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4 LOS RITMOS DE LA VIDA

5 Eclesiastés 3:1 Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Los ritmos de la vida

6 En el principio creó Dios los cielos y la tierra.
Génesis 1:1 En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Los ritmos de la vida

7 En el principio creó Dios los cielos y la tierra.
Génesis 1:1 En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Los ritmos de la vida

8 En el principio creó Dios los cielos y la tierra.
Génesis 1:1 En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

9 En el principio creó Dios los cielos y la tierra.
Génesis 1:1 En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

10 En el principio creó Dios los cielos y la tierra.
Génesis 1:1 En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

11 Génesis 1:3-5 Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas. Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un día. Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

12 Génesis 1:3-5 Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas. Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un día. Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

13 Génesis 1:3-5 Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas. Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un día. Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

14 Génesis 1:3-5 Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas. Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un día. Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

15 Génesis 1:3-5 Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas. Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un día. 1 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

16 Génesis 1:6-8 Luego dijo Dios: Haya expansión en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas. E hizo Dios la expansión, y separó las aguas que estaban debajo de la expansión, de las aguas que estaban sobre la expansión. Y fue así. llamó Dios a la expansión Cielos. Y fue la tarde y la mañana el día segundo.  1 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

17 Génesis 1:6-8 Luego dijo Dios: Haya expansión en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas. E hizo Dios la expansión, y separó las aguas que estaban debajo de la expansión, de las aguas que estaban sobre la expansión. Y fue así. llamó Dios a la expansión Cielos. Y fue la tarde y la mañana el día segundo.  1 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

18 Génesis 1:6-8 Luego dijo Dios: Haya expansión en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas. E hizo Dios la expansión, y separó las aguas que estaban debajo de la expansión, de las aguas que estaban sobre la expansión. Y fue así. llamó Dios a la expansión Cielos. Y fue la tarde y la mañana el día segundo.  1 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

19 Génesis 1:6-8 Luego dijo Dios: Haya expansión en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas. E hizo Dios la expansión, y separó las aguas que estaban debajo de la expansión, de las aguas que estaban sobre la expansión. Y fue así. llamó Dios a la expansión Cielos. Y fue la tarde y la mañana el día segundo.  1 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

20 Génesis 1:6-8 Luego dijo Dios: Haya expansión en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas. E hizo Dios la expansión, y separó las aguas que estaban debajo de la expansión, de las aguas que estaban sobre la expansión. Y fue así. llamó Dios a la expansión Cielos. Y fue la tarde y la mañana el día segundo.  1 2 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

21 Génesis 1:9-11,13 Dijo también Dios: Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase lo seco. Y fue así. Y llamó Dios a lo seco Tierra, y a la reunión de las aguas llamó Mares. Y vio Dios que era bueno. Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su género, que su semilla esté en él, sobre la tierra. Y fue así. …Y fue la tarde y la mañana el día tercero.  1 2 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

22 Génesis 1:9-11,13 Dijo también Dios: Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase lo seco. Y fue así. Y llamó Dios a lo seco Tierra, y a la reunión de las aguas llamó Mares. Y vio Dios que era bueno. Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su género, que su semilla esté en él, sobre la tierra. Y fue así. …Y fue la tarde y la mañana el día tercero.  1 2 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

23 Génesis 1:9-11,13 Dijo también Dios: Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase lo seco. Y fue así. Y llamó Dios a lo seco Tierra, y a la reunión de las aguas llamó Mares. Y vio Dios que era bueno. Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su género, que su semilla esté en él, sobre la tierra. Y fue así. …Y fue la tarde y la mañana el día tercero.  1 2 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

24 Génesis 1:9-11,13 Dijo también Dios: Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase lo seco. Y fue así. Y llamó Dios a lo seco Tierra, y a la reunión de las aguas llamó Mares. Y vio Dios que era bueno. Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su género, que su semilla esté en él, sobre la tierra. Y fue así. …Y fue la tarde y la mañana el día tercero.  1 2 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

25 Génesis 1:9-11,13 Dijo también Dios: Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase lo seco. Y fue así. Y llamó Dios a lo seco Tierra, y a la reunión de las aguas llamó Mares. Y vio Dios que era bueno. Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su género, que su semilla esté en él, sobre la tierra. Y fue así. …Y fue la tarde y la mañana el día tercero.  1 2 3 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

