Era ya vieja, y con ella conversé toda la noche. Evocamos nuestros recuerdos y aquel lejano encuentro, cuando allá en mi aldea éramos jóvenes.

Presentación del tema: "Era ya vieja, y con ella conversé toda la noche. Evocamos nuestros recuerdos y aquel lejano encuentro, cuando allá en mi aldea éramos jóvenes."— Transcripción de la presentación:

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3 Era ya vieja, y con ella conversé toda la noche. Evocamos nuestros recuerdos y aquel lejano encuentro, cuando allá en mi aldea éramos jóvenes.

4 Un día en mi jardín vi cómo se marchitaban las flores, cómo en mi hogar languidecía la luz de las antorchas y cómo en mi corazón se aposentaba la calma de lo triste.

5 Y al verme así, cautivo por el dolor, me dijo:

6 -Al principio te gozabas en los prados más hermosos y sus verdes aromas. Tu espíritu volaba hacia lo alto y se desplegaba sobre la belleza de las cosas, mas hoy todo se desvanece como una deidad apagada.

7 Y ahora te quedas solo en la sombra, buscando el valor de lo perdido.

8 Pero no dejes que se mustie tu esperanza, porque más allá de la tierra cuarteada, más allá del camino polvoriento, más allá del desierto y los abrojos y, más allá del cielo hosco y ceñudo vendrán días de oro que ya te pertenecen.

9 Llegará la lluvia primaveral y victoriosa. Llegará el gorjeo jubiloso del pájaro multicolor.

10 Llegarán las flores contemplativas, la abeja prodigiosa, el milagro de la hormiga y el sendero del amor.

11 Llegará la floresta rumorosa, la noche de placidez perfecta, la madrugada tibia y perfumada, la etérea mariposa, la alondra peregrina.

12 Llegará el valle tímido y abrigado, y la leve sonrisa de la mañana.

13 Y llegará, otra vez, la yerba fresca y olorosa, y otra vez llegarán las hojas verdes, mensajes de esperanza y promesas de eternidad.

14 Y cuando eso llegue los cestos de los hombres los cargaremos de ensueños y, tú y yo, tomándonos de las manos derrocharemos la paz de nuestras almas.

15 Al amanecer sentimos hambre y alguien nos sirvió cordero lechal y migas amasadas con miel, y nos escanció vino dulce de Caná de Galilea mezclado con mirra.

16 Después me quedé dormido, al fin, en un campo florido junto a la mies ondulante y arrullado por las alas del amor.

17 Las alas del amor. Texto y composición: Pedro Martínez Borrego. Imagen: Internet. Tema musical: Sei con me - Paúl Potts.

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