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Publicada porMonica Río Casado Modificado hace 7 años
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La Historia de una Cura Naamán era capitán en el ejército de Siria, pero tenía lepra. Buscando una cura, fue con Eliseo a visitar, el profeta israelita.
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La Historia de Naamán (2 Reyes 5:9–14)
Vino Naamán con sus caballos y con su carro, y se paró a la entrada de la casa de Eliseo. Y Eliseo le envió un mensaero, diciendo: Ve y lávate en el Jordán siete veces, y tu carne se te restaurará, y quedarás limpio. Pero Naamán se enojó, y se iba diciendo: He aquí, yo pensé: Seguramente él vendrá a mí, y se detendrá e invocará el nombre del Señor su Dios, moverá su mano sobre la parte enferman y curará la lepra. ¿No son el Abana y el Farfar, ríos de Damasco, mejor que todas las aguas de Israel? ¿No pudiera yo lavarme en ellos y ser limpio? Y dio la vuelta, y se fue enfurecido.
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La Historia de Naamán (2 Reyes 5:9–14)
Pero sus siervos se le acercaron y le hablaron, diciendo: Padre mío, si el profeta te hubiera dicho que hicieras alguna gran cosa, ¿no la hubieras hecho? ¡Cuánto más cuando te dice: Lávate, y quedarás limpio! Entonces él bajó y se sumergió siete veces en el Jordán conforme a la palabra del hombre de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño pequeño, y quedó limpio.
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2 Reyes 5:9 – 14 Naaman quería ser curado de su lepra.
La cura: Sumergirse siete veces en el río Jordán.
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¿Cómo puede salvarme este arroyo barroso?
El Gran Río Jordán ¿Cómo puede salvarme este arroyo barroso?
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2 Reyes 5:9 – 14 Naamán quería ser salvado de su lepra.
La cura: Sumergirse siete veces en el río Jordán. ¿Cómo puede salvarme este arroyo barroso? Naamán no entendió la razón para sumergirse en agua, pero obedeció y recibió el regalo de Dios.
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¿Qué Salvó a Naamán? ¿El río Jordán o Dios?
La obra de sumergirse en agua o el poder de Dios? ¿Ganó Naamán su vida o recibió él un regalo de Dios? Es la inmersión en un rio un precio igual que el valor de la vida?
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Un Regalo Daré a Jorge un regalo de 25 centavos.
El necesita solamente andar aquí y tomar el dinero.
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Salario Mínimo Si él hace algo por una hora en Los Estados Unidos, ganará $5.15. Para ganar 25 centavos, debe hacer algo por casi 3 minutos. Él no requirió 3 minutos de andar aquí y tomar el dinero. Por eso, no ganó el dinero. Era un regalo.
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¿Qué Salvó a Naamán? ¿El río Jordán o Dios?
La obra de sumergirse en agua o el poder de Dios? ¿Ganó Naamán su vida o recibió él un regalo de Dios? Es la inmersión en un rio un precio igual que el valor de la vida?
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¿Qué Salvó a Naamán? Naaman era curado por la gracia de Dios, pero tuvo que obedecer primero.
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¿Qué Salvó a Naamán? Sumergiendose en el Jordán lo salvó – no quitando la suciedad de su carne, sino como una petición a Dios para un cuerpo curado.
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¿Qué nos salva? El bautismo ahora os salva – no quitando la suciedad de la carne, sino como una petición a Dios de una buena conciencia. (1 Pedro 3:21)
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Efesios 2:4 – 5 Dios, que es rico en misericordia, por causa del gran amor con que nos amo, aun cuando estábamos muertos en nuestros delitos, nos dio vida juntamente con Cristo. (Por gracia hebéis sido salvados.)
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¿Somos salvados por agua o por el poder y la gracia de Dios?
Efesios 2:8 – 9 Por gracia habéis sido salvados por medio de la fe, y esto no de vosotros, sino que es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe. ¿Somos salvados por agua o por el poder y la gracia de Dios?
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¿Qué nos salva? El bautismo ahora os salva – no quitando la suciedad de la carne, sino como una petición a Dios de una buena conciencia. (1 Pedro 3:21)
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La fe por sí misma, si no tiene obras, está muerta.
Santiago 2:17 – 20 La fe por sí misma, si no tiene obras, está muerta. Pero alguno dirá: Tú tienes fe y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin las obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras.
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Santiago 2:17 – 20 Tú crees que Dios es uno. Haces bien; también los demonios creen y tiemblan. Pero, ¿estás dispuesto a admitir, oh hombre vano, que la fe sin obras es estéril?
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Marcos 16:16 El que crea y séa bautizado será salvo; pero el que no crea será condenado.
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Levántate y sé bautizado, y lava tus pecados invocando su numbre.
Hechos 22:16 Levántate y sé bautizado, y lava tus pecados invocando su numbre. La inmersión en agua es como invocamos su nombre – la petición que nos salva.
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