26 Génesis 1:14-16, 19 Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años, y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así. E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas. …19 Y fue la tarde y la mañana el día cuarto. 1 2 3 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

27 Génesis 1:14-16, 19 Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años, y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así. E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas. …19 Y fue la tarde y la mañana el día cuarto. 1 2 3 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

28 Génesis 1:14-16, 19 Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años, y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así. E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas. …19 Y fue la tarde y la mañana el día cuarto. 1 2 3 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

29 Génesis 1:14-16, 19 Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años, y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así. E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas. …19 Y fue la tarde y la mañana el día cuarto. 1 2 3 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

30 Génesis 1:14-16, 19 Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años, y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así. E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas. …19 Y fue la tarde y la mañana el día cuarto. 1 2 3 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

31 Génesis 1:14-16, 19 Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años, y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así. E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas. …19 Y fue la tarde y la mañana el día cuarto. 1 2 3 4 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

32 Génesis 1:20-23 Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra, en la abierta expansión de los cielos. Y creó Dios los grandes monstruos marinos, y todo ser viviente que se mueve, que las aguas produjeron según su género, y toda ave alada según su especie. Y vio Dios que era bueno. Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos, y llenad las aguas en los mares, y multiplíquense las aves en la tierra. Y fue la tarde y la mañana el día quinto. 1 2 3 4 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

33 Génesis 1:20-23 Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra, en la abierta expansión de los cielos. Y creó Dios los grandes monstruos marinos, y todo ser viviente que se mueve, que las aguas produjeron según su género, y toda ave alada según su especie. Y vio Dios que era bueno. Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos, y llenad las aguas en los mares, y multiplíquense las aves en la tierra. Y fue la tarde y la mañana el día quinto. 1 2 3 4 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

34 Génesis 1:20-23 Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra, en la abierta expansión de los cielos. Y creó Dios los grandes monstruos marinos, y todo ser viviente que se mueve, que las aguas produjeron según su género, y toda ave alada según su especie. Y vio Dios que era bueno. Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos, y llenad las aguas en los mares, y multiplíquense las aves en la tierra. Y fue la tarde y la mañana el día quinto. 1 2 3 4 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

35 Génesis 1:20-23 Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra, en la abierta expansión de los cielos. Y creó Dios los grandes monstruos marinos, y todo ser viviente que se mueve, que las aguas produjeron según su género, y toda ave alada según su especie. Y vio Dios que era bueno. Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos, y llenad las aguas en los mares, y multiplíquense las aves en la tierra. Y fue la tarde y la mañana el día quinto. 1 2 3 4 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

36 Génesis 1:20-23 Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra, en la abierta expansión de los cielos. Y creó Dios los grandes monstruos marinos, y todo ser viviente que se mueve, que las aguas produjeron según su género, y toda ave alada según su especie. Y vio Dios que era bueno. Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos, y llenad las aguas en los mares, y multiplíquense las aves en la tierra. Y fue la tarde y la mañana el día quinto. 1 2 3 4 5 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

37 Génesis 1:24-31 24 Luego dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie. Y fue así. … 26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. 27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1 2 3 4 5 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

38 Génesis 1:24-31 24 Luego dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie. Y fue así. … 26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. 27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1 2 3 4 5 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

39 Génesis 1:24-31 24 Luego dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie. Y fue así. … 26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. 27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1 2 3 4 5 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

40 Génesis 1:24-31 24 Luego dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie. Y fue así. … 26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. 27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1 2 3 4 5 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

41 Génesis 1:24-31 24 Luego dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie. Y fue así. … 26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. 27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1 2 3 4 5 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

42 1 2 3 6 4 5 Génesis 1:24-31 Génesis 1:2 DIOS DIO FORMA DIOS LLENÓ
24 Luego dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie. Y fue así. … 26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. 27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó Y fue la tarde y la mañana el día sexto. DIOS DIO FORMA 1 2 3 DIOS LLENÓ 6 4 5 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

43 Génesis 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto. DIOS DIO FORMA 1 2 3 DIOS LLENÓ 6 4 5 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

