Trädgårdsmästaren (The Gardener / El jardinero o La crueldad del mundo), dirigida por Victor Sjöström en el verano de Productora: Svenska Biografteatern. Guión: Mauritz Stiller. Fotografía: Julius Jaenzon. 24 m. Muda. B/N. 31 rótulos. Reparto: Lilli Bech: Rose, la hija del empleado. Victor Sjöström: el jardinero. Gösta Ekman: el hijo del jardinero. Más adelante interpretaría a Fausto, en la película de Murnau. John Ekman: el general. Gunnar Bohman: el empleado del jardinero. Karin Alexandersson: la esposa del jardinero. El crítico sueco Bengt Idestam-Almquist, en su estudio de 1952 titulado Cine sueco: drama y renacimiento (Buenos Aires, Losange, 1958), explica lo siguiente en el capítulo V (pág. 85): Este fue el primer filme dirigido por Victor Sjöström. Trabajó en él más de una semana, cuando lo habitual por entonces en Suecia era emplear cinco o seis días. Los actores, especialmente en las tomas iniciales de los enamorados, se mueven muy deprisa. Todavía Sjöström no se detiene en la psicología individual, estudiando las facciones y los gestos del semblante. A pesar de la inversión económica llevada a cabo por la productora, la película fue censurada y se prohibió exhibirla públicamente. El pretexto era que se trataba de un argumento demasiado fuerte. Charles Magnusson, el director de la Svenska, protestó. La censura, entonces, con el fin de obtener un apoyo moral, ofreció una exhibición privada en la sala Röda Kvarn de Estocolmo, a la que fueron invitados ministros, periodistas y actores. El resultado fue que la prohibición se mantuvo.

Argumento: Una joven campesina llamada Rose (Lilli Bech) y el hijo (Gösta Ekman) de un jardinero (Victor Sjöström) se aman. El padre (Gunnar Bohman) de la joven es un empleado del jardinero, quien se opone a la relación de su hijo. Éste se ausenta durante un tiempo prolongado, a fin de completar su formación en una escuela especializada. A los tres años regresa, reanuda la relación con la joven (quien se ha acicalado expresamente para recibirlo en el embarcadero), pero la oposición del jardinero es frontal (ya en el embarcadero, ante el efusivo abrazo de los dos enamorados, el jardinero aparta ásperamente a su hijo de la muchacha, a quien acompaña su anciano y querido padre). Vemos cómo acude presuroso el hijo del jardinero a la modesta cabaña donde vive su amada, le pide respetuosamente permiso al padre de la muchacha, y ambos salen a dar un paseo en barca. Los enamorados se declaran tiernamente su amor el uno al otro, sentados en la barca, mientras se acarician honestamente. Como empleada del jardinero, la muchacha debe atender las mesas de los domingueros y de los ocasionales visitantes en la terraza, sobre todo marineros con sus camaradas y pasajeras conquistas femeninas. En los escalones de la vivienda de la joven, en cierta ocasión en que ambos enamorados conversan, el jardinero se acerca enfadado como siempre, y obliga a su hijo a levantarse e irse. El jardinero habla con su esposa del asunto, criticando la actitud del muchacho, pero la mujer ve con buenos ojos la relación de su hijo. Los enamorados se cuentan sus cuitas al borde de un sendero, comunicándole el joven cuáles son los proyectos que su padre tiene para con él, sobre todo alejarlo de ella. A pesar de la disconformidad de su esposa (Karin Alexandersson), el jardinero obliga a su hijo a marcharse de casa, a fin de separarlo por completo de Rose. Al pie del embarcadero, la despedida entre los jóvenes enamorados es triste y desgarradora. A partir de ese momento, el jardinero comienza a acosar a la joven, circunstancia que en una ocasión es vista incluso por la esposa del brutal macho sin escrúpulos.

Éste, aprovechando su impunidad, consigue violar a la muchacha en el invernadero, dejándola completamente abatida. La escena de la violación no se ve (es la primera elipsis importante de Victor Sjöström como realizador). Aunque sí vemos a Rose correr por el interior del invernadero mientras es perseguida implacablemente por su criminal maltratador. Además, inmediatamente se deshace del padre y de la hija, echándolos a la calle. La joven recuerda que en cierta ocasión, en la terraza del jardín, un asiduo general fue muy atento con ella, entregándole una generosa propina, encontrándoselo ahora a bordo de la embarcación que la traslada junto con su padre a otro punto de la ciudad. El general la reconoce y le entrega su tarjeta de visita y unos cuantos billetes, una suma no despreciable. Cuando la situación del padre y de la hija es casi desesperada, Rose se acuerda de la generosa oferta hecha en el transbordador por el general, y decide acercarse a la vivienda del respetado militar, quien la recibe, y, por tercera vez, le entrega una cierta cantidad de dinero. Ella lo vuelve a tomar alegre e inocentemente. Al poco tiempo, fallece el padre de la muchacha, quien de nuevo se presenta en la casa de su protector, acabando por convertirse, primero en sirvienta y después en su acompañante permanente, a la que trata como si fuera su propia hija (algunos críticos, tales como el sueco mencionado más arriba, hablan de que Rose se convierte en la amante del general, pero sería difícil afirmarlo a la vista de las escasas imágenes). Así transcurren varios años. La trata bien, pero cuando sufre una apoplejía, no le deja nada en el testamento. Cuando los familiares del general se presentan en la casa para el funeral, la expulsan para siempre. Durante un tiempo, sola y pobre, se entrega a la vida ligera, hasta que finalmente decide acercarse al jardín y al invernadero donde tuvo lugar el comienzo de su desgracia. Allí arranca las flores con desesperación, hasta que cae al suelo. Por la mañana, su violador se la encuentra muerta, cogiéndole la cabeza y el brazo, para cerciorarse, sin el más mínimo asomo de piedad.

Trädgårdsmästaren (1912). Los jóvenes enamorados al principio de su idilio.

Trädgårdsmästaren (1912). Rose se prepara para recibir bien vestida y acicalada a su amado después de una ausencia de tres años.

Trädgårdsmästaren (1912). Rose sirviendo una de las mesas de la terraza del jardín en donde su padre y ella son empleados del jardinero.

Trädgårdsmästaren (1912). Rose, al fondo, corre por el invernadero, mientras que la persigue implacablemente su acosador, el jardinero, hasta consumar la violación.

Trädgårdsmästaren (1912). Rose regresa, después de varios años, al invernadero donde comenzó su desgracia. Arranca desesperadamente las plantas y las flores y cae al suelo, donde morirá sola y abandonada por todos.

Trädgårdsmästaren (1912). El brutal jardinero encuentra por la mañana el cuerpo sin vida de Rose en el interior del invernadero. Su indiferencia y falta de piedad son absolutas.

Los actores, de izq a dcha, de la película Trädgårdsmästaren: Lili Bech, Victor Sjöström, John Ekman, Karin Alexandersson, Gunnar Bohman, Gösta Ekman y otra persona.