La descarga está en progreso. Por favor, espere

La descarga está en progreso. Por favor, espere

RECUERDOS DEL COLEGIO JUAN CARLOS DÁVALOS.

Presentaciones similares


Presentación del tema: "RECUERDOS DEL COLEGIO JUAN CARLOS DÁVALOS."— Transcripción de la presentación:

1 RECUERDOS DEL COLEGIO JUAN CARLOS DÁVALOS

2 JUAN CARLOS DÁVALOS (1887-1959)

3 “Siempre me ha gustado más pensar que trabajar, y más leer que escribir.”
“La literatura, para la que por desgracia he nacido, procuré que me fuese siempre lo más leve posible, para que no torciera en mí lo principal, que es la dicha de vivir”. Juan Carlos Dávalos

4 RECUERDOS DEL COLEGIO

5 Antecedentes del Colegio Nacional:
En 1847 el padre jesuita don Agustín Bailón estableció un Colegio de Primeras Letras y el entonces gobernador don José Manuel Saravia le solicitó que se hiciera cargo de un Colegio Secundario Oficial dependiente del gobierno de la provincia. Llevó el nombre de Colegio de la Independencia También llamado Colegio de Ciencias , comenzó a funcionar el 9 de julio de ese año . Cerró sus puertas en 1854. En 1855, un año después, el Gob. Rudecindo Alvarado buscó la reapertura del Colegio de Ciencias pero recién en 1857 bajo el gobierno de Martín Güemes Puch comenzó a funcionar. funcionó en el Convento que perteneció a los Padres Mercedarios (Actual edificio de la Escuela Provincial Dr. Benjamín Zorrilla).

6 En 1862 comienza a funcionar el Colegio de San José ( en recordación del Pacto de San José de Flores) hasta que en 1864 se crea el Colegio Nacional de Salta, “una casa de educación científica” (con alumnos internos y externos). Se inauguró el 1° de marzo de 1865.

7 CORPUS TRABAJADO Artículos publicados sobre el sistema educativo durante cuatro meses: marzo, abril, mayo y junio de 1942 en el diario El Intransigente: “Mi último examen” “Las rabonas o yutas” “Una juventud belicosa” “La sala de celadores” “Los profesores” “La coca” “Las excursiones” “La disciplina”

8 Jubilación, divino tesoro
¡Bien ganado el descanso en que te vemos. Mucho dicen treinta años de enseñanza! Cuántos, cuántos muchachos te debemos Un camino alumbrado de esperanza. Mas, tres recientes libros nos depara Con la jubilación, tu ciencia y tu arte, Lo cual viene a probar en forma clara Que las musas no quieren jubilarte

9 Alcemos, pues, las copas, sin excusas,
Por ambas cosas, dignas del salterio. Por la resolución del Ministerio Y el decreto contrario de las musas. Julio César Luzzatto

10 ¿Cuándo se jubiló Juan Carlos Dávalos?
A principios del año El sábado 18 de abril de ese año se realizó un almuerzo en el Bristol Hotel en su honor. Publicaba, al mismo tiempo, Ensayos Biológicos, Estampas Lugareñas y La Venus de los Barriales. En ese mismo año un periodista le hace una entrevista sobre el proyecto a nivel nacional de llevar al cine su obra La tierra en armas.

11

12 “Mi último examen” _¿No siente usted pena de jubilarse y abandonar el colegio?_ me preguntó mi colega del tribunal examinador, hoy conjuez y en otros tiempos mi alumno aventajado.