44 Génesis 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto. DIOS DIO FORMA 1 2 3 DIOS LLENÓ 6 4 5 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

45 Pero hágase todo decentemente y con orden.
Génesis 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1Corintios 14:40 Pero hágase todo decentemente y con orden. DIOS DIO FORMA 1 2 3 DIOS LLENÓ 6 4 5 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

46 Pero hágase todo decentemente y con orden.
Génesis 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1Corintios 14:40 Pero hágase todo decentemente y con orden. DIOS DIO FORMA 1 2 3 DIOS LLENÓ 6 4 5 Los ritmos de la vida Génesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

47 Pero hágase todo decentemente y con orden.
Génesis 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1Corintios 14:40 Pero hágase todo decentemente y con orden. DIOS DIO FORMA 1 2 3 DIOS LLENÓ 6 4 5 Los ritmos de la vida “…el orden es la primera ley del cielo” (TI 6:204).

48 Pero hágase todo decentemente y con orden.
Génesis 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1Corintios 14:40 Pero hágase todo decentemente y con orden. DIOS DIO FORMA 1 2 3 DIOS LLENÓ 6 4 5 Génesis 2:1-3 Los ritmos de la vida Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo el ejército de ellos. Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo. Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación.

49 Pero hágase todo decentemente y con orden.
Génesis 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1Corintios 14:40 Pero hágase todo decentemente y con orden. DIOS DIO FORMA 1 2 3 DIOS LLENÓ 6 4 5 Génesis 2:1-3 Los ritmos de la vida Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo el ejército de ellos. Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo. Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación.

50 Pero hágase todo decentemente y con orden.
Génesis 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1Corintios 14:40 Pero hágase todo decentemente y con orden. DIOS DIO FORMA 1 2 3 DIOS LLENÓ 6 4 5 Génesis 2:1-3 Los ritmos de la vida Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo el ejército de ellos. Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo. Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación.

51 Pero hágase todo decentemente y con orden.
Génesis 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1Corintios 14:40 Pero hágase todo decentemente y con orden. DIOS DIO FORMA 1 2 3 DIOS LLENÓ 6 4 5 Génesis 2:1-3 Los ritmos de la vida Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo el ejército de ellos. Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo. Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación.

52 El mundo tiene un ritmo natural
Génesis 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto. 1Corintios 14:40 Pero hágase todo decentemente y con orden. DIOS DIO FORMA DIOS DESCANSÓ 1 2 3 DIOS LLENÓ 6 4 5 7 El mundo tiene un ritmo natural Génesis 2:1-3 Los ritmos de la vida Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo el ejército de ellos. Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo. Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación.

53 El mundo tiene un ritmo natural
Eclesiastés 3:2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado. El concepto de ritmo circadiano se utiliza en el ámbito de la biología para nombrar a las oscilaciones de ciertas variables de tipo de biológico en un intervalo temporal regular. Este ritmo también se conoce como ritmo biológico El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

54 El mundo tiene un ritmo natural
Eclesiastés 3:2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado. Nacer El concepto de ritmo circadiano se utiliza en el ámbito de la biología para nombrar a las oscilaciones de ciertas variables de tipo de biológico en un intervalo temporal regular. Este ritmo también se conoce como ritmo biológico El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

55 El mundo tiene un ritmo natural
Eclesiastés 3:2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado. Nacer Morir El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Jueces 13:24 Y la mujer dio a luz un hijo, y le puso por nombre Sansón. Y el niño creció, y Jehová lo bendijo.

56 El mundo tiene un ritmo natural
Eclesiastés 3:2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado. Nacer Morir El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Jueces 13:24 Y la mujer dio a luz un hijo, y le puso por nombre Sansón. Y el niño creció, y Jehová lo bendijo.

57 El mundo tiene un ritmo natural
Eclesiastés 3:2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado. Salmo 71:5 Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza, seguridad mía desde mi juventud. Nacer Niñez Morir El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Jueces 13:24 Y la mujer dio a luz un hijo, y le puso por nombre Sansón. Y el niño creció, y Jehová lo bendijo.

58 El mundo tiene un ritmo natural
Eclesiastés 3:2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado. Salmo 71:5 Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza, seguridad mía desde mi juventud. Nacer Niñez Morir El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Jueces 13:24 Y la mujer dio a luz un hijo, y le puso por nombre Sansón. Y el niño creció, y Jehová lo bendijo.

