EL PELLIZQUITO
"Una mañana el marido se despierta y le pellizca una nalga a su mujer y le dice: Si hicieras ejercicios,,,,,, para darle firmeza a ese culito, podríamos librarnos de esas bragas y usarías tanga…
La mujer se controló y le pareció que el silencio era la mejor respuesta.
Al otro día el marido despierta y le da un pellizco a los senos de su mujer y le dice: Si consiguieras dar firmeza a esos pechitos podríamos librarnos de ese sostén...
Aquello excedió el límite y el silencio definitivamente no era la mejor respuesta. Entonces ella se volvió hacia él, lo agarró del pene y le dijo:
Mira hijo de tu.... madre ¡¡¡si tú consiguieras dar firmeza a este palito, podríamos librarnos del cartero, del jardinero, del lechero y de tu amigo…!!!
Rey