El rapto topológico de Europa. Homenaje a René Thom Salvador Dalí, 1983 Rafael Pérez Departamento de Matemática Aplicada Universidad de Granada
En reconocimiento a sus trabajos en Topología, recibió en 1958 la prestigiosa Medalla Fields René Thom, el padre de la Teoría de las catástrofes ( ) "Prefiero el campo de la matemática en el que no se sabe muy bien qué se hace", en el que las fronteras son móviles y abiertas, y en el que hay una zona del conocimiento "en la que aún se puede experimentar maravillas".
La cola de golondrina Salvador Dalí, 1983
Sin título Serie de las catástofre Salvador Dalí, 1983
Sin título Cabeza de noble español fascinado por el modelos de catástrofe de cola de golondrina y dos medios chelos Salvador Dalí, 1983
El rapto topológico de Europa. Homenaje a René Thom Salvador Dalí, 1983
El rapto de Europa Tiziano,
“No es posible encontrar una noción más estética que la reciente Teoría de las Catástrofes de René Thom, que se aplica tanto a la geometría del ombligo parabólico como a la deriva de los continentes". ombligo parabólico Salvador Dalí ¿Está usted de acuerdo con el ingreso de España en el Mercado Común? Me parece una paradoja. Es Europa la que tiene que ingresar en España. «¡Hay que españolizar a Europa!», como certeramente dejó dicho Unamuno frente a las tesis germanistas de Ortega y Gasset. ¿Con qué fundamento? ¡Con un fundamento poco menos que geológico! Desde hace muchos años (y la cosa sigue sucediéndome), siempre que contemplo el mapa de Europa mi dedo índice se lanza instintivamente y se fija en un punto concreto entre las ciudades de Salles y Narbona. Partiendo de esta experiencia reveladora, siempre he afirmado que las fuerzas tectónicas que sostuvieron a Europa, cuando se produjo la disgregación de los continentes, actuaron en esa concreta zona. Muchos lo tomaron a broma hasta que Thom, uno de los grandes matemáticos contemporáneos, ha venido a darme la razón situando el lugar exacto en Perpignan. ÉPOCA - 29/04/1985
El rapto topológico de Europa. Homenaje a René Thom Salvador Dalí, 1983
A la pregunta de un periodista de Le Figaro, «¿Por qué tanto interés por la ciencia?» Dalí responde: «Porque los artistas casi no me interesan. Creo que los artistas deberían tener nociones científicas para caminar sobre otro terreno, que es el de la unidad».