TEMA 3 (2ª parte): LA CRISIS DEL ANTIGUO RÉGIMEN Y LA CONSTRUCCIÓN Y CONSOLIDACIÓN DEL ESTADO LIBERAL EN ESPAÑA

ÍNDICE 5. ESPAÑA: RESTAURACIÓN, LIBERALISMO E IDEALES DEMOCRÁTICOS 5.1. EL REINADO DE FERNANDO VII (1814-1833): ABSOLUTISMO FRENTE A LIBERALISMO. a) El Sexenio absolutista. la restauración del absolutismo (1814-1820) b) El Trienio liberal (1820-1823) c) La década ominosa (1823-1833) d) El final del reinado: el problema sucesorio. 5.2. EL REINADO DE ISABEL II (1833-1868): LA CONSTRUCCIÓN DEL ESTADO LIBERAL EN ESPAÑA. - Características generales del reinado de Isabel II 5.2.1) El período de las regencias. a. La regencia de María Cristina (1833-1840) b. La regencia de Espartero (1840-1843) 5.2.2) La etapa isabelina (1844-1868) a. La década moderada (1844-1854) b. El bienio progresista (1854-1856) c. El final del reinado (1856-1868) 5.3. EL SEXENIO REVOLUCIONARIO 3.1) El gobierno provisional (1868-1870) 3.2) El reinado de Amadeo de Saboya (1871-1873) 3.3) La Primera República española (1873-1874)

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Introducción Durante el siglo XVIII España experimentó los mismos procesos políticos y revolucionarios que Europa. Con Fernando VII se produjo la restauración del absolutismo; posteriormente tuvo lugar una etapa liberal, con Isabel II, y otra democrática que estableció la república como forma de gobierno.

5.1. EVOLUCIÓN POLÍTICA DEL REINADO DE FERNANDO VII (1814-1833): ABSOLUTISMO FRENTE A LIBERALISMO.

Sexenio absolutista (1814-1820) Trienio liberal (1820-1823) Finalizada la Guerra de la Independencia Fernando VII regresó a España en 1814 y fue recibido con júbilo por el pueblo, que veía en el monarca el “símbolo” de los seis años de resistencia tras la lucha contra los franceses. Sin embargo, como veremos, la vuelta del hasta entonces “deseado” Fernando VII que había sido vista como la recuperación de la libertad de la nación, no tardó en deparar una desagradable sorpresa. El reinado de Fernando VII supuso el último intento de resistencia del absolutismo. Para el estudio de este reinado lo dividiremos en tres etapas: Sexenio absolutista (1814-1820) Trienio liberal (1820-1823) Década ominosa (1823-1833) https://www.youtube.com/watch?v=w3KuALfToxc https://www.youtube.com/watch?v=lQKmP0WJQHA

a) El sexenio absolutista (1814-1820) Los liberales pretendían que a su regreso a España el rey jurase la Constitución de 1812 convirtiéndose en monarca constitucional por el contrario los absolutistas presionaban para que restaurase el Antiguo Régimen. Así, cuando Fernando VII vuelve a España no se dirige directamente a Madrid sino que entra por Cataluña, pasa por Zaragoza y de allí se dirige a Valencia donde recibirá el Manifiesto de los persas, un escrito realizado por varios diputados absolutistas en el que se le instaba a que volviera a implantar el Antiguo Régimen. El rey, que ya había comprobado que contaba con el respaldo de gran parte del ejército, la nobleza y el clero, redacta un decreto el 4 de mayo de 1814 en Valencia mediante el cual se proclamaba monarca absoluto y abolía toda la legislación de las Cortes de Cádiz así como la Constitución de 1812.

Tras este “golpe de Estado” vino la represión política, fueron detenidos y juzgados liberales y afrancesados, acusados respectivamente de conspiración contra el rey y de traición, otros muchos se vieron obligados a abandonar el país. Sin embargo, esta represión no detuvo la acción de los sectores liberales que se dedicaron a conspirar. Fueron varios los pronunciamientos para intentar acabar con el absolutismo (Espoz y Mina, Díaz Porlier, Luis Lacy) pero todos fracasaron al no contar con el suficiente apoyo.

