PARABOLA DE LOS TALENTOS

Slides:



Advertisements
Presentaciones similares
Mateo 25,14-30.
Advertisements

DOMINGO 33 AÑO c A Pensando en el juicio postretro, escuchemos los clarinetes del Requiem de guerra, de Britten Regina.
Parábolas sobre las virtudes Juntos, os vamos a presentar...
¿Le faltó algo? Marcos 12:28-34.
Meditación sobre el Meditación sobre elEvangelio del próximo Domingo.
DOMINGO XXXIII DEL TIEMPO ORDINARIO, CICLO A, 16 NOV/2014.
DOMINGO 33 del Tiempo Ordinario DÍA DE LA IGLESIA DIOCESANA.
13 de noviembre de Tiempo ordinario (A) Mateo 25,14-30 Red evangelizadora BUENAS NOTICIAS Despierta en la Iglesia la confianza. Pásalo Despierta.
ORAR en Semana 33 del Tiempo Ordinario - Ciclo A 2014
El momento de rendir cuentas.
La parábola de los talentos
Ciclo A Evangelio según san Mateo 25, En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: -- «Un hombre, al irse de viaje, llamó a sus.
LOS TALENTOS RECIBIDOS
Coment. Evangelio Mt Domingo XXXIII Ciclo A. 16 Noviembre Jesús Sanz Montes. Arzobispo Oviedo Música: Waves. Wav Montaje: Eloísa DJ Avance.
Un hombre que se iba al extranjero llamó a sus empleados y los dejó encargados de sus bienes: a cada cual según su capacidad. Luego se marchó.
Un hombre que se iba al extranjero llamó a sus empleados y los dejó encargados de sus bienes: a cada cual según su capacidad. Luego se marchó.
DOMINGO 33 del Año CiclO A Pensando en la hora en que seremos juzgados, escuchemos los clarinetes del Requiem de guerra, de Britten.
Transiciones manuales, a ritmo lento, para que EL EVANGELIO PENETRE EN LA VIDA. Monjas de Sant Benet de Montserrat La melodía de un Adagio de Albinoni.
La parábola nos invita a la vigilancia activa, a mantener la tensión y a no dejarnos vencer por la rutina, la pereza o la comodidad. La espera, además.
Noviembre 16 Mateo 25, VEN ESPÍRITU SANTO Mi alma está pronta, ven Espíritu. Ilumíname para que pueda comprender y vivir aquello que Jesús me quiere.
Domingo 33º del tiempo ordinario
Un hombre que se iba al extranjero llamó a sus empleados y los dejó encargados de sus bienes: a cada cual según su capacidad. Luego se marchó.
CRISTO LO ES TODO EN TODO. Cristo es todo en todo. El es El artista es todo codiciable. Cantar De Cantares.5:16. Su paladar, dulcísimo, y todo él, deseable.
Ven a la fiesta, es el momento de rezar y de cantar. Hoy celebramos que en nuestras vidas Dios viviendo siempre está (Bis)
EL ÚNICO CAMINO AL CIELO
LOS TALENTOS MATEO 25, En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: Un hombre que se iba al extranjero llamó a sus empleados y los.
ADMINISTRANDO LOS DONES CON CRISTO
La parábolas de los talentos
Domingo 33º Tiempo Ordinario – Ciclo A a cada cual según su capacidad.
La parábola de los talentos nos enseña que una vida cristiana basada, no en la formalidad, la auto-protección y el temor, sino en la gratuidad, en.
31 domingo Tiempo Ordinario
La parábola de los talentos nos enseña que una vida cristiana basada, no en la formalidad, la auto-protección y el temor, sino en la gratuidad, en.
Decimoséptimo domingo
La Parábola de los talentos
El respondió: "No quiero". Pero después se arrepintió y fue.
Mateo 25, Jesús dijo a sus discípulos esta parábola:
La parábola El fariseo y el publicano.
HIJO, TODO LO MÍO ES TUYO HIJO, TODO L0 MÍO ES TUYO Evangelio de Lucas
Celebración de la Pascua en el Santo sepulcro
Por nuestro bien, ¡que den frutos nuestros talentos!
Trigésimo tercer Domingo
Curso Colegio “La Purísima” Callosa de Segura
Entra en el gozo de tu Señor
I JORNADA MUNDIAL DE LOS POBRES.
DOMINGO CUANDO HABLA EL CORAZÓN…
************************************* Lo que no se entrega, se pierde
Te felicito siervo bueno y fiel
Hay cosas que se pierden si no se dan.
Domingo XXXIII Tiempo Ordinario TALENTOS
entra en el gozo de tu Señor
¿Sabéis de donde viene la MISA que celebramos cada domingo?
Hay cosas que se pierden si no se dan.
HIJO MIO, TODO LO MIO ES TUYO HIJO MIO, TODO LO MIO ES TUYO
La ley de la siembra y la cosecha.
“... por más rico que uno sea, la vida no depende de los bienes”.
“Eres un empleado fiel y cumplidor”
Trigésimo tercer Domingo
Ciclo A DOMINGO 33 Pensando en la hora en que seremos juzgados, escuchemos los clarinetes del “Réquiem de guerra”, de Britten.
Ciclo A DOMINGO 33 Pensando en la hora en que seremos juzgados, escuchemos los clarinetes del “Réquiem de guerra”, de Britten.
Buen momento para meditar
15 de julio Domingo Tiempo Ordinario
DOMINGO 33 del Año CiclO A Pensando en la hora en que seremos juzgados, escuchemos los clarinetes del Requiem de guerra, de Britten
El don de los talentos.
EL ÚNICO CAMINO AL CIELO
Una mujer llamada por dios
Música: “Què li darem al noi de la mare” (Pop. Catalana)
¿CÓMO ESPERAREMOS? Romanos 12:11-13 En lo que requiere diligencia, no perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor; gozosos en la esperanza;
¿CÓMO FUE RECIBIDO CRISTO EN EL PRIMER SIGLO ?
Sermón #22.-Yo soy la luz del mundo.
“... por más rico que uno sea, la vida no depende de los bienes”.
Transcripción de la presentación:

