Memoria gráfica de Tiermes Una visita en 1972 (tres años antes de las primeras excavaciones de José Luis Argente Oliver en 1975) …una fría y luminosa mañana del invierno soriano con el guarda y santero de Santa María de Tiermes Doroteo García Yagüe

Impresiones de una visita contemporánea “Aquél año nos desplazamos a Tiermes… El recorrido por sus calles y dependencias excavadas en la arenisca natural, los restos de fábrica que se alzan al exterior, como las termas…, el Castro…, la ermita románica de la Virgen de Tiermes, así como la misma roca rojiza donde se asienta el yacimiento, contrastando con la vegetación de estepa, profusa en aquel lugar completamente despoblado, producían un sentimiento sobrecogedor…” (Manuel Hernando del Cura, 2001)

Las Casas de Taracena… “Aquí excavó Don Blas Taracena, que yo estuve con él cuando era crío, y abajo en el suelo había muertos enterrados y muchos huesos y vasijas rotas, y monedas…”

Los restos de las Termas… “Aquí cerca todo es hueco, pise, señora, y oiga como suena… ” “Sepa que junto al río se encontró una bañera de bronce Don Blas Taracena, que escondió de nuevo después de darnos fiesta a los trabajadores ayudado por su hija, sin que nunca se volviera a ver el tesoro…” “Y junto al camino de la Virgen aparecieron hace cien años cuatro cazos de plata, que se llevaron a Segovia…”

La habitación rupestre… “Aquí en este hueco ataban las manos de los esclavos para darles su castigo, y así atados les azotaban… ¿Ve usted señora?”

El acueducto sur junto a los restos de las Termas… “Este puerta tallada en la pared de las casas lleva a pasadizos que nadie sabe de donde vienen ni adonde van…” “Dicen que una vez soltaron un gallo en esta boca y apareció al poco tiempo cantando en el Castillo de Caracena…”

El túnel del acueducto sur junto a las Termas … “¿Ve señora? Las tierras cierran el paso, pero de limpiarse seguro que llevaría al Castro y más allá….”

La puerta de acceso al túnel del acueducto sur junto a las Termas… “Deme la mano y salga señora con cuidado, porque en estos lugares hay pozos que nadie sabe donde llevan ni qué esconden…”

El “boquerón”, entrada del acueducto sur en Tiermes “Mire señora este agujero, boquerón lo llamamos, por aquí tenían los antiguos un camino de escape y ronda…” “Y aquí se cayó hace cien años una pastora por unas claraboyas, que murió la pobre abandonada, y desde entonces se aparece a quienes entran en el agujero… ¿Quiere usted señora entrar a verla?

El farallón… “Vea señora las cuevas que hay por el farallón, que hoy solo sirven de nidos de pájaros y que aún seguro que contienen tesoros escondidos…”

Panorama desde el templo… “Aquí arriba hay un templo, que dicen aparecieron hace tiempo piedras del mismo…” “Y por allí, señora, siguen las ruinas, y junto al río y los árboles hay hasta un puente enterrado, que yo vi incluso uno de sus arcos, ahora tapado…”

Las tumbas del río… “Aquí señora hay tumbas antiguas, mite usted las cajas talladas, las formas de los cuerpos, unas de mayores y otras de niños, las tapas de piedra…” “Se enterraban junto al camino, y eran gente pobre, porque poca cosa aparece cuando se abren…”

El Becerro de Oro… “Cuentan señora que los antiguos enterraron por aquí un becerro de oro, y que vino a buscarlo Don Blas Taracena, que yo estuve con él …” “Unos dicen que apareció y se lo llevaron, y otros dicen que aún está y los moros también lo buscaron , y que no era un becerro, sino un tesoro.“ “Yo no lo sé, pero mire señora cuantos huecos hay y cuanta gente viene con malas intenciones. Pero yo soy el guarda, y no se lo llevarán…”

Dedicado a la memoria de Doroteo García Yagüe Último Santero de la Virgen de Tiermes Tiermes, Navidad de 2008 LIFE Tiermes – AAMT