b) El trienio liberal (1820-1823) Después de varias intentonas golpistas, en 1820 triunfó el pronunciamiento del general Riego. Tras la sublevación se instaura un gobierno liberal y se restablece de nuevo la Constitución de 1812. Fernando VII se vio obligado a jurar la Constitución que había abolido seis años antes y a decir aquello que ha quedado como frase hecha de la doblez y de la infamia: «Marchemos todos, y yo el primero, por la senda constitucional». Se inicia así un período de tres años, conocido como Trienio Liberal, en el que los liberales gobernaron con la Constitución de 1812 pero en el que muy pronto surgen problemas: Una fuerte crisis económica Los desacuerdos entre el sector moderado y el progresista de los liberales. Los procesos independentistas en América Latina https://www.youtube.com/watch?v=mk4fRFD0Ul4

Este proceso reformista liberal no contaba con la simpatía del rey por lo que Fernando VII solicitó ayuda secretamente a las potencias absolutistas del Congreso de Viena y en 1823 un ejército francés conocido como los Cien Mil Hijos de San Luis (organizado por la Santa Alianza) invade el país y devuelve el poder absoluto al rey. El rey Fernando VII recibe en el Puerto de Santa María (Cádiz) al duque de Angulema al frente de los Cien Mil Hijos de San Luis enviados por la Santa Alianza

c) La vuelta al absolutismo. (La década ominosa 1823-1833) Fusilamiento de Torrijos y sus compañeros en las playas de Málaga Desde 1823 y hasta su muerte en 1833 Fernando VII vuelve a implantar el absolutismo más conservador suprimiendo todas las reformas del período anterior. Se anula de nuevo la Constitución de 1812, se restaura la Inquisición y lleva a cabo una durísima represión de los liberales, por este motivo se conoce con el nombre de década ominosa (abominable). Aunque se siguieron produciendo numerosas revueltas todas ellas fracasaron. Mariana Pineda fue ajusticiada acusada de bordar una bandera liberal https://www.youtube.com/watch?v=vD4sE5T-51I

d) El final del reinado. El problema sucesorio. La cuestión sucesoria domina la parte final del reinado de Fernando VII. Ya en su cuarto matrimonio, estando la reina embaraza y ante la posibilidad de una descendencia femenina, el rey promulgó en marzo de 1830 la Pragmática Sanción que derogaba la Ley Sálica (ley que impedía reinar a las mujeres), con lo que privaba de sus derechos al, hasta ese momento, heredero trono a D. Carlos Mª de Isidro, el hermano del rey. En octubre de 1830 nacía la heredera Isabel II. Muchos absolutistas no aceptaron a Isabel como legítima heredera y en 1832 partidarios de don Carlos (llamados apostólicos o carlistas) protagonizaron los sucesos de la Granja, una conjura que obligó a un Fernando VII, gravemente enfermo, a reimplantar la Ley Sálica. Sin embargo, al recuperarse el monarca, volvió a derogar la citada ley y el propio don Carlos tuvo que abandonar la corte sin reconocer a su sobrina como legítima heredera.

El 29 de septiembre de 1833 fallecía Fernando VII y se iniciaba la regencia de María Cristina de Borbón (madre de Isabel II). Unos días después, en diferentes puntos del país, se producían levantamientos armados a favor de don Carlos, daba comienzo así una guerra civil , la Primera Guerra Carlista, que enfrentó a carlistas contra isabelinos. (https://www.youtube.com/watch?v=R4TvNwGvwZw&list=PL3BA7A73203133279&index=96) Este enfrentamiento dará lugar a una serie de guerras (guerras carlistas) que asolaron España durante el siglo XIX.

5. 2. LA CONSTRUCCIÓN DEL ESTADO LIBERAL EN ESPAÑA 5.2. LA CONSTRUCCIÓN DEL ESTADO LIBERAL EN ESPAÑA. EL REINADO DE ISABEL II (1833-1868) https://www.youtube.com/watch?v=RsxGUgqh4bo

- Características generales del período isabelino Desde la muerte de Fernando VII (1833) se produjeron en España cambios similares a los que tuvieron lugar en el resto de Europa (expansión del liberalismo, desarrollo industrial, transformación de una sociedad estamental en una sociedad de clases, etc.) pero a un ritmo diferente. Fue durante el reinado de Isabel II cuando finalizará el absolutismo en España y se consolidará el sistema político liberal a través de una monarquía constitucional.

