Descargar la presentación
La descarga está en progreso. Por favor, espere
Publicada porMaría Victoria Tebar Fuentes Modificado hace 8 años
1
Cuando me miras, hermano mío; cuando me miras, eres bendición para mí. Y es tu mirada como agua clara, eres torrente, verso de Dios.
2
Cuando te acercas y me das fuerza,
cuando te acercas, eres bendición para mí, y es tu presencia, luz que recuerda el amoroso rostro de Dios.
3
No puedo resistirme a tu abrazo, Señor,
no puedo evitar tu mirada. No puedo evitar que me seduzcas, que me cuestiones, a través de mi hermano
4
No puedo resistirme a tu abrazo, Señor,
no puedo evitar tu mirada. No puedo evitar que me seduzcas, que me cuestiones, a través de mi hermano.
5
Cuando interrogas lo que no ayuda; cuando interrogas, eres bendición para mí. Y en el encuentro, vivo y presiento el compromiso que pide Dios.
6
Cuando consuelas la noche oscura,
cuando consuelas, eres bendición para mí. Y es tu cariño, pan del camino, tienda cercana, toque de Dios.
7
No puedo resistirme a tu abrazo, Señor,
no puedo evitar tu mirada. No puedo evitar que me seduzcas, que me cuestiones, a través de mi hermano.
8
No puedo resistirme a tu abrazo, Señor, no puedo evitar tu mirada.
No puedo evitar que me seduzcas, que me cuestiones, a través de mi hermano.
9
Cuando me dices que mire el mundo,
cuando me dices que no puedo seguir igual, que la injusticia mata y derrumba, entorpeciendo el amor de Dios.
10
No puedo resistirme a tu abrazo, Señor,
no puedo evitar tu mirada. No puedo evitar que me seduzcas, que me cuestiones, a través de mi hermano.
11
No puedo resistirme a tu abrazo, Señor, no puedo evitar tu mirada. No puedo evitar que me seduzcas, que me cuestiones, a través de mi hermano.
12
No puedo resistirme a tu abrazo, Señor Música: Al Haraca
Presentaciones similares
© 2024 SlidePlayer.es Inc.
All rights reserved.