Sentimiento y Vida Sentimiento y Vida juntos van, a la par, en una línea que se estira y gira en parábola circular. Porque la vida, como el sentimiento, por más que se estire, termina siendo circular, dígalo si no, aquel feliz y joven padre extasiado al contemplar al hijo recién nacido. Lo mira, lo besa, lo arrulla. Lo ve crecer lleno de orgullo y ternura, hasta que de pronto siente que aquel hijo ha crecido, se ha hecho hombre, y un día se le va. ………….
¡Abuelo!, -suena alegre la voz de otro niño, hijo de aquel que se fue ya crecido, y a su padre en abuelo ha convertido. Un sentimiento de nostalgia envuelve entonces al anciano y un deje agridulce de ternura hasta el alma se le mete y estremece viendo que la vida como vino se le va. Y así, a su vez, cuando el nieto crezca otro abuelo vendrá, que el recorrido vital de la existencia continuará. Porque vida y sentimiento juntos van, a la par, en línea existencial y circular. Juan Manuel del Río