La monarquía liberal que se instauró en España con el reinado de Isabel II tuvo las siguientes características: Un gran poder e influencia de la Corona en la vida política ya que podía elegir o destituir a ministros a pesar de ya existía la separación de poderes La alternancia en el poder de dos partidos políticos liberales: los moderados y los progresistas sobre los que se sustentó el nuevo sistema político. Predominaron claramente los gobiernos moderados que contaron con mayor apoyo por parte de Isabel II. Un gran poder e influencia del ejército que, en numerosas ocasiones recurrió a los pronunciamientos militares (golpes de Estado con apoyo popular) por parte de los espadones (militares que tomaban posiciones políticas en las distintas facciones liberales). Los cambios de partido en el Gobierno llevaban aparejado, en la mayoría de los casos, la aprobación de una nueva Constitución, esto explica el excesivo número de constituciones del período y su corto período de vigencia. Si bien las que tuvieron mayor vigencia fueron de las de carácter moderado lo que pone de manifiesto el carácter conservador del liberalismo en España.

España se organizó como un Estado centralista con la división de España en provincias. Se organizó una economía capitalista. Se crea el Ministerio de Fomento cuya finalidad era la construcción de obras públicas, así se pusieron en marcha infraestructuras básicas como el ferrocarril. Se llevaron a cabo desamortizaciones (expropiación y venta mediante subasta pública de tierras y bienes de la Iglesia, la nobleza y tierras comunales de los ayuntamientos) con el objetivo de crear una clase media rural (pequeños propietarios campesinos que pusieran en producción abundantes latifundios improductivos) y al mismo tiempo hacer frente a la deuda del Estado, aunque sus resultados fueron un fracaso. (https://www.youtube.com/watch?v=umTyl_voVNw&index=95&list=PL3BA7A73203133279)

En la evolución del reinado de Isabel II podemos hablar de dos grandes etapas: Las regencias, la reina es menor de edad y en su nombre gobierna primero su madre María Cristina de 1833 a 1840 y luego Espartero de 1840 a 1843. La segunda se corresponde con la mayoría de edad de la reina (1843 a 1868). En septiembre de 1868 una revolución destrona a Isabel II y se abre una nueva etapa en la Historia de España, el Sexenio Revolucionario.

5.2.1) El período de las regencias (1833-1843) a) La Regencia de Mª Crisitina (1833-1840) Fernando VII muere en 1833 dejando el trono a su hija Isabel de 3 años de edad. Ante la corta edad de la futura reina se ocupó de la regencia su madre María Cristina de Borbón-Dos Sicilias hasta 1840. Durante este período se va a producir el tránsito político del absolutismo al liberalismo alternándose en el poder progresistas y moderados.

Ese mismo año estalló la guerra civil entre los partidarios de Carlos María Isidro y los de Isabel por los derechos a ocupar el trono de España (Primera Guerra Carlista) La guerra no sólo era un conflicto dinástico, también se dirimía el sistema político que tendría el país. De esta forma se originaron los dos bandos que se enfrentaron en la denominada Primera Guerra Carlista (1833-1839): Los isabelinos: liberales que apoyaron a Isabel II ( a su regente María Cristina) a cambio de la implantación de un Estado liberal. Estaban liderados por Espartero. Los carlistas absolutistas que dieron su apoyo a don Carlos María Isidro, con el fin de mantener el absolutismo. Resultó vencedor el bando isabelino, lo que significó el asentamiento de los liberales en el poder y la construcción de un Estado liberal en España. Carlos Mª Isidro Espartero El abrazo de Vergara (1839) A pesar de la victoria isabelina, todavía surgirían dos conflictos bélicos más: - La Segunda Guerra Carlista (1846-1849) - La Tercera Guerra Carlista (1872-1876)

Entre 1835 y 1837, los progresistas , encabezados por Mendizábal implantaron un régimen liberal, un conjunto de leyes permitieron la disolución del régimen señorial o la extinción de los gremios. Además se llevó a cabo la desamortización eclesiástica.

b) La regencia de Espartero (1840-1843) Los escándalos de la corte y los enfrentamientos entre moderados y progresistas desembocaron en 1840 en un pronunciamiento progresista, que dio lugar a la sustitución de María Cristina por el general Espartero. Aunque el fuerte autoritarismo con el que gobernó le valió la oposición de gran parte de del país. A Espartero no le quedó otro remedio que dimitir en 1843 y, para evitar una nueva regencia, Isabel II es declarada mayor de edad a los 13 años, finalizando así el período de las regencias.

