María en el Evangelio de Marcos M en T. y MC. Alejandro Humberto Palacios Torres

El Evangelio de Marcos Se atribuye a Marcos la invención del género literario “Evangelio”. Se acepta como lugar y fecha de composición hacia el 70 d.C. en Roma. Se dice que recoge la predicación de Pedro (el cual murió hacia el 64 d.C.). Sus destinatarios: una comunidad de antiguos paganos, amenazada por persecuciones y contradicciones (dudas) internas.

La imagen de Jesús en el Evangelio de Marcos (EvMc) Marcos hace una aportación original a la búsqueda del sentido de Jesús (Mc 8, 29). En un mundo donde la historia es de los vencedores, Mc escribe un relato sobre un judío vencido. El EvMc es un relato inconcluso de una praxis truncada violentamente que deja sin respuesta sobre lo que pasó después. Quizá los discípulos de todos los tiempos sean los que le den respuesta y continuidad a la pregunta sobre Jesús.

Un Evangelio diferente Sus relatos son concretos, sus verbos casi siempre en presente, realzan los relatos. Llama la atención los pocos discursos en comparación con los milagros dentro del texto. Quizá con este elemento el autor indica que Jesús enseña e inaugura el Reino ante todo con su manera de vivir y obrar. Se le ha llamado el evangelio antes de la pascua.

La división del texto Evangélico PRIMERA sección (Mc 1,14 – 8, 26) SEGUNDA sección (Mc 8, 27 – 16, 8) Jesús proclama la llegada próxima del Reinado de Dios y ofrece los signos de su llegada. Sección marcada por el “Secreto mesiánico” Único título aplicado a Jesús en esta sección: el «Hijo del hombre». Proclamación de Pedro e incomprensión de los discípulos. Sección marcada por la creciente oposición hacia Jesús. Títulos aplicados a Jesús: «Hijo de David», «Mesías» (aceptado ante los judíos), «Hijo de Dios» (reconocido por un pagano).

El conflicto creciente como tema global del Evangelio de Marcos PRELUDIO: presentación de los grupos (Mc 1, 14–3, 6) 1º PARTE. Conflictos en Galilea: 3, 7 – 6, 6: Primer conflicto: con su familia y con sus adversarios, escribas, fariseos y herodianos (cf. Mc 3, 6). 6, 6 – 8, 26: Segundo conflicto: con sus discípulos, fueron enviados pero aun seguían sordos y ciegos al proyecto. 8, 27 – 10, 52: Tercer conflicto: con las concepciones mesiánicas en boga (que se expresan en los discípulos). 2ª PARTE. Conflicto en Jerusalén: 11, 1 – 13, 37: Cuarto conflicto: con los sumos sacerdotes, escribas y ancianos (cf. Mc 12, 1-10). 14, 1 – 15, 47: El conflicto final: Jesús muere abandonado de todos, incluso de sus discípulos. 16, 1-8: Superación del conflicto. El ángel pone de nuevo en camino: sólo cuando hayan llegado al confín del mundo y de la historia (símbolo: Galilea) verán al resucitado.

María en el Evangelio de Marcos Llama la atención su parquedad sobre el tema: no hay relatos de la infancia, ni bodas, ni aparece María en el calvario. María aparece en dos textos polémicos: Mc 3, 31–35: «Tu madre, tus hermanos y tus hermanas están fuera y te buscan». Mc 6, 1–3: «No es éste el carpintero, el hijo de María…». Ambos textos se sitúan en la primera parte del evangelio y constituyen el primer conflicto que debió sufrir Jesús. La humildad de la parentela de Jesús es esgrimida para humillarlo ante su auditorio (ver el paralelo de Jn 6, 42).

La Familia de Dios Jesús funda una nueva familia: la del Reino, cuyo vínculo no es la sangre sino la fe en el proyecto (Lc 8, 21; cf Jn 1, 12). Jesús rechaza la familia tradicional violenta, separatista y excluyente. Hacer la voluntad del Padre no es doblegarse a un oscuro querer sino complacerse en hacer lo que a Dios le complace (1Jn 3, 21-23). La respuesta de Jesús, representa tanto una advertencia como una alabanza: Rechazar a los que “se juntan” con Jesús es ponerse en riesgo de perder a Dios. Pero en la medida en que la familia de Jesús acepte la voluntad de Dios, se unirá más sólidamente a Jesús

Otra visión de María ¿Cuándo una mujer sabe que su hijo está en problemas qué es capaz de hacer? Podría ser que María, sin comprender del todo, “se lanza” a rescatar a su hijo, sabiendo que las oposiciones van creciendo. Ella pudo ser quien moviera a “los hermanos” para rescatar a Jesús.

Una nueva lectura: María, madre fuerte y arriesgada La familia entonces, instigada por la madre se mueve pero no se atreve a entrar. Frente a un mundo androcéntrico, donde la mujer no podía tener iniciativa María rompe con los esquemas sociales y se lanza encabezando la comitiva. María es la madre que ama en profundidad y no se detiene cuando uno de los suyos está en riesgo. De ahí que sea más conocida que su marido entre sus paisanos (Mc 6, 3).