59 El mundo tiene un ritmo natural
Eclesiastés 3:2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado. Salmo 71:5 Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza, seguridad mía desde mi juventud. Nacer Niñez Morir El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Jueces 13:24 Y la mujer dio a luz un hijo, y le puso por nombre Sansón. Y el niño creció, y Jehová lo bendijo.

60 El mundo tiene un ritmo natural
Eclesiastés 3:2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado. Salmo 71:5 Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza, seguridad mía desde mi juventud. Nacer Niñez Morir Juventud Génesis 15:15 El mundo tiene un ritmo natural Y tú vendrás a tus padres en paz, y serás sepultado en buena vejez. Los ritmos de la vida Jueces 13:24 Y la mujer dio a luz un hijo, y le puso por nombre Sansón. Y el niño creció, y Jehová lo bendijo.

61 El mundo tiene un ritmo natural
Eclesiastés 3:2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado. Salmo 71:5 Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza, seguridad mía desde mi juventud. Nacer Niñez Morir Juventud Génesis 15:15 El mundo tiene un ritmo natural Y tú vendrás a tus padres en paz, y serás sepultado en buena vejez. Los ritmos de la vida Jueces 13:24 Y la mujer dio a luz un hijo, y le puso por nombre Sansón. Y el niño creció, y Jehová lo bendijo.

62 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Eclesiastés 3:2 Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado. Salmo 71:5 Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza, seguridad mía desde mi juventud. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural Génesis 15:15 El mundo tiene un ritmo natural Y tú vendrás a tus padres en paz, y serás sepultado en buena vejez. Los ritmos de la vida Jueces 13:24 Y la mujer dio a luz un hijo, y le puso por nombre Sansón. Y el niño creció, y Jehová lo bendijo.

63 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Lucas 2:40 Y el niño crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

64 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Lucas 2:40 Y el niño crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

65 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Lucas 2:40 Y el niño crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

66 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Lucas 2:40 Y el niño crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

67 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Lucas 2:40 Y el niño crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él. Proverbios 20:29 La gloria de los jóvenes es su fuerza, y la hermosura de los ancianos es su vejez. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

68 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Lucas 2:40 Y el niño crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él. Proverbios 20:29 La gloria de los jóvenes es su fuerza, y la hermosura de los ancianos es su vejez. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

69 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Lucas 2:40 Y el niño crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él. Proverbios 20:29 La gloria de los jóvenes es su fuerza, y la hermosura de los ancianos es su vejez. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

70 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Lucas 2:40 Y el niño crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él. Proverbios 20:29 La gloria de los jóvenes es su fuerza, y la hermosura de los ancianos es su vejez. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

71 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Lucas 2:40 Y el niño crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él. Proverbios 20:29 La gloria de los jóvenes es su fuerza, y la hermosura de los ancianos es su vejez. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

72 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Job 1:1 Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

73 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Job 1:1 Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

74 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Job 1:1 Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

75 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Job 1:1 Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Job 1:13-16 Y un día aconteció que sus hijos e hijas comían y bebían vino en casa de su hermano el primogénito, y vino un mensajero a Job, y le dijo: Estaban arando los bueyes, y las asnas paciendo cerca de ellos, y acometieron los sabeos y los tomaron, y mataron a los criados a filo de espada; solamente escapé yo para darte la noticia. Nacer Niñez Vejez Morir Juventud El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

76 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Job 1:1 Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Job 1:13-15 Y un día aconteció que sus hijos e hijas comían y bebían vino en casa de su hermano el primogénito, y vino un mensajero a Job, y le dijo: Estaban arando los bueyes, y las asnas paciendo cerca de ellos, y acometieron los sabeos y los tomaron, y mataron a los criados a filo de espada; solamente escapé yo para darte la noticia. El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

77 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Job 1:1 Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Job 1:13-15 Y un día aconteció que sus hijos e hijas comían y bebían vino en casa de su hermano el primogénito, y vino un mensajero a Job, y le dijo: Estaban arando los bueyes, y las asnas paciendo cerca de ellos, y acometieron los sabeos y los tomaron, y mataron a los criados a filo de espada; solamente escapé yo para darte la noticia. El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

