LA FAMILIA Y LOS VALORES

ORACIÓN Oh, Dios, que la Sagrada Familia nos dejaste un modelo perfecto de vida familiar vivida en la fe y en la obediencia a tu voluntad. Ayúdanos a ser ejemplo de fe y amor a tus mandamientos. Socórrenos en la misión de transmitir la fe a nuestros hijos. Abre su corazón para crezca en ellos la semilla de la fe que recibieron en el bautismo. Fortalece la fe de nuestros jóvenes, para que crezcan en el conocimiento de Jesús. Aumento el amor y la fidelidad en todos los matrimonios, especialmente aquellos que pasan por momentos de sufrimientos o dificultad. Unidos a José y María, te lo pedimos por Jesucristo, tu Hijo nuestro Señor. Amén

EL AMOR ES LA FUENTE DE TODOS LOS VALORES 1Cor. 13,1-13: Dios es amor. ¿Qué es el amor? . Todos los valores dimanan del amor. . Dios es la fuente del amor.

Amar es: El amor de los esposos hace presente el amor de Dios. El amor implica renuncia. El amor implica perdonar. El amor es trascendente. El amor genera vida. El amor redime y salva.

LA FAMILIA: (Lc 2, 41-50) Esta historia es la historia de todas las familias. Somos el resultado de las familias. La familia moldea, pero no nos determina. La familia a los grandes hombres y mujeres.

LA FAMILIA COMO VALOR La familia es la pequeña Iglesia. En el ambiente rural la familia tiene una gran fuerza… “La familia es la unión más estrecha, profunda y santa que existe en la vida del hombre”. “La familia: escuela insustituible del amor y la esperanza”.

“Hijos, obedezcan a sus padres en el Señor; porque esto es justo “Hijos, obedezcan a sus padres en el Señor; porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre” (Pr 6, 20). Ef 6, 1-4.

Jesús nación y creció en una familia entre las ocupaciones diarias, la oración y las relaciones con los vecinos: Lc 2, 52. Su familia lo acogió y lo protegió con amor. Lo inició en la observancia de las tradiciones y las leyes. Lo acompañó hacia la madurez y hacia la misión a la cual estaba destinado. La familia es una fuente y una escuela de humanidad y de vida cristiana.

La familia está llamada a vivir y a cultivar el amor recíproco y la verdad, el respeto, el servicio y la justicia y la lealtad y la solidaridad. El hogar cristiano ha de estar impregnado de la presencia de Dios. La familia debe orar. La familia favorece el diálogo y la libertad. Por la fe, la familia se convierte en comunidad de discípulos y misioneros. La familia está llamada a ser evangelizada y evangelizadora.