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TAMBIÉN ESTARÁ MI SERVIDOR

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Presentación del tema: "TAMBIÉN ESTARÁ MI SERVIDOR"— Transcripción de la presentación:

1 TAMBIÉN ESTARÁ MI SERVIDOR
DONDE YO ESTÉ TAMBIÉN ESTARÁ MI SERVIDOR Lectio divina Domingo V Cuaresma Ciclo B. 18 Marzo Secretariado Catequesis de Cádiz y Ceuta Música: Harvest. E. Morricone Elaboración: Manuel López/Eloísa Díaz-Jara Montaje: Eloísa Díaz-Jara Avance Manual

2 ORACIÓN INICIAL Bendito seas, Padre, porque, llegada su hora,
Cristo fue el grano de trigo que, al morir, da fruto abundante. Créanos, Señor, un corazón nuevo para una alianza nueva, y renuévanos por dentro con la fuerza de tu Espíritu, para que, convertidos en hijos de la luz, en hijos tuyos, vivamos tu ley de amor con un talante alegre y renovado. Así podrán los demás ver el rostro de Cristo reflejado en nosotros, y glorificar por siempre tu nombre de Padre. Amén

3 TEXTO BÍBLICO Jn Entre los que habían venido a celebrar la fiesta había algunos griegos; estos, acercándose a Felipe, el de Betsaida de Galilea, le rogaban: «Señor, queremos ver a Jesús». Felipe fue a decírselo a Andrés; y Andrés y Felipe fueron a decírselo a Jesús. Jesús les contestó: «Ha llegado la hora de que sea glorificado el Hijo del hombre. En verdad, en verdad os digo: si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda infecundo; pero si muere, da mucho fruto. El que se ama a sí mismo, se pierde, y el que se aborrece a sí mismo en este mundo, se guardará para la vida eterna. El que quiera servirme, que me siga, y donde esté yo, allí también estará mi servidor; a quien me sirva, el Padre lo honrará. Ahora mi alma está agitada, y ¿qué diré? ¿Padre, líbrame de esta hora? Pero si por esto he venido, para esta hora: Padre, glorifica tu nombre».

4 Entonces vino una voz del cielo: «Lo he glorificado y volveré a glorificarlo». La gente que estaba allí y lo oyó, decía que había sido un trueno; otros decían que le había hablado un ángel. Jesús tomó la palabra y dijo: «Esta voz no ha venido por mí, sino por vosotros. Ahora va a ser juzgado el mundo; ahora el príncipe de este mundo va a ser echado fuera. Y cuando yo sea elevado sobre la tierra, atraeré a todos hacia mí». Esto lo decía dando a entender la muerte de que iba a morir.

5 LECTURA ¿Qué dice el Texto?

6 Estamos casi al final de la vida pública de Jesús y el evangelio, hoy, nos presenta a unos peregrinos que vienen a celebrar la Pascua, y le hacen una petición a Felipe: «Queremos ver a Jesús».

7 Podemos aplicarnos a nosotros esta petición, nos acercamos a la Iglesia pidiendo ver a Jesús. Y ellos, al igual que nosotros, no lo hacen por curiosidad sino por que han descubierto en Él algo importante, algo que nos ayuda a vivir nuestra vida de forma totalmente diferente a como lo hacemos.

8 «Llega la hora de que sea glorificado el Hijo del Hombre»
«Llega la hora de que sea glorificado el Hijo del Hombre». Jesús sabe que ha llegado su hora, que morirá, pero también tiene la certeza que todos veremos su glorificación en la Resurrección. Ellos no lo entenderían, pero y nosotros, ¿lo entendemos?

9 Si leemos con detenimiento el evangelio, si nos paramos en cada palabra, en cada gesto, en cada signo, que hace Jesús estamos descubriendo el amor más sublime, el más altruista: Dios a través de su Hijo, nos lo hace saber. Dios es Amor.

10 Con la metáfora del grano de trigo del evangelio de hoy, nos está diciendo Jesús que cuando el grano muere, crece, brota de nuevo la vida, pero si el grano se queda en su envoltura no dará vida. Jesús lo repite en varias ocasiones, si nos agarramos a nuestra vida, a nuestras ideas, de forma egoísta, ésta no tendrá sentido, pero si sabemos compartirla con amor y generosidad si lo tendrá.

11 Esa manera de vivir  es seguir a Jesús y entender que, a través de la fe, Dios nos ama.
Vivimos en estos momentos una crisis, no sólo económica, sino también de valores, pero caigamos en la cuenta que también hay muchas personas que tienen una actitud abierta, generosa, que comparten su vida, que intentan cada día hacer la vida de los demás más justa y humana, personas e instituciones que extienden sus manos para acoger al más deprimido, al más marginado.

12 «Yo deseo ver a Jesús», así siente el corazón de esta gente.
«Queremos ver a Jesús»: estas palabras, al igual que muchas otras en los Evangelios, van más allá del episodio particular y expresan algo universal; revelan un deseo que atraviesa épocas y culturas, un deseo presente en el corazón de muchas personas que han oído hablar de Cristo, pero no lo han encontrado aún. «Yo deseo ver a Jesús», así siente el corazón de esta gente.

13 «levantado» en cuanto crucificado, y «levantado» porque fue exaltado por el Padre en la Resurrección, para atraer a todos hacia sí y reconciliar a los hombres con Dios y entre ellos. La hora de la Cruz es la fuente de salvación para todos los que creen en Él. «Ha llegado la hora de que sea glorificado el Hijo del hombre». ¡Es la hora de la Cruz! Es la hora del triunfo definitivo del amor misericordioso de Dios. Cristo será «levantado sobre la tierra»:

14 Jesús usa una imagen sencilla y sugestiva, la del «grano de trigo» que, al caer en la tierra, muere para dar fruto… La cruz de Cristo es fecunda. La muerte de Jesús, de hecho, es una fuente inagotable de vida nueva, porque lleva en sí la fuerza regeneradora del amor de Dios. Inmersos en este amor por el Bautismo, los cristianos pueden convertirse en «granos de trigo» y dar mucho fruto si, al igual que Jesús, «pierden la propia vida» por amor a Dios y a los hermanos.