2.2) La etapa isabelina (1844-1868) Durante esta etapa volvieron a alternarse los gobiernos moderados y progresistas. Se pueden diferenciar tres períodos: La década moderada (1844-1854): Liderada por el general Narváez, líder del partido moderado. Se elaboró un Código penal que unificó las leyes anteriores, Se reformó la Hacienda centralizando los impuestos Se creó la Guardia Civil para velar por la seguridad pública en el ámbito rural. También se tuvo que hacer frente a la Segunda Guerra Carlista cuando Carlos de Borbón fue rechazado como esposo de Isabel II.

b) El bienio progresista (1854-1856): - Liderado por Espartero. Durante este período se dio un fuerte impulso a la construcción del ferrocarril (Ley de Ferrocarriles) Se produjo una nueva desamortización llevada a cabo por Madoz que afectó a las tierras comunales de los ayuntamientos.

c) El final del reinado (1856-1868) Se caracterizó por la alternancia en el poder de los moderados y de la Unión Liberal (nuevo partido liderado por el general O’Donnell). Se impuso una actuación gubernamental muy autoritaria con una fuerte represión. Una grave crisis económica, el enorme descontento social y el desgaste político del régimen isabelino hizo que la oposición al régimen fuera en aumento y surgieron nuevos grupos políticos, como los demócratas o los republicanos que cuestionaron la monarquía.

En 1866 los sectores contrarios a la monarquía borbónica firmaron el Pacto de Ostende, en él se acordó derrocar a la reina. Poco después triunfó una sublevación militar encabezada por los generales Serrano y Prim, era la Revolución de 1868 (llamada la Gloriosa) que consiguió derrocar a Isabel II que tendría que marchar al exilio. Se inicia así un nuevo período de la Historia de España: el Sexenio Revolucionario o Democrático.

5.3. EL SEXENIO DEMOCRÁTICO (1868-1874) A lo largo de seis años se intentó la construcción en España de un régimen democrático. Esto significaba superar el liberalismo conservador de la etapa anterior e introducir los principios democráticos (sufragio universal masculino, amplios derechos políticos y reformas sociales para avanzar en la igualdad). Podemos dividir este período en tres etapas:

a) El gobierno provisional (1868-1870) Tras la marcha de Isabel II se constituyó un gobierno provisional que, además de impulsar un programa de reformas democráticas, convocó elecciones a Cortes, estas Cortes aprobaron la Constitución de 1869, la más progresista de todas las promulgadas durante el siglo XIX. En la nueva Constitución se establecía que la forma de gobierno en España era la monarquía constitucional. Había, por tanto, que buscar un rey que aceptase el trono español. Finalmente el elegido fue Amadeo de Saboya ( hijo del rey de Italia Víctor Manuel II).

b) El reinado de Amadeo de Saboya (1871-1873) El nuevo rey llegó a España a finales de 1870, fue un rey que se esforzó por desempeñar bien sus funciones pero al llegar a España lo primero que se encontró fue que el general Prim (jefe de gobierno y su principal defensor) había sido asesinado. http://www.rtve.es/alacarta/videos/prim-el-asesinato-en-la-calle-del-turco/prim-asesinato-calle-del-turco/2864820/ http://www.elmundo.es/la-aventura-de-la-historia/2014/07/31/53d8b32a22601daf7a8b457b.html

Amadeo I fue un rey con verdaderas intenciones democráticas pero, desde el principio, tuvo que hacer frente a varios problemas: a la oposición de amplios sectores políticos (los moderados, los carlistas y la Iglesia se mantuvieron fieles a los Borbones; los republicanos y los demócratas reclamaban una república) al estallido de dos conflictos armados: una insurrección en Cuba y la Tercera Guerra Carlista. Finalmente, falto de apoyos y con demasiados problemas por resolver renunció al trono en febrero de 1873, dejando como única alternativa la proclamación de una república.

c) La Primera República española (1873-1874) Tras la renuncia al trono de Amadeo de Saboya se proclamó la Primera República en España que, aunque fue recibida con entusiasmo por las sectores populares de las ciudades, tampoco estuvo exenta de problemas. Su escasa duración estuvo marcada por: la división entre los propios republicanos condujo a la inestabilidad política (en sus primeros once meses se sucedieron cuatro presidentes), grandes dificultades para mantener el orden con numerosas revueltas sociales, la continuación y el recrudecimiento de dos conflictos iniciados en el período anterior: la Tercera Guerra Carlista y la Guerra de Cuba, una insurrección cantonalista (sublevación protagonizada por el movimiento federalista que propugnaba el autogobierno municipal o provincial).