78 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Job 1:1 Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Job 1:13-15 Y un día aconteció que sus hijos e hijas comían y bebían vino en casa de su hermano el primogénito, y vino un mensajero a Job, y le dijo: Estaban arando los bueyes, y las asnas paciendo cerca de ellos, y acometieron los sabeos y los tomaron, y mataron a los criados a filo de espada; solamente escapé yo para darte la noticia. Génesis 41:40, 41 Tú estarás sobre mi casa, y por tu palabra se gobernará todo mi pueblo; solamente en el trono seré yo mayor que tú. Dijo además Faraón a José: He aquí yo te he puesto sobre toda la tierra de Egipto. El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

79 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Job 1:1 Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Job 1:13-15 Y un día aconteció que sus hijos e hijas comían y bebían vino en casa de su hermano el primogénito, y vino un mensajero a Job, y le dijo: Estaban arando los bueyes, y las asnas paciendo cerca de ellos, y acometieron los sabeos y los tomaron, y mataron a los criados a filo de espada; solamente escapé yo para darte la noticia. Génesis 41:40, 41 Tú estarás sobre mi casa, y por tu palabra se gobernará todo mi pueblo; solamente en el trono seré yo mayor que tú. Dijo además Faraón a José: He aquí yo te he puesto sobre toda la tierra de Egipto. El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

80 El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural
Job 1:1 Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Job 1:13-15 Y un día aconteció que sus hijos e hijas comían y bebían vino en casa de su hermano el primogénito, y vino un mensajero a Job, y le dijo: Estaban arando los bueyes, y las asnas paciendo cerca de ellos, y acometieron los sabeos y los tomaron, y mataron a los criados a filo de espada; solamente escapé yo para darte la noticia. Génesis 41:40, 41 Tú estarás sobre mi casa, y por tu palabra se gobernará todo mi pueblo; solamente en el trono seré yo mayor que tú. Dijo además Faraón a José: He aquí yo te he puesto sobre toda la tierra de Egipto. El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

81 Job 1:1 Job 1:13-15 Salmo 90:12 Génesis 41:40, 41
Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Job 1:13-15 Y un día aconteció que sus hijos e hijas comían y bebían vino en casa de su hermano el primogénito, y vino un mensajero a Job, y le dijo: Estaban arando los bueyes, y las asnas paciendo cerca de ellos, y acometieron los sabeos y los tomaron, y mataron a los criados a filo de espada; solamente escapé yo para darte la noticia. Génesis 41:40, 41 Tú estarás sobre mi casa, y por tu palabra se gobernará todo mi pueblo; solamente en el trono seré yo mayor que tú. Dijo además Faraón a José: He aquí yo te he puesto sobre toda la tierra de Egipto. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Salmo 90:12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.

82 Gálatas 1:13, 14 Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

83 Gálatas 1:13, 14 Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

84 Gálatas 1:13, 14 Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

85 Gálatas 1:13, 14 Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. Hechos 9:1, 2 Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

86 Gálatas 1:13, 14 Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. Hechos 9:1, 2 Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

87 Gálatas 1:13, 14 Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. Hechos 9:1, 2 Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

88 Gálatas 1:13, 14 Hechos 9:1, 2 Hechos 9:3-5
Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. Hechos 9:1, 2 Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Hechos 9:3-5 Los ritmos de la vida Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

89 Gálatas 1:13, 14 Hechos 9:1, 2 Hechos 9:3-5
Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. Hechos 9:1, 2 Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Hechos 9:3-5 Los ritmos de la vida Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

90 Gálatas 1:13, 14 Hechos 9:1, 2 Hechos 9:3-5
Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. Hechos 9:1, 2 Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Hechos 9:3-5 Los ritmos de la vida Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

91 Gálatas 1:13, 14 Hechos 9:1, 2 Hechos 9:3-5
Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. Hechos 9:1, 2 Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Hechos 9:3-5 Los ritmos de la vida Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

92 Gálatas 1:13, 14 Hechos 9:1, 2 Hechos 9:3-5
Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. Hechos 9:1, 2 Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Hechos 9:3-5 Los ritmos de la vida Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

