El Monte de los Olivos
El Monte de los Olivos es un cerro que cada uno está asociado con las religiones judía y cristiana. Desde los tiempos bíblicos hasta la actualidad, Judios (150.000 tumbas) fueron enterrados aquí, de acuerdo con su creencia, el Mesías que llevará a la resurrección de los muertos resucitarán en primer lugar por el monte, la gente enterrada allí resucitarán primero. El Monte se menciona por primera vez en la Escritura, cuando el indulto otorgado por David Absalón (II Samuel 15-20) y se cita con frecuencia en el Nuevo Testamento, ya que está en el camino de Jerusalén a Betania ", es el lugar donde Jesús lloró sobre Jerusalén, no instruyó a sus discípulos y entregó el "Sermón de los olivos" en los tiempos del fin y el Apocalipsis, también será la noche de la traición.
El Monte visto desde el Valle de Josafat
La iglesia de "Todas las Naciones" o la Basílica de la "agonía"
Durante la construcción entre 1919 y 1924, los mosaicos bizantinos encontrados durante las excavaciones se han incorporado en el edificio.
La tumba llamada de Absalón, el hijo rebelde del rey David.
El huerto de Getsemaní (prensa de aceite en hebreo) es un olivar, Jesús se fue allí a menudo, Judas lo sabía y lo delató a aquellos que lo habían llevado a su detención.
Un olivo con su tronco, tal vez de más de dos mil años.
La Iglesia de Santa Maria-Magdalena
Construida en 1886 por orden del zar Alejandro III de Rusia, cuenta con siete cúpulas doradas, en forma de cebolla.
Es también una necrópolis, están enterrados: la Gran Duquesa Elizabeth, su sirvienta Varvara y Alicia de Battenberg - madre del duque de Edimburgo.
© Miki Pitish
La Iglesia de las Lágrimas de Cristo
Su construcción fue terminada en 1955, por idea de los franciscanos tiene la forma de una lágrima.
Vista desde la iglesia de las Lágrimas: La Vieja de Jerusalén
La Iglesia del Padre Nuestro
Se levanta sobre la gruta donde Jesús enseñó la oración del Señor.
Los paneles son la oración de azulejos en más de 60 idiomas del mundo.
“La tumba de Maria”
Interior del santuario de la Asunción, donde ascendió al cielo.
Fin Ave Maria de Schubert cantada por Renata Tebaldi