15 A aquellos que también hoy «quieren ver a Jesús», a los que están en búsqueda del rostro de Dios; a quien recibió una catequesis cuando era pequeño y luego no la profundizó más y quizá ha perdido la fe; a muchos que aún no han encontrado a Jesús personalmente...; a todas estas personas podemos ofrecerles tres cosas: el Evangelio; el Crucifijo y el testimonio de nuestra fe, pobre pero sincera.

16 El Evangelio: ahí podemos encontrar a Jesús, escucharlo, conocerlo
El Evangelio: ahí podemos encontrar a Jesús, escucharlo, conocerlo. El Crucifijo: signo del amor de Jesús que se entregó por nosotros. Y luego, una fe que se traduce en gestos sencillos de caridad fraterna.

17 Evangelio, Crucifijo y testimonio.
Pero principalmente en la coherencia de vida: entre lo que decimos y lo que vivimos, coherencia entre nuestra fe y nuestra vida, entre nuestras palabras y nuestras acciones. Evangelio, Crucifijo y testimonio.

18 ¿Qué respondo al Señor que me habla en el Texto?
oración ¿Qué respondo al Señor que me habla en el Texto?

19 …ha llegado la hora…. es el momento…, todo fue preparación,
Señor Jesús …ha llegado la hora…. es el momento…, todo fue preparación, ahora debes amar hasta el final, hasta derramar tu sangre, hasta dar la vida, es la hora, es tu hora.

20 Es el momento del anonadamiento, del sufrimiento, de la pasión,
de la crucifixión, de la muerte, y así vas al encuentro de tu cruz, no te llevan, ni te quitan la vida, sino que vas a su encuentro, la aceptas, la asumes, le das sentido de redención.

21 Tú también nos invitas a seguir tus pasos, tu misma suerte.
Tú nos invitas a estar contigo, a darle un sentido nuevo a la vida, a que perdiéndola la conservemos para la vida eterna.

22 Danos Señor danos la gracia de actuar como Tú,
de amar y servir como Tú, sabiendo morir para vivir plenamente en ti, por ti y para ti. Que así sea.

23 ¿Cómo reflejo en mi vida lo que me dice Dios en el Texto?
contemplación ¿Cómo reflejo en mi vida lo que me dice Dios en el Texto?

24 “Ha llegado la hora de que sea glorificado el Hijo del hombre” Es la hora del Maestro, de la fama, del éxito, de la popularidad, de la gloria y del triunfo … : La hora del “grano de trigo”; del amor …, del que se pierde …, del que se aborrece …, del que entrega la vida …, del que sirve … La hora de la cosecha, de la sementera, de la fecundidad, de la ocultación, de la sepultura … La hora de la glorificación es la hora de la luminosidad del amor en la Cruz. Interiorizamos el siguiente texto para luego responder al Señor y confrontarlo con nuestra vida.

25 Jesús es un modelo de amor en ese abrazo fuerte con que se une a la naturaleza humana en la cruz. Sabe que todo lo negativo en el mundo, toda traición, toda violencia, todo poder ceden frente a la fuerza del amor. Sobre la cruz no reivindica otra gloria más que la gloria del amor. Es la hora de la máxima revelación, la hora que permite “ver” lo nunca visto: la gloria del amor crucificado. Sólo el amor es digno de ser creído.

26 ¿Qué hora estamos viviendo, tú, yo, nosotros como Iglesia?
Luego de un tiempo de contemplación e interiorización personal, podemos preguntarnos y respondernos cómo se refleja en nuestra propia realidad y situación personal. ¿Qué hora estamos viviendo, tú, yo, nosotros como Iglesia? ¿Qué me exige a mí y en relación a los demás? ¿Tengo conciencia de la fructífera que puede ser mi vida? ¿La entrego, cómo, a quién, en que servicios concretos?

27 acción ¿A que me omprometo?

28 “si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda infecundo; pero si muere, da mucho fruto”. Vive esta realidad pasando por la muerte a tus gustos, preferencias, reivindicar la razón ante tu familia y amigos,…. y deja que el “grano” del amor crezca y dé vida. Plantéate si estás dispuesto a “morir” a tus gustos y preferencias para poder servir a otros.

29 “El que quiera servirme, que me siga, y donde esté yo, allí también estará mi servidor” Busca la manera de servirá a los demás, no desde una simple ONG, sino desde Jesús. Allí estará también Jesús.

30 Prepárate para acompañar a Jesús en su Pasión y en su Resurrección por medio de la Eucaristía.

31 Dedica algún momento de tu oración para agradecer a Dios el que te haya salvado con su muerte y resurrección.

32 En tu realidad de cada día, ve a Jesús en el rostro de los más pobres, ve a Jesús en medio del arduo trabajo de cada día, ve a Jesús en…

33 Se tú como Felipe y Andrés y ponlos en comunicación con Jesús.
Queremos ver a Jesús… Ayuda a la gente que te rodea para que ellos también quieran ver a Jesús. Sé puente entre ellos y Jesús. Se tú como Felipe y Andrés y ponlos en comunicación con Jesús.

34 Si el grano de trigo… muere, da mucho fruto.
¿Qué tiene que morir en ti para que se manifieste la Vida de Jesús? FIN


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