La población Afrodescendiente en Uruguay desde una perspectiva de género XI Encuentro Internacional de Estadísticas de Género Aguascalientes, México 29 de setiembre de 2010

1.La dimensión racial en el Sistema de Información 2.Aspectos socio-demográficos 3.Las diferencias en el sistema educativo 4.Las desigualdades en la actividad económica 5.La persistencia de la pobreza y las dificultades de acceso a ingresos 6.Reflexiones sobre el actual estado del diseño de políticas públicas de equidad racial y de género Contenidos de la presentación

1. La dimensión racial en el Sistema de Información  Desde 2008 Inmujeres cuenta con un área destinada a la elaboración de estadísticas para el debate y diseño de políticas de igualdad de género.  Entre los diversos temas que se propone abordar el SIG, está el de incluir la mirada desde la perspectiva racial a las desigualdades de género, partiendo del supuesto de la existencia de interseccionalidad de la discriminación.  El análisis de ambas dimensiones (racial y de género) se torna central ya que las desigualdades se potencian generando patrones de exclusión que afectan doblemente la vida de las mujeres negras.  Existe una fuerte necesidad en Uruguay de evidenciar la diversidad racial y contar con información rigurosa, sistemática y confiable que hable de las condiciones de desventaja que vive una buena parte de la población afrouruguaya

Antecedentes Desde 2006, el INE releva sistemáticamente la variable “ascendencia racial” en la Encuesta Continua de Hogares a través de una pregunta no excluyente donde se indaga por cinco categorías (afro o negra; asiática o amarilla; blanca; indígena; otra). Esto posibilitó un marco de información abundante para diversos estudios cuantitativos respecto de la situación de vida de las personas que se auto-reconocen afrodescendientes. Básicamente fue desde la Academia que se trabajó y trabaja aunque son estudios escasos y aún no consolidados en centros de estudio o núcleos de investigación. El apoyo del Sistema de Naciones Unidas (PNUD-UNFPA- UNIFEM) se torna clave en el impulso a estos trabajo en 2007 y 2008.

2. Aspectos socio-demográficos En Uruguay el 10,6% de la población se declara afrodescendiente, lo que representa unas personas. Más de viven en la capital del país. Luego le siguen en cantidad los departamentos de Canelones, Rivera y Salto (cuento).

Afrodescendencia urbana A diferencia de otros países de la región en Uruguay la población que se reconoce afrodescendiente se encuentra principalmente en Montevideo y áreas urbanas. Esto puede estar relacionado con la mayor expresión cultural de este colectivo, tradicionalmente en la capital del país y zonas cercanas al puerto y la ciudad y no tanto en el campo o asociados a trabajos rurales o de cultivos

La pirámide poblacional de las personas afrodescendientes muestra una población bastante más joven que la de la población no afro. Esta diferencia responde a una más alta tasa de fecundidad entre las mujeres afrodescendientes, a una menor esperanza de vida. Las características demográficas de la población afrodescendiente se asemejan a las características de la población de los quintiles de menores ingresos.

La paridez de las mujeres afro es superior a la de las no afro en todas las cohortes de edad. Entre las de 14 a 19 años se puede deducir una iniciación a la maternidad más temprana en las adolescentes afrodescendientes. Madres primero entre las jóvenes afrodescendientes

3. Las diferencias en el Sistema Educativo

4. Las desigualdades en la actividad económica La tasa de actividad de las mujeres negras son superiores a las no afro, así como su tasa de empleo, pero la mayor diferencia se encuentra en los niveles de desempleo, donde las mujeres afro presentan una tasa de 14,3 cifra muy alta para ser el primer año en que el país festejaba haber entrado al desempleo de 1 dígito. Este problema se agudiza en las mujeres afro más jóvenes, registrándose un desempleo del 32,5% entre las de 14 y 24 años de edad.

Las mujeres afro trabajan hasta más avanzada edad. Esto puede asociarse a trayectorias laborales sin cobertura de seguridad social.

La pobreza en Uruguay baja en forma sostenida desde 2006, sin embargo, las cifras de personas afrodescendientes viviendo en hogares pobres aun es alarmante y requiere políticas específicas que contemplen esta dimensión. Uno de los principales objetivos de este gobierno es erradicar la indigencia. Si pensamos que esta representa el triple que la indigencia entre los no afro sin dudas hay que diseñar políticas que integren la diversidad cultural que ello implica. 4 de cada 10 personas afrodescendientes en Uruguay viven en hogares por debajo de la línea de pobreza (2008) 5. La persistencia de la pobreza en los hogares afrodescendientes

Dificultad de acceso a ingresos propios

6. Evidencia y políticas públicas El gobierno se está animando a pensar en políticas de acción afirmativa, si bien resiste profundamente a las cuotas de género y las acciones de discriminación positiva para las mujeres NO gozan de ninguna simpatía, cuando el fenómeno se entrelaza con otra discriminación parece haber mejor disposición (claro ejemplo con la discapacidad) Aunque en Uruguay aun no existe ninguna política de acción afirmativa para las personas afrodescendientes, en los asuntos de educación se está esbozando la posibilidad de becas y estímulos especiales para no abandonar el sistema educativo. Si bien el hecho de que población afrodescendiente sea más joven que el resto de la población, puede ser una ventaja a los ojos de cualquier demógrafo/a, el hecho de que esto se relacione directamente con la pobreza es una fuerte alarma ya que son las mujeres negras las que tienen más hijos/as, pero tienen menor nivel educativo y mayores tasas de desempleo.

Esto llevado al terreno de los cuidados, establece una clara demanda de servicios para niños y niñas, y remite a una profunda discusión sobre el concepto de corresponsabilidad. ¿Esa población más joven, es responsabilidad exclusiva de las mujeres/madres? Aun la presencia de abuelas cuidadoras es importante en estas poblaciones, pero si suponemos que la incorporación de las mujeres al mercado laboral se sostendrá, y sabiendo que las mujeres negras trabajan en forma remunerada hasta más avanzada edad, ¿cómo se sustituirá el “colchón de cuidados con que hoy cuentan estos hogares? Estas son algunas de las preguntas que surgen frente al procesamiento y análisis de información que hoy es sistemática, confiable y que está en la Encuesta Continua de Hogares.

Muchas gracias Lucía Scuro Responsable del Sistema de Información de Género