93 Hechos 9:6 Hechos 9:1, 2 Hechos 9:3-5
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Hechos 9:1, 2 Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Hechos 9:3-5 Los ritmos de la vida Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

94 Hechos 9:6 Hechos 9:1, 2 Hechos 9:3-5
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Hechos 9:1, 2 Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Hechos 9:3-5 Los ritmos de la vida Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

95 Hechos 9:6 Hechos 9:1, 2 Hechos 9:3-5
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Hechos 9:1, 2 Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Hechos 9:3-5 Los ritmos de la vida Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

96 Hechos 9:6 Romanos 8:1 Hechos 9:3-5
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Hechos 9:3-5 Los ritmos de la vida Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

97 Hechos 9:6 Romanos 8:1 Hechos 9:3-5
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Hechos 9:3-5 Los ritmos de la vida Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

98 Hechos 9:6 Romanos 8:1 Hechos 9:3-5
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Hechos 9:3-5 Los ritmos de la vida Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

99 Hechos 9:6 Romanos 8:1 Hechos 9:3-5
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Hechos 9:3-5 Los ritmos de la vida Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.

100 Hechos 9:6 Romanos 8:1 Filipenses 1:6
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Filipenses 1:6 Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

101 Hechos 9:6 Romanos 8:1 Filipenses 1:6
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Filipenses 1:6 Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

102 Hechos 9:6 Romanos 8:1 Filipenses 1:6
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Filipenses 1:6 Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida

103 Hechos 9:6 Romanos 8:1 Filipenses 1:6
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Filipenses 1:6 Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

104 Hechos 9:6 Romanos 8:1 Filipenses 1:6
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Filipenses 1:6 Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

105 Hechos 9:6 Romanos 8:1 Filipenses 1:6
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Filipenses 1:6 Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

106 Hechos 9:6 Romanos 8:1 Filipenses 1:6
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Filipenses 1:6 Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

107 Hechos 9:6 Romanos 8:1 Filipenses 1:6
El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Debemos tener una relación intima con Cristo Filipenses 1:6 Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

108 Romanos 15:7 Romanos 8:1 Filipenses 1:6
Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Debemos tener una relación intima con Cristo Filipenses 1:6 Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

109 Romanos 15:7 Romanos 8:1 Filipenses 1:6
Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Debemos tener una relación intima con Cristo Filipenses 1:6 Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

110 Romanos 15:7 Romanos 8:1 Filipenses 1:6
Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Debemos tener una relación intima con Cristo Filipenses 1:6 Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

111 Romanos 15:7 Romanos 8:1 Filipenses 1:6
Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios. Romanos 8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Debemos tener una relación intima con Cristo Filipenses 1:6 Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

112 Romanos 15:7 Efesios 4:2 Gálatas 2:20
Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios. Efesios 4:2 Con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor. Debemos tener una relación intima con Cristo Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

113 Romanos 15:7 Efesios 4:2 Gálatas 2:20
Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios. Efesios 4:2 Con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor. Debemos tener una relación intima con Cristo Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

114 Romanos 15:7 Efesios 4:2 Gálatas 2:20
Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios. Efesios 4:2 Con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor. Debemos tener una relación intima con Cristo Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

115 Romanos 15:7 Efesios 4:2 1Tes 3:12
Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios. Efesios 4:2 Con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor. 1Tes 3:12 Debemos tener una relación intima con Cristo Y el Señor os haga crecer y abundar en amor unos para con otros y para con todos, como también lo hacemos nosotros para con vosotros. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

116 Romanos 15:7 Efesios 4:2 1Tes 3:12
Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios. Efesios 4:2 Con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor. 1Tes 3:12 Debemos tener una relación intima con Cristo Y el Señor os haga crecer y abundar en amor unos para con otros y para con todos, como también lo hacemos nosotros para con vosotros. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

117 Romanos 15:7 Efesios 4:2 1Tes 3:12
Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios. Efesios 4:2 Con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor. 1Tes 3:12 Debemos tener una relación intima con Cristo Y el Señor os haga crecer y abundar en amor unos para con otros y para con todos, como también lo hacemos nosotros para con vosotros. Debemos cambiar para vida eterna Hay cambios inesperados El hombre tiene un ritmo natural El mundo tiene un ritmo natural Los ritmos de la vida Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.