SAN JOSÉ DE CALASANZ

José de Calasanz nace en un pueblecito de Huesca llamado Peralta de la Sal en el seno de una familia aragonesa. Fue un niño revoltoso e inquieto que tuvo amigos con los que, después de terminar las clases en la escuela, hacía alguna travesura. Se subía a los árboles, corría por el campo y jugaba al escondite con sus hermanos y amigos.

Pronto creció y se fue a estudiar a Estadilla, población cercana a su pueblo. José se matriculó en Gramática y Humanidades se distinguió por su compañerismo, aplicación y buen comportamiento.

Concluidos los estudios en la Universidad de Lérida quiso pasar a la de Valencia y tras una larga enfermedad se retiró a Barbastro a proseguir su carrera tres años más, hasta cumplir los 25 años y ser consagrado sacerdote.

En el año 1592 viaja a Roma y allí ve la vida de pobreza y falta de instrucción en la que viven los niños. Este hecho le preocupa tanto que enseguida se dedica a la educación de los mismos.

José de Calasanz no se contentaba con realizar esta misión los domingos; lo hacía todos los días en cualquier parte donde pudiera reunir auditorio, hasta en la plaza pública; y no solo enseñaba a los niños sino también a los obreros, a los campesinos y a los mendigos.

La escuela gratuita enseguida se vio poblada por un centenar de niños La escuela gratuita enseguida se vio poblada por un centenar de niños. Pronto le prestaron ayuda algunos hombres buenos que colaboraron con él, ya por módica paga, ya por solo comida. Funda las “Escuelas Pías”, primera organización en pro de la cultura popular.

Los resultados obtenidos en la enseñanza movieron al Papa Clemente VIII a llamarle y protegerle en lo sucesivo.

José de Calasanz con su dinero y con las limosnas que recogía, compró todo el material necesario para sus alumnos: mesas, bancos, cuadernos, lapiceros, libros…y premios que atrajesen a los niños a la escuela, y que a su vez sirvieran para educarles.

Después de 24 años de actividad docente, el Papa eleva a Orden Religiosa la Congregación de las “Escuelas Pías”. La difusión de la nueva Orden por toda Italia fue rápida, pasando después a otras naciones.

José de Calasanz, además, se preocupó por la formación de los maestros José de Calasanz, además, se preocupó por la formación de los maestros. Los Escolapios, miembros de las “Escuelas Pías”, fundaron las primeras Escuelas Normales, también llamadas Escuelas de Magisterio.

José de Calasanz murió a los 92 años, habiendo dedicado 51 de ellos a la enseñanza. La festividad de San José de Calasanz, patrono de los maestros, se conmemora cada 27 de noviembre.

A TODO EL PROFESORADO MUCHAS FELICIDADES Y FELIZ DÍA DEL MAESTRO