VIA CRUCIS DE LOS INOCENTES
Fui condenado a muerte antes de haber nacido. A mí nadie me dio amor, 1- CONDENACIÓN Fui condenado a muerte antes de haber nacido. A mí nadie me dio amor, ¡porque no le intereso a nadie!
2- JESÚS CON SU CRUZ Me cargaron con la maldición de no ser deseado. Todos me maldicen. ¡Me van a eliminar!
3- LA PRIMERA CAÍDA Soy un "pecado”. Soy una "caída”. Dicen falsamente: "Nadie puede ser obligado a cargar con las consecuencias de un embarazo no deseado". Pero me las cargan a mí, que no tengo ni siquiera la “culpa” de haber sido concebido.
4- ENCUENTRO CON LA MADRE ¡Qué doloroso fue tu encuentro con tu Madre, Señor! ¡Pero yo, yo... no tengo madre que se encuentre conmigo y que me llore! ¡Estoy encarcelado en el vientre de una mujer que decide y pide mi muerte!
5- EL CIRENEO A ti alguien te ayudó a llevar tu cruz. A mí... a mí nadie me ayuda a llevar la mía. El médico dará a mi madre un narcótico para que ella no sufra, mientras yo debo sufrir la muerte haciéndome pedacitos para vender a multinacionales.
6- LA VERÓNICA ¿Quién me enviará una Verónica que me consuele en mi condenación? Nadie conoce mi dolor. La ley me condena y engaña a los mismos cristianos.
7- LA SEGUNDA CAÍDA Es fácil decidir mi muerte, porque soy pequeño y estoy totalmente indefenso. Tú fuiste vendido por Judas, y mi padre hace cálculos: "¿Cuánto me va a costar?" ¡Y decide mi muerte, porque le sale más barata que mi vida!
¿De qué me valen a mí las "leyes"? ¡Permiten mi muerte! 8- LAS SANTAS MUJERES ¿De qué te servirán, Señor, las lágrimas de las mujeres? No podrán impedir tu muerte. ¿De qué me valen a mí las "leyes"? ¡Permiten mi muerte!
9- LA TERCERA CAÍDA ¡Es la caída fatal! Tengo que morir. Están hechos los cálculos: ¡No hay lugar para mí! No hay ni un pedacito de pan para mí en este valle de lágrimas. ¡Tengo que morir!
Te desnudan de tus vestidos. 10- JESÚS DESNUDADO Te desnudan de tus vestidos. ¡Yo nunca tuve un vestido! Tan sólo mi tierna piel, y me la desgarran como si temieran que me escape.
11- LA CRUCIFICCIÓN A ti te clavaron a una cruz y no te quebraron ni un solo hueso. A mí me hacen pedazos sin compasión alguna. Y también "cuentan todos mis pedacitos". Así se aseguran de que mi madre no sufra una infección. “¡Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen!”
12- MUERTE EN LA CRUZ Tú mueres. ¡Yo también! Tú eres inocente, yo también. Acepta mi martirio y “acuérdate de mí cuando entres en tu Reino”. Acógeme en tu Reino eterno junto con los Santos Inocentes masacrados por Herodes, igual que yo...
13- DESCENSO DE LA CRUZ Muerto pudiste reposar en el regazo de la que te llevó en su vientre. En cambio, a mí siguen maldiciéndome, porque sería una carga pesada para sus conciencias. Te lo ruego: convierte mi cuerpo destrozado en “un cuerpo glorioso como el tuyo”.
14- EN LA TUMBA A ti te ofrecieron un sepulcro nuevo. Mi tumba es una bolsa de basura. Con razón dijiste a las piadosas mujeres: “No lloren por mí, sino más bien por ustedes y por sus hijos...” Texto: Richard Thaimann
¡QUIEN AMA NO MATA! ¡DI NO AL ABORTO!
“Lo que hagan a uno de estos mis pequeños, a mí me lo hacen”. ¡DI SÍ A LA VIDA! “Lo que hagan a uno de estos mis pequeños, a mí me lo hacen”. “Antes de formarte en el seno de tu madre, ya te conocía; antes de que tú nacieras, yo te consagré...” (Jeremias 1,5)