Proclamación del Cantón de Cartagena El cantón de Cartagena se separó del Estado español durante 185 días en los que hizo reformas revolucionarias y pidió la adhesión a EEUU. Proclamación del Cantón de Cartagena

El movimiento cantonalista murciano tuvo especial importancia en Cartagena . El 12 de julio de 1873, los cantonalistas se alzaron en armas y su líder Antonete Gálvez proclamó el Cantón murciano. Esta proclamación fue entendida como un acto de rebeldía contra el Estado y el Gobierno ordenó el asedio y bombardeo de la ciudad de Cartagena. Los cantonalistas resistieron cinco meses hasta que, en enero de 1874, tuvieron que rendirse. Otros municipios murcianos como Jumilla también se proclamaron cantones o repúblicas independientes, “La nación de Jumilla desea estar en paz con todas las naciones extranjeras y, sobre todo, con la nación murciana, su vecina; pero si ésta se atreve a desconocer nuestra autonomía y a traspasar nuestras fronteras, Jumilla se defenderá, como los héroes del 2 de Mayo (de 1808), y triunfará en la demanda (…) y a no dejar en Murcia piedra sobre piedra” Algunos cantones llegaron a acuñar su propia moneda. Podemos ver en la imagen un duro cantonal. Los revolucionarios cartageneros llegaron a contactar con el gobierno de los Estados Unidos solicitando su ingreso en la Unión. Entrada tropas gubernamentales en Cartagena

Todos estos problemas y la falta de apoyos de la nobleza y la alta burguesía, favorecieron a los partidarios del regreso de los Borbones al trono español. El 3 de enero de 1874 se produjo un golpe de Estado encabezado por el general Pavía, en el que guardias civiles ocuparon el Congreso de los Diputados cuando se estaba procediendo a la votación de un nuevo presidente. Se iniciará así un nuevo período de la Historia de España, la restauración de la monarquía borbónica en la persona de Alfonso XII. Entrada de las tropas del General Pavía en el Congreso de los Diputados. Alfonso XII (hijo de Isabel II)

LA INDEPENDENCIA DE LA AMÉRICA ESPAÑOLA TEMA 3 (3ª parte) LA INDEPENDENCIA DE LA AMÉRICA ESPAÑOLA

ÍNDICE 6. LA INDEPENDENCIA DE LA AMÉRICA ESPAÑOLA. 6.1. Las causas de la independencia. 6.2. El desarrollo de los acontecimientos. a) Primera etapa (1808-1814). b) Segunda etapa (1816-1825) 6.3. Las consecuencias del proceso emancipador. a) Las consecuencias para España b) Las consecuencias para los nuevos países americanos.

6. LA INDEPENDENCIA DE LA AMÉRICA ESPAÑOLA Durante el siglo XIX el continente americano experimentó grandes cambios políticos y territoriales que dieron lugar al nacimiento de la América actual. En las primeras décadas del siglo XIX se produjo la independencia de la mayoría de las colonias españolas en América.

6.1. Las causas de la independencia Desde hacía tiempo existía un profundo malestar en gran parte de la población que habitaba las colonias españolas de América, especialmente en la burguesía criolla. A principios del siglo XIX, este malestar estalló y se produjeron las guerras de independencia. Varios factores contribuyeron a ello: La influencia de las ideas ilustradas y de los principios de libertad e igualdad promovidos por la Revolución francesa que fueron difundidas por los estudiantes criollos que viajaban a Europa y por los directivos de las compañías comerciales implantadas en América. El éxito de la revuelta de las colonias británicas de América del Norte, que acabaría con la proclamación de EE.UU. La debilidad militar y política ocasionada en España por el vacío de poder que se produjo durante la Guerra de la Independencia. El descontento de la burguesía criolla que veía a España como un freno para su economía, ya que obstaculizaba el comercio y les imponía fuertes cargas fiscales. Además, los criollos estaban marginados de la vida política y administrativa de las colonias, recibían un trato discriminatorio dado que los principales cargos en las colonias eran desempeñados por españoles peninsulares. El apoyo económico ofrecido a los independentistas por el Reino Unido, que pretendía acabar con el monopolio comercial de España en sus colonias y que estas fueran independientes para poder comerciar con ellas libremente. Los criollos son los blancos descendientes de españoles nacidos en América.

