¡NO ACTÚES COMO UN ELEFANTE! Tomado de un artículo de Thomas J. Stevens Tomado de un artículo de Thomas J. Stevens.

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2 ¡NO ACTÚES COMO UN ELEFANTE! Tomado de un artículo de Thomas J. Stevens Tomado de un artículo de Thomas J. Stevens

3 Extraño dicho, ¿no crees? Extraño dicho, ¿no crees? Pero presta atención, porque puede marcar una diferencia entre el éxito y el fracaso en tu vida personal y laboral. Pero presta atención, porque puede marcar una diferencia entre el éxito y el fracaso en tu vida personal y laboral. Permíteme explicártelo: En la India los elefantes son utilizados como bestias de carga... ¿Pero qué hacen con ellos cuando no están trabajando? ¿cómo los mantienen quietos?.

4 ¿Cómo funciona ese método? ¿Cómo funciona ese método? Cuando los elefantes son aún pequeños y pesan poco menos de 70 kilos, los atan con una soga muy gruesa y pesada. Todo el día, los elefantitos tratan de quitársela, chillan o braman, tiran de la soga y algunos tratan incluso de morderla. Pero no pueden librarse. Cuando los elefantes son aún pequeños y pesan poco menos de 70 kilos, los atan con una soga muy gruesa y pesada. Todo el día, los elefantitos tratan de quitársela, chillan o braman, tiran de la soga y algunos tratan incluso de morderla. Pero no pueden librarse. Sus dueños idearon un programa: Cuando los elefantes aún son muy pequeños, ellos mismos se ponen límites. Sus dueños idearon un programa: Cuando los elefantes aún son muy pequeños, ellos mismos se ponen límites.

5 A partir de ese momento, los elefantes están convencidos de que no es posible librarse de la cuerda. Finalmente el elefante se rinde y deja de luchar.

6 Aceptan el «hecho» de que la cuerda los limita. Y como los elefantes están convencidos de eso, los dueños los atan con cuerdas muy delgadas, e incluso los elefantes adultos de 3600 kilos ó más nunca intentan romperlas porque «saben» que no pueden escapar. Aceptan el «hecho» de que la cuerda los limita. Y como los elefantes están convencidos de eso, los dueños los atan con cuerdas muy delgadas, e incluso los elefantes adultos de 3600 kilos ó más nunca intentan romperlas porque «saben» que no pueden escapar. Como ves, los límites de los elefantes no son reales; solo existen en su mente.

7 También nosotros tenemos límites fijos... También nosotros tenemos límites fijos... Si de verdad quieres tener éxito y no te engañas a ti mismo, puedes cambiar opiniones que ya tienes, y también tus actitudes, y acabar con tus límites internos. …que existen solo en nuestra mente. Pero esa situación se puede cambiar. Una forma de pensar negativa no tiene por qué limitarnos para siempre. …que existen solo en nuestra mente. Pero esa situación se puede cambiar. Una forma de pensar negativa no tiene por qué limitarnos para siempre.

8 Tal vez te parezca que ciertas características son parte de tu personalidad, que no puedes cambiar, que eres así, que es la manera en que Dios te creó. Aunque es verdad que tienes ciertos rasgos innatos, determinados talentos y debilidades, esto no significa que no puedas cambiar. ¿Cómo puede ser eso?. ¿Cómo puedes cambiar lo que te parece que es una costumbre de larga data, una característica muy arraigada?. ¿Cómo convertirla en algo diferente?. Tal vez te parezca que ciertas características son parte de tu personalidad, que no puedes cambiar, que eres así, que es la manera en que Dios te creó. Aunque es verdad que tienes ciertos rasgos innatos, determinados talentos y debilidades, esto no significa que no puedas cambiar. ¿Cómo puede ser eso?. ¿Cómo puedes cambiar lo que te parece que es una costumbre de larga data, una característica muy arraigada?. ¿Cómo convertirla en algo diferente?. Con Dios, ¡todo es posible! Solo se requiere un deseo sincero de recibir Su ayuda y determinación para lograr tu meta. Con Dios, ¡todo es posible! Solo se requiere un deseo sincero de recibir Su ayuda y determinación para lograr tu meta.

9 Tienes fortaleza interior, el poder personal para mejorar tu vida. Tienes fortaleza interior, el poder personal para mejorar tu vida. ¡Inténtalo! ¡Inténtalo! ¡Nunca te rindas! Y tampoco actúes como un elefante. ¡Nunca te rindas! Y tampoco actúes como un elefante.