1CoRinTios 1:1-3 por,de,llamados
Hch 18:1-17 Pablo en Corinto Pablo salió de Atenas y se fue a la ciudad de Corinto. (2) Allí encontró a un judío llamado Áquila, que era de la región de Ponto. Hacía poco tiempo que Áquila y su esposa Priscila habían salido de Italia, pues Claudio, el emperador de Roma, había ordenado que todos los judíos salieran del país.[1] Pablo fue a visitar a Áquila y a Priscila, (3) y al ver que ellos se dedicaban a fabricar tiendas de campaña, se quedó a trabajar con ellos, pues también él sabía cómo hacerlas. (4) Todos los sábados Pablo iba a la sinagoga, y hablaba con judíos y griegos para tratar de convencerlos de hacerse seguidores de Jesús. (5) Silas y Timoteo viajaron desde la región de Macedonia hasta Corinto. Cuando llegaron, Pablo estaba dando a los judíos las buenas noticias de que Jesús era el Mesías. (6) Pero los judíos se pusieron en contra de Pablo y lo insultaron. Entonces Pablo, en señal de rechazo, se sacudió el polvo de la ropa y les dijo: «Si Dios los castiga, la culpa será de ustedes y no mía. De ahora en adelante les hablaré a los que no son judíos.» (7) De allí, Pablo se fue a la casa de un hombre llamado Ticio Justo, que adoraba a Dios. La casa de Ticio estaba junto a la sinagoga. (8) El encargado de la sinagoga se llamaba Crispo, y él y toda su familia creyeron en el Señor Jesús. También muchos de los habitantes de Corinto que escucharon a Pablo creyeron y fueron bautizados. (9) Una noche, el Señor Jesús habló con Pablo por medio de una visión, y le dijo: «No tengas miedo de hablar de mí ante la gente; ¡nunca te calles! (10) Yo te ayudaré en todo, y nadie te hará daño. En esta ciudad hay mucha gente que me pertenece.» (11) Pablo se quedó un año y medio en Corinto, y allí enseñó a la gente el mensaje de Dios. (12) Tiempo después, en los días en que Galión era gobernador de la provincia de Acaya, los judíos de Corinto atacaron a Pablo y lo llevaron ante el tribunal. (13) Les dijeron a las autoridades: —Este hombre hace que la gente adore a Dios de un modo que está prohibido por la ley. (14) Pablo estaba a punto de decir algo, pero el gobernador Galión dijo a los judíos: —Yo no tengo por qué tratar estos asuntos con ustedes, porque no se trata de ningún crimen. (15) Este es un asunto de palabras, de nombres y de la ley de ustedes, así que arréglenlo ustedes. Yo, en estas cuestiones, no me meto. (16) Galión ordenó que sacaran del tribunal a todos. (17) Entonces los judíos agarraron a Sóstenes, el encargado de la sinagoga, y lo golpearon frente al edificio del tribunal. Pero esto a Galión no le importó nada.
1Cor 1:1-3 1Co 1:1-3 Pablo, llamado a ser apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios, y el hermano Sóstenes, (2) a la iglesia de Dios que está en Corinto, a los santificados en Cristo Jesús, llamados a ser santos con todos los que en cualquier lugar invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro: (3) Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.
1Cor 1:1-3 1Co 1:1-3 Pablo, llamado a ser apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios, y el hermano Sóstenes, (2) a la iglesia de Dios que está en Corinto, a los santificados en Cristo Jesús, llamados a ser santos con todos los que en cualquier lugar invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro: (3) Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.
“llamado a ser apóstol” 1Co 15:9-10 Porque yo soy el más pequeño de los apóstoles, que no soy digno de ser llamado apóstol, porque perseguí a la iglesia de Dios. (10) Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; … Rom 1.1;11:13; 1Cor 9:1; 15:9; 2 Cor 1:1; 11:5; Gál 1.1; Efe 1:1; Col 1:1; 1Ti 1.1; 2Ti 1:1
“la iglesia de Dios” Jesucristo aparece, 10 veces en 10 versículos La iglesia es de (POSESION) La iglesia es de (DEPENDENCIA) La iglesia es de (IDENTIDAD) La iglesia es de (FINALIDAD)
“a los santificados en Cristo Jesús”
“invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo”
1Cor 1:1-3 1Co 1:1-3 Pablo, “enviado” de Jesucristo por la voluntad de Dios, y “otros hermanos”, (2) a la iglesia de Dios, “suya, dependiente de El, que se identifica con Él, cuyo fin está en Él” que está en Chamartin, “recordad que sois apartados para Dios “ en Cristo Jesús, llamados a ser “imagen suya” con todos los que en cualquier lugar invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, “lo que no quiere decir que nos pertenezca en exclusividad” (3) Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.