más humillante en la muerte de cruz hasta colocarlo en supremacía sobre todo lo creado.

TEXTO BÍBLICO: Filipenses 2.1-2 RVR 1 Por tanto, si hay algún Consuelo en Cristo, si algún estímulo de amor, si alguna communion del Espíritu, si algún afecto entrañable, si alguna misericordia, 2 completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa. VP 1 Así que, si Cristo les ha dado el poder de animar, si el amor los impulsa a consolar a otros, si todos participan del mismo Espíritu, si tienen un corazón compasivo, 2 llénenme de alegría viviendo todos en armonía, unidos por un mismo amor, por un mismo espíritu y por un mismo propósito.

TEXTO BÍBLICO: Filipenses 2.3-5 VP 3 No hagan nada por rivalidad o por orgullo, sino con humildad, y que cada uno considere a los demás como mejores que él mismo. 4 Ninguno busque únicamente su propio bien, sino también el bien de los otros. La humillación y la exaltación de Cristo 5 Tengan unos con otros la manera de pensar propia de quien está unido a Cristo Jesús, RVR 3 Nada hagáis por rivalidad o por vanidad; antes bien, con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo. 4 No busquéis vuestro propio provecho, sino el de los demás. 5 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús:

TEXTO BÍBLICO: Filipenses 2.6-8 RVR 6 Él, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, 7 sino que se despojó a sí mismo, tomó la forma de siervo y se hizo semejante a los hombres. 8 Mas aún, hallándose en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. VP 6 el cual: Aunque existía con el mismo ser de Dios, no se aferró a su igualdad con él, 7 sino que renunció a lo que era suyo y tomó naturaleza de siervo. Haciéndose como todos los hombres y presentándose como un hombre cualquiera, 8 se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, hasta la muerte en la cruz.

TEXTO BÍBLICO: Filipenses 2.9-11 RVR 9 Por eso Dios también lo exaltó sobre todas las cosas y le dio un nombre que es sobre todo nombre, 10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, en la tierra y debajo de la tierra; 11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para Gloria de Dios Padre. VP 9 Por eso Dios le dio el más alto honor y el más excelente de todos los nombres, 10 para que, ante ese nombre concedido a Jesús, doblen todos las rodillas en el cielo, en la tierra y debajo de la tierra, 11 y todos reconozcan que Jesucristo es Señor, para Gloria de Dios Padre.

RESUMEN • La invitación de Pablo a que los filipenses completen su gozo (v. 2), es un pedido a hacer un esfuerzo de reconexión con los fundamentos del evangelio y con la necesaria relación fraternal que propenda a sostener una comunidad de fe saludable. • El mismo sentir mencionado por Pablo es una invitación a que –con los matices que pueda tener– el amor anclado en la fidelidad a Jesucristo pueda eslabonar la cadena de relaciones fraternales que nos permitan la convivencia sana en la comunidad de fe, en la familia y la comunidad extendida.

RESUMEN • Ese sentir no es otra cosa que una identificación profunda con la vida y obra de Cristo que nos traza el rumbo hacia una reconexión con las fuentes primarias del auténtico amor fraternal. • De la misma manera que, en su momento, Pablo tuvo que recurrir a un testimonio dramático que colocaba a Jesucristo y su sacrificio como paradigma del auténtico amor, hoy día esa misma declaración tan contundente debe ser el norte de nuestra vivencia personal y eclesiástica.

ORACIÓN Señor de nuestras vidas, que tienes tan presente nuestra condición humana, abre nuestro entendimiento spiritual para poder tener presentes los valores del evangelio de nuestro Señor Jesucristo, que propenden a la unidad y al amor fraternal. Permítenos entender e internalizar el sentir de humildad y entrega de Cristo para poder estar dispuestos al amor sacrificial. En su nombre oramos. Amén.