PARABOLA DE LOS TALENTOS TEXTO BÍBLICO Mt. 25. 14-30

Parábola de los talentos «Es como un hombre que, al irse de viaje, llamó a sus siervos y los dejó al cargo de sus bienes: a uno le dejó cinco talentos, a otro dos, a otro uno, a cada cual según su capacidad; luego se marchó. El que recibió cinco talentos fue enseguida a negociar con ellos y ganó otros cinco. El que recibió dos hizo lo mismo y ganó otros dos. En cambio, el que recibió uno fue a hacer un hoyo en la tierra y escondió el dinero de su señor. Al cabo de mucho tiempo viene el señor de aquellos siervos y se pone a ajustar las cuentas con ellos.

Se acercó el que había recibido cinco talentos y le presentó otros cinco, diciendo: “Señor, cinco talentos me dejaste; mira, he ganado otros cinco”. Su señor le dijo: “Bien, siervo bueno y fiel; como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante; entra en el gozo de tu señor”. Se acercó luego el que había recibido dos talentos y dijo: “Señor, dos talentos me dejaste; mira, he ganado otros dos”. Su señor le dijo: “¡Bien, siervo bueno y fiel!; como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante; entra en el gozo de tu señor”. Se acercó también el que había recibido un talento y dijo: “Señor, sabía que eres exigente, que siegas donde no siembras y recoges donde no esparces, tuve miedo y fui a esconder tu talento bajo tierra. Aquí tienes lo tuyo”.

El señor le respondió: “Eres un siervo negligente y holgazán. ¿Con que sabías que siego donde no siembro y recojo donde no esparzo? Pues debías haber puesto mi dinero en el banco, para que, al volver yo, pudiera recoger lo mío con los intereses. Quitadle el talento y dádselo al que tiene diez. Porque al que tiene se le dará y le sobrará, pero al que no tiene, se le quitará hasta lo. Y a ese siervo inútil echadlo fuera, a las tinieblas; allí será el llanto y el rechinar de dientes”».

La vigilancia ante un Dios de imprevisible llegada no significa una actitud casi enfermiza de temor.

Dios llega siempre, ve siempre, oye siempre, y, por supuesto Dios llega siempre, ve siempre, oye siempre, y, por supuesto... da y se entrega siempre.

Nos habla este Evangelio de los talentos de plata que recibieron unos empleados para que negociasen fructuosamente mientras el señor volvía de un viaje al extranjero.

Estos talentos no eran riquezas cualesquiera, ni tampoco de esos sobrantes que se destinan a invertir a cualquier azar.

Más bien, como dice el texto de Mateo, se trataba de los bienes del señor, de su haber personal, con lo cual se indicaban dos cosas:

primero, la extrema confianza del señor en sus empleados al poner en sus manos y en su ingenio los bienes que él poseía;

y segundo, la justa petición de cuentas a su vuelta, el balance de la gestión hecha por sus empleados,

pues no les había dejado una propina para el divertimento, sino precisamente la administración de sus bienes.

La parábola es un toque de atención sobre los talentos que cada uno hemos recibido.

Y en nuestra vida, al igual que en la parábola, esos dones son la misma herencia de Dios,

son sobre todo la Persona y la Palabra de su Hijo que Él nos ha querido entregar como el gran talento, el gran regalo a la humanidad.

Dios nos ha dado toda su vida que éramos capaces de acoger.

Habitamos un mundo bastante infeliz, a pesar de las muchas cosas bellas que hay en la tierra y en los hombres.

Y sin embargo fuimos creados para la dicha inmensa, para ese banquete del Señor del que habla la parábola.

Hemos de hacer nuestro el proyecto de Dios y “negociar” con los talentos recibidos:

la vida, la inteligencia, el afecto la vida, la inteligencia, el afecto..., las personas que nos han sido dadas, para generar los frutos esperados por Dios y por nuestro corazón:

la paz, la justicia, el perdón, la misericordia, la bondad, la comprensión, la creatividad, el amor.

Hay otros que, con los mismos talentos recibidos de Dios, se empeñan en generar frutos de muerte, malaventuranza y fatalismo.

La aventura de la felicidad a la que Dios nos llama, necesita de trabajadores que pongan en juego,

con fidelidad e inteligencia, los dones y talentos, las aptitudes y herramientas que han recibido.

Somos hijos de Dios y trabajamos en esta gran empresa familiar en la que Él ha querido hacernos partícipes:

el Reino, con el que no se persigue otra ganancia que la felicidad, la dicha bienaventurada,

la gloria a Dios y la paz a los hombres.