6.2. El desarrollo de los acontecimientos La evolución del proceso de independencia atravesó por dos etapas: La primera tuvo lugar durante la Guerra de la Independencia española (1808-1814). Las colonias americanas se negaron a reconocer como monarca español a José I. Al igual que en España en las colonias americanas también se formaron Juntas dirigidas por criollos que asumieron el gobierno en nombre de Fernando VII. Estas Juntas pronto se convirtieron en organismos de poder que pretendían actuar al margen de España y en algunos virreinatos se extendió la idea de independencia.

Los focos más importantes de secesión en esta etapa se originaron en: En el virreinato de Nueva España (México), liderado por el cura Hidalgo. En la capitanía general de Venezuela liderado por Simón Bolívar y en el virreinato de la Plata (Paraguay Argentina) dirigidos por José de San Martín. Éstas fueron las primeras naciones en independizarse. Simón Bolívar fue un militar venezolano y una de las figuras más destacadas del proceso de emancipación americana. Fue el principal protagonista en la independencia de Venezuela, Bolivia y de la Gran Colombia (Colombia, Panamá, Venezuela y Ecuador) de cuya república fue presidente. José de San Martín, militar cuyas campañas fueron decisivas para las independencias de  Argentina, Chile y Perú.

https://www.youtube.com/watch?v=db36E0UMHgU

Cuando Fernando VII regresó al trono, una vez finalizada la guerra contra los franceses, los criollos se negaron a renunciar al poder que ya habían adquirido. La intervención de las tropas españolas para acabar con las revueltas consiguió restablecer temporalmente el dominio sobre algunas de las colonias, como en el caso de Nueva España, y sus cabecillas fueron víctimas de una dura represión. Pero en la mayoría de ellas continuaron muy activos los movimientos en favor de la independencia.

La segunda etapa tuvo lugar entre 1816 y 1825 A partir de 1816 se aceleró el proceso independentista debido, por un lado, a la ayuda económica y militar que Gran Bretaña y EE.UU. prestaron a las rebeldes independentistas, y por otro lado se vio favorecido por la inestabilidad política que atravesaba España en esos momentos. La insurrección alcanzó grandes éxitos, gracias a las campañas victoriosas de Simón Bolívar y José de San Martín. El general San Martín dirigió una expedición que derrotó a los españoles en Chacabuco (1817) y logró la independencia de Chile. En el norte, Simón Bolívar derrotó a los españoles en Carabobo y fundó la Gran Colombia (1821), que después se dividiría en Venezuela, Colombia, Ecuador y Panamá. La rebelión protagonizada por Iturbide en México, lograría su independencia en 1821 que fue seguida por todas Centroamérica. El general Sucre derrotaría a los españoles en Ayacucho (1824) y emancipó Perú y Bolivia. Tras la derrota de Ayacucho España perdería todas sus posesiones americanas, exceptuando Cuba y Puerto Rico.

6.3. Las consecuencias del proceso emancipador. a) Las consecuencias para España: España perdió su hegemonía sobre América Latina. La independencia de la América española supuso el final de trescientos años de dominio español en este continente, este dominio sería ahora sustituido por la influencia británica y estadounidense. La pérdida de las colonias americanas le restó prestigio y poder internacional a España pasando a convertirse en una potencia de segundo orden. La economía española se resintió ya que, por un lado, dejó de percibir cuantiosas riquezas que le llegaban de América (metales preciosos, productos coloniales, impuestos, etc.) y, por otro, perdió el dominio comercial sobre las colonias.

b) Las consecuencias para los nuevos países americanos: La burguesía criolla alcanzó el poder político y económico que tanto había deseado. Las nuevas naciones que surgieron (Venezuela, Argentina, Méjico, etc.) se convirtieron en repúblicas independientes, aunque poco a poco los EE.UU. fueron imponiendo su dominio sobre los nuevos países latinoamericanos. Sin embargo, no todos los ideales se cumplieron. El sueño de una América unida al que aspiraba Bolívar no llegó a hacerse realidad y la inestabilidad interna marcaría la política de estas nuevas repúblicas americanas, donde los golpes de estado acababan con los sucesivos gobiernos.

WEBGRAFÍA http://www.rtve.es/alacarta/videos/memoria-de-espana/memoria-espana-vivan-caenas/3288172/ http://www.rtve.es/alacarta/videos/memoria-de-espana/memoria-espana-senda-liberal/3290182/ http://www.rtve.es/alacarta/videos/memoria-de-espana/memoria-espana-viva-espana-honra/3293548/ http://www.rtve.es/alacarta/videos/memoria-de-espana/memoria-espana-regreso-borbones/3295337/