Perla del Señor Por : N oris Capín
Soy la perla del Señor, el nácar inconfundible de Su Creación. Soy la tersura inigualable de la madreperla, soy la esencia marina que abraza las profundidades.
Soy la perla elegida, la que Dios colocó en la arena fina, la que sacó de la oscuridad de su concha estrecha.
El Señor me dió el lustre nato, diferente a los otras gemas, por Su Misericordia me salvó para vivir en alegría eterna. Y con esa confianza, manifestó Su amor por mí y me creó para ser perla hermosa del cofre preferido de Su Creación
Desde el cultivo de mi ostra, hasta la coraza que envuelve mi hermosura, soy la perla inigualable que Dios idealizó un día. Por eso, soy la más fina, la madreperla de suma belleza, la elegida del Señor, la que con Su amor llevó a la superficie del mar; para que yo, perla al fin, me adornara con la joya maravillosa que es la alianza que me entrelaza a Él…
¡Soy la perla del Señor!, ¡me divisó en el fondo del mar! ¡Soy el esplendor maravilloso de Su Creación!. ¡Soy Su preferida!… “Las aguas me rodeaban por completo; me cubría el mar profundo, las algas se enredaban en mi cabeza.” Jonás 2:5 ©Copyright Noris Capín 2006