Dijo Dios por el profeta Joel: Derramaré mi Espíritu sobre toda humanidad. Y al llegar Pentecostés estando todos reunidos el Espíritu de la Verdad vino sobre el mundo en Jerusalén.
Venid por agua, clamaba Isaías, profeta, y a los aljibes de la Salvación todos llegaron y bebieron Bautismo que salva en el Espíritu del Señor para ser con Él sarmientos adheridos a la Cepa, Cristo el Redentor.
Prestadme atención, Isaías proseguía, que la Palabra de Dios es antorcha que nuestros pasos guía para proclamar la Buena Nueva dando a conocer su Nombre.
Confiados en el Señor el bien haremos si nuestro pan con el hambriento compartimos y todos lo disfrutamos buscando juntos el Reino de Dios.
Pan que el Señor nos da como alimento, Copa alzada en brindis de Salvación cuando en memoria suya lo hacemos y en este Pan, del Cielo bajado, la Salvación encontramos.
Todos los pueblos al Señor alaben, y hágase por siempre su voluntad, que el Señor es nuestro Salvador, y nosotros mensajeros de su paz.
Dijo Dios Dijo Dios por el profeta Joel: Derramaré mi Espíritu sobre toda humanidad. Y al llegar Pentecostés estando todos reunidos el Espíritu de la verdad vino sobre el mundo en Jerusalén. Venid por agua, clamaba Isaías, profeta, y a los aljibes de la Salvación todos llegaron y bebieron Bautismo que salva en el Espíritu del Señor para ser con Él sarmientos adheridos a la Cepa, Cristo el Redentor. Prestadme atención, Isaías proseguía, que la Palabra de Dios es antorcha que nuestros pasos guía para proclamar la buena Nueva dando a conocer su Nombre. Confiados en el Señor el bien haremos si nuestro Pan con el hambriento compartimos y todos lo disfrutamos buscando juntos el Reino de Dios. Pan que el Señor nos da como alimento Copa alzada en brindis de Salvación cuando en memoria suya lo hacemos y en este Pan, del cielo bajado, la salvación encontramos. Todos los pueblos al Señor alaben, y hágase por siempre su voluntad, que el Señor es nuestro Salvador, y nosotros mensajeros de su paz. Juan Manuel del Río