13 Mi último examen _ La jubilación me alegra,_ le respondí,_ porque a mis años el trabajo obligatorio se vuelve insoportable. Usted mismo comprobará que cuando se es joven el enseñar es tarea deleitosa, pues uno supone que como profesor aporta su grano de arena, arrima su ladrillo al edificio cultural nacional, y esta ilusión lo llena de orgullo insensato. Cuando usted haya avanzado tanto como yo en el camino pedagógico, se convencerá de que los colegios son escuelas industriales, o mejor, dicho, fábrica de bachilleres y no templos de saber y de cultura…

14 “La sierra sin fin de la sabiduría me aturde y me zumba en los oídos desde hace muchos años: ¡al cabo habrá silencio y tranquilidad en mis horas! LECTURA DE CASOS DE EXÁMENES

15 El examinador examinado
Suele decirse que si un cirujano de hace cien años se levantara de la tumba y entrara a un quirófano, no entendería nada, y no podría operar. También se dice que si lo mismo le sucediera a un maestro, podría enseñar sin problemas. Inés Dussel

16 “Las razones sentimentales y no la equidad gobiernan el mundo, y en los asuntos humanos pesa más la simpatía o el odio que los reglamentos”.

17 Algunas respuestas insólitas de los estudiantes

18

19 De controladores, controlados y descontrolados
Advertencia La autoridad competente advierte a la población que andan sueltos unos cuantos jóvenes cimarrones, matreros errantes, vagos y mal entretenidos, que son portadores del peligroso virus que contagia la peste de la desobediencia. Eduardo Galeano, Patas arriba. La escuela del mundo al revés.

20 El celador La palabra celador/a proviene del latín y es un adjetivo cuyo significado “que cela”, “vigila”. Por extensión, el sustantivo celador/a refiere a la persona destinada por la autoridad para ejercer la vigilancia. (Real Academia Española, 2006: 492)-

21 Los celadores “Nos habíamos provisto de una linterna sorda y de un paraguas. Extendimos en el suelo el enorme libraco de las clasificaciones y los paraguas nos sirvieron de pantallas, porque no se viese la luz en las banderolas, desde el atrio. Y allí fue Troya. Con infinito cuidado, en patibulario silencio, una mano fina y hábil, raspó números, añadió trazos y llenó casillas. Un tres se convertía fácilmente en un ocho; de uno resultaba lógicamente cuatro; de un cinco puede hacerse un seis y de un seis un nueve. Lo cierto es que allí no quedó títere con cabeza”. (El Intransigente, sábado 9 de mayo de 1942).

22 Entre la realidad y la ficción
“_ Voy a darle una tarjetita para su tío _dijo el Director y se levantó para traer de la vecina pieza recado de escribir. Pero apenas me dio la espalda, cogí mis “Obras Póstumas” y gané escaleras abajo, corriendo como alma que se la lleva el diablo. En el vestíbulo, el portero intentó detenerme. Le apliqué un cabezazo en la barriga, y brinqué a la calle. Fui a detenerme a varias cuadras del colegio. Y esa noche vi, por última vez, en el confín de aquel barrio chato, la inmensa mole del odioso edificio, destacándose inconmovible y negro en el horizonte.” (“La huida del colegio” en Estampas Lugareñas).

23 LAS RABONAS O YUTAS Cuando el alumno, llegado al colegio a primera hora, no estudió o no aprendió bien tal o cual lección, ¿ de qué mañas se vale para eludir el ser interrogado en clase?

24 LAS EXCURSIONES “En mis tiempos de celador las excursiones campestres, una por mes y por curso, constituían una costumbre pedagógica que subsistió por varios años, mientras fui profesor; costumbre explicable, puesto que los alumnos eran todavía menos de doscientos y sobraba tiempo para las clases teóricas”.

25

26

27

28

29

30 Cerrando el círculo… “¡Qué ha de ser grato el papel de domador de fieras! Un profesor cansado no es menos digno de conmiseración.” “Los entretenimientos más nobles –como el de dar clases- repetidos hasta la hartura concluyen por parecernos inaguantables. Para los caracteres bien templados, es cierto, se han hecho las profesiones difíciles, que exigen templanza y una paciencia infinita; por eso debería de colocarse en medio del patio, en cada colegio nacional, la estatua pedestre del profesor reventado”.


Descargar ppt "RECUERDOS DEL COLEGIO JUAN CARLOS DÁVALOS."

Presentaciones